''Una vez alguien me dijo que no debia desanimarme, que todo problema tiene un final.. Pero, ¿Y si el problema soy yo?
Morir es una promesa, huir es un sueño✁
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Narra _____.
// Corri y Corri, como si mi vida dependiera de ello. //
Arrastre a Fabiola como pude, alejándola de aquel lugar, aunque ella se quejaba de dolor, no sé cómo lo hice pero lo logre.
Ahora ¿Cómo salgo de aquí? Mire a los lados, buscando algo que me parezca ''familiar'' pero nada, suspire agotada, Fabiola tenía los ojos cerrados, parece que de tanto dolor, se quedó dormida. Bueno, eso será un problema menos, ahora solo seguiré buscando
Deje a Fabiola en el suelo, me daba gracia verla asi.
Pareces borracha –Hablé en un susurro, soltando una risita.
Ella sonrió, a lo mejor me escucho.
Segui con la búsqueda, como estábamos en una calle cerrada, era mas difícil, a lo lejos en la entrada del callejón, se visualizó una luz de una camioneta, me asuste, comenze a temblar
Solo falta que sea un asesino -Hable.
De la camioneta se bajó una chica, venia corriendo hacia mi, pero no venia sola, estaba acompañada de 3 chicas más.
Y en ese momento las reconocí Kelly, Maureen, Alexandra, Karen.
Por fin las encontramos –Hablo Kelly bajándose de la puerta trasera, corriendo a abrazarme.
Si, también me alegro. –Conteste correspondiendo aquel abrazo, que me mantenía cálida.
Una difícil noche eh? –Hablo aquella voz que extrañe tanto, Alexandra.
Si, bastante. –Conteste
Yuju! Mi pierna comienza a doler –Hablo Fabiola, me había olvidado de ella.
Ah si, ubs –Hablo Maureen, cogiéndola de sus piernas.
Yo ayude cargando su demás cuerpo, esta chica es bastante pesada.
Donde an estado? -Hable, mientras tratábamos de mover la
Pues.. -Hablo Alexandra
Pues.. tenemos dos problemas –Hablo Karen, Interrumpiéndola
Esperen, ¿Dos problemas? Fabiola cuenta como uno solo. –Hable yo.
Me refiero a este –Dijo Karen señalando a Fabiola- Y aquel.
Un carro estaba acercándose, a velocidad normal, color negro, esta vez, claro que eran ellos.
Rayos –Soltó Alexandra.
Estaba muy cansada como para cargar a Fabiola y correr.
Ustedes váyanse, y llévenla. –Hable yo, ordenándoles.
Estas loca si piensas que te dejaremos –Hablo Alexandra.
Comenzaron a bajarse aquellos chicos, lentamente, como torturándonos con su presencia, tenia miedo, esta vez podría morir por escaparme, ellos tampoco aguantaran tantos caprichos mios, y de mis amigas.
Vale –Fue lo único que salió de mi boca en ese momento.
Los chicos se acercaron totalmente, no tan cerca, no tan lejos, a distancia suficiente.
Vale, hagamos esto fácil. –Pronuncio aquel chico llamado Bryan.
Ustedes hacen caso y.. –Hablo Alan, pero lo interrumpí.
Estás loco si creen que haremos eso, no somos marionetas a las cuales manejaran a su regalada gana. –Se me salió sin ni siquiera pensarlo.
Cállate, por que gracias a ti, pagaran todas. –Hablo Alonso.
Bueno, bueno ya, al grano –Hablo Maureen, esta chica es impaciente.
Si se van con nosotros, no mataremos a su amiga. –Hablo Jos.
¿Qué amiga? –Hablo Karen esta vez.
La que está detrás de ustedes. –Termino de decir Alan.
Nos volteamos, Freddy sostenía a Fabiola, me imagino cuanto dolor, su pierna estaba sangrando, aunque ella estaba durmiendo, o incociente.
Déjala! –Grite furiosa.
Tu cállate! –Grito Jos.
Bueno ya! Decídanse –Termino Freddy.
Mire a las chicas, esperando una que otra respuesta, pero sus cabezas estaba agachadas, bien, tendré que ser yo la de la decisión.
N- no.. –Susurre-
Segura? –Alan Hizo un gesto a Freddy, que enseguida con un arma que no se de donde saco, tiro un balazo en el suelo.
Eso si me asusto.
Esta bien! –Hablo Karen.
Pero por favor –Suplique- Fabiola necesita de un hospital.
De eso nos encargaremos nosotros –Hablo Bryan.
Jos me tomo de los brazos fuertemente, poniéndome en el asiento de adelante a mi y a Alexandra, y las demás en baúl.
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Pasábamos por muchos lugares desconocidos, a lo mejor fuimos a otra ciudad, llevábamos horas de camino en silencio, esto es realmente incomodo.
Pararon el auto en un gran lugar, mas bien en una ''gran casa'' nos bajamos del auto, y caminamos hacia esa gran casa, que estaba muy bonita, no creo que sean de ellos.
En la entrada estaba Rocio, aquella chica que tanto odio, gracias a ella, mis amigas y yo sufrimos muchas cosas, me solte de los agarres de Jos como pude, el cansancio de un momento a otro se esfumo, corri y corri, y me abalance sobre ella.
Quítate, ME DUELE! -Grito Rocio, cubriéndose de mis golpes.
No me importa en absoluto! -Grite, Bryan estaba jalan dome de la cintura, intentando safarme, pero no lo lograba.
_____! -Grito Alan, tomándome mas fuerte esta vez, hasta dolió
Vale! Ya! -Grite, y me levante como si nada.
Te advierto princesa que en este reino mando yo. -Dijo Rocio con cierto Asco
Disculpa? Jaja! Un animal no puede reinar. -Hable
Jos me hizo una señal de que me calle, pero lo ignore.
Basta! Ya vi que vienes bien.. -Me miro con asco.- Mejor me callo.
Si mejor callate -Susurre para que no escuchase.
Bueno, Bienvenidas a su peor pesadilla, disfrutenla! -Y Se marcho aquella chica.
Muy bien chicos, -Hablo Jos- Llevárselas.
Intente irme, pero Jos me sujeto.
No soy idiota como para dejarte sola, ahora, olvídate de tu privacidad.
