La Casa de las Historias.

1.- LA ADVERTENCIA.

Loretta Caraz. Tenía solo doce años cuando todo sucedió, pero aun así recuerda perfectamente bien lo que paso el trece de octubre del dos mil seis. Aunque este relato comienza quince años después, nos iremos a donde todo comenzó, en la mansión Caterpiar en la pequeña ciudad de CarrisonStroke.

Jugaba como de costumbre en el patio cuando de repente capto su atención una niña que apareció a unos quince metros de donde ella estaba.

-¿Quién eres?-pregunto Loretta cuando vio a la niña, pero esta no respondió, simplemente salió corriendo en dirección opuesta a donde estaba y Loretta intento alcanzarla.

Después de mucho correr perdió a la niña de vista, entonces se dio por vencida y decidió volver a casa para que sus padres no se preocuparan pues se había perdido de vista en los gigantescos jardines de una de las mansiones más extrañas y antiguas de la pequeña ciudad de CarrisonStroke Washington.

Cuando se encontraba otra vez a la vista de la gran mansión, sucedió lo que marcaría su vida para siempre, pues la mansión exploto. Frente a sus ojos. Las ventanas salpicaron miles de cristales rotos y muchos aterrizaron como navajas sobre Loretta, lo que siguió, Loretta no lo recuerda, pero yo se los contare:

El suelo comenzó a temblar. Loretta cayó al suelo inconsciente y la mansión empezó a caer hasta que quedo totalmente derrumbada. Los medios, la policía, bomberos, gente chismosa y rescatistas acudieron alrededor de cuatro horas después de lo sucedido.

Se encontraron los restos de los padres de Loretta, y al bebe recién nacido calcinado bajo los escombros. Cuatro mujeres que después serian identificadas como las mucamas y dos hombres quienes eran los mayordomos.

Y la pobre Loretta se quedó sola en el mundo. Ningún familiar fue a preguntar por ella o buscarla, nadie la quiso y se crio en el orfanato Carrison. Donde fue rechazada muchas veces por varias familias y donde sufrió varios episodios psicológicos y depresiones, además de una soledad tremenda y pesadillas frecuentes donde podía ver a su madre entrar a la casa y una vez cerraba la puerta, la casa explotaba.

Quedaron algunas cicatrices en su cuerpo, sobre todo en sus brazos. Nunca supo a qué conclusión llegó la policía con respecto a la muerte de sus padres, y siempre se lo pregunto he investigo, hasta que un día se hartó de todo y simplemente se escabullo del orfanato para llegar a Nueva York, donde comenzaría desde cero tratando de olvidar su terrible pasado. Con respecto a aquella niña que vio, simplemente la olvido, hasta que una noche, años después...

Loretta despertó de golpe y miro por todos lados. Su cuarto estaba a oscuras, su corazón latía con fuerza y un sudor frío emanaba por todo su cuerpo. Intento recordar lo que soñó pero no logro hacerlo, entonces miro a una esquina de su cuarto y a la mitad de la noche y en un mortal silencio, escucho una risa de un niño que provenía de la sala. Salió de la cama no sin antes sacar de su buro un cuchillo de cocina. Se apartó el cabello negro del rostro y lo puso tras sus orejas y fue directo hacia la sala, sin darse cuenta, una especie de ente demoníaca sin forma física aun pero solo con dos puntos dorados como ojos la observa salir del cuarto.

Cuando llego a la sala escucho la risa otra vez y se abrió la puerta de la cocina y Loretta corrió hasta ella y cuando la abrió se topó con la misma niña que vio cuando sucedió la tragedia de sus padres y donde toda su vida quedo destruida.

-¿Quién eres?-pregunto Loretta un tanto asustada.

La niña se acercó y comenzó a hablar:

-De vez volver a CarrisonStroke e ir a la que alguna vez fue tu casa, debes ir y resolver todo lo que está pasando. Debes resolverlo, o la cosa vendrá por ti.-dijo la niña algo inquieta.