Los sobresaltos de la Vida

Capítulo 2

Emily Woods

Emily Woods, una chica sencilla de Aurora – Colorado, menor de 4 hermanas: Sam, Brooke y Amy; no suele esperar mucho de la vida o al menos eso pretende, sin embargo, por dentro tiene la esperanza de encontrarse con algo bueno todos los días, lo cual aumenta la cantidad de decepciones, lo sé, eso apesta!. En fin, quien creería que, desde que era un feto en el vientre de su progenitora todo iría mal, el casi quedarse sin madre durante un embarazo y parto riesgoso, no habían sido suficiente. Pero antes de iniciar, recordemos uno de los momentos más intensos de su vida; 13 años antes de la actualidad.

¡Aquí vamos!... 6:00am. de un cálido lunes, Emily con tan solo 5 años se encontraba sentada en la orilla de la cama recordando y tratando de analizar la nueva informacion para ella, esa que le habrían relatado la noche anterior; papá se había ido de la casa hace 3 años ya, porque a mama no le gusto verlo con otra mujer, aunque esto sonaba un poco raro, ella lo aceptaba pero siempre guardaba la esperanza de que él  volvería a vivir en casa, reparando esta pequeña familia.

Sam, Brooke y Amy aun dormían, mientras su mamá se levantaba a preparar el desayuno como de costumbre, parecía un buen día para asistir al kínder, Em no podía esperar ir al gran patio a jugar en el enorme castillo con ese gran tobogán lleno de arena.

Toda esa mañana se pasó de manera brusca.

--recuerdo que llegamos a casa, papá me dejó en la sala acomodando mi mochila a un lado del sillón como siempre, luego volvió a sus actividades cotidianas lejos de casa y de nosotras, las que algún día fuimos su familia perfecta; entré al comedor con la sorpresa de que mamá aún seguía poniendo la mesa, mientras espero la hora de comer, la escucho hablando por teléfono y para mi sorpresa le decía a la abuela que nos mudaríamos de casa.

Las siguientes 2 semanas consistirán completamente en empacar las cosas, lo cual volvía locas a todas, mientras que a Em, lo único que le preocupaba era que, si se mudarían de casa, quizás papá no sabría ni cómo ni a donde ir a visitarlas, así, sus inocentes esperanzas de la familia perfecta y reconstruida se quedaban atras. La vida suele ser así y las cosas pueden cambiar de un día para otro, o incluso, en un abrir y cerrar de ojos.

Durante un viernes común y corriente, Em llega a casa de su abuela mientras siente el sol sobre sus piernas atravesando la ventana del coche; al atar cabos luego de escuchar algunas conversaciones y de preguntar a Carmen, su nana en ese entonces, supo que las cosas ya estaban listas para mudarse y lo único que faltaba era la pequeña casa de muñecas y su maletín doctora de Hasbro.

Aunque su nueva casa era a 5 calles de la antigua y a 7 del colegio, al llegar allí, sintió como todo cambiaría desde ese momento, mientras, lo único bueno de todo, sería que aun compartiría habitación con Amy, la 3ra de las hermanas, su protectora.

Habían pasado ya 9 días desde la mudanza y hasta aquella tarde todo iba bien; Sam se encontraba en el último curso de la secundaria y quería mudarse a otra ciudad para estudiar arquitectura en una prestigiada universidad, o al menos eso entendía Em; al llegar la noche, su padre llego a casa de visita, fue en ese entonces donde todo empezo a tornarse tenso, habían lágrimas y gemidos por todas las habitaciones, se escucho decir a Sam gritando entre llantos que se iría a la universidad y no volvería jamás. Al ingresar a la cocina, ahogaba la tristeza y quizás hasta el enojo de las personas que se encontraban allí, su mamá solo repetía sollozando que todo estaría bien,  mientras que él, solo pedía perdón con lágrimas en los ojos y el rostro entre las manos; Emily no entendía nada, sintiendo por primera vez una gran impotencia al ser tan pequeña, mientras que nadie le explicaba lo que estaba sucediendo.

--Muñequita --dice su papá acercándose y apoyando su cuerpo en una rodilla, dejando a la vista sus ojos enrojecidos e hinchados del llanto-- tu sabes que papá sale con... otra mujer, cierto?-- Pregunto algo entrecortado.

--yo solo asentí --acompañando a papá con lágrimas y sin entender lo que pasaba.

--papa tendrá un bebe, un hijo --suspiro-- con otra mujer --dijo entrecortado y replico-- lo siento mi niña.

Ella no sabia que era lo que más le partía el corazón, ver a su padre, el héroe que ella lo consideraba, al amor de su vida, a quien creía perfecto, derrumbado y llorando o sentir y entender de que ya no habría vuelta atrás, de que él no volvería a casa nunca más, de que ya no serían nunca más, una familia perfecta, feliz y unida. El único consuelo que le quedaba era la seguridad de saber que su papá siempre seria su papá.

--en ese momento no supe cómo reaccionar, solo deje caer las lágrimas, suspire y abrace lo más fuerte que pude a mi padre, como cuando me encontraba asustada y Amy me cuidaba.

De cierto modo, Em estaba feliz de conocer a un nuevo bebe, aunque no estaba segura de si eso era lo mas adecuado, le asustaba la idea de que un nuevo niño pudiera alejarla de papá, y no sabía si tendría que llamarlo "hermano" o no.

Solo le quedaba aceptar lo que pasaba y lo que estaba por venir, dándole tiempo al tiempo y dejando que los mayores tomen sus decisiones.

--aún tengo memoria de haberle pedido a Dios que nos ayude y prepare para todo lo que estaba por venir.