The Last Man Standing

Capítulo 58 "¿Nueva vida?"

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Papá me había pedido quedarme en un cuarto de la mansión y al lado mío le permitió quedarse a Asenet.

-Ve a ducharte y descansa hija -asenti -Le pediré a Paul que te lleve ropa limpia nueva

-Gracias.. -El asintió y me dirigí al bonito baño que había cerca de la habitación, entre y cerré la puerta. Me desnude y abrí el grifo, seguido metí mi cuerpo para lavarme y pensar un rato. 《¿Habrá sido correcta mi decisión?》...

Acaricie mi abdomen como solía hacerlo, me sentí terriblemente mal al sentir un gran vacío, comencé a llorar como no lo había hecho y caí sobre mis rodillas con el agua cayendo en mi rostro. No se cuanto tiempo dure así hasta que me canse y decidí salir. Abrí la puerta encontrandome con una muda de ropa nueva fuera de esta, la tome y fui a mi habitación para cambiarme.

...

Estaba a punto de dormir cuando escuché a alguien tocar la puerta.

-¡Adelante! -La puerta se abrio lentamente mostrando a Asenet tímida. -¿Qué sucede? ¿Necesitas algo? -Pregunte amable y ella negó.

-Quería saber.. si.. yo.. -Levante la ceja y se sonrojo -Podía dormir contigo.. -Escondió la cara entre sus manos y sonreí.

-Claro, porque no -Sonreí y ella dio un saltito emocionada. Acomode la cama y me recoste, ella hizo lo mismo del otro lado, era una cama grande así que no era incómodo ni nada.

-Sabes.. -Hablo ella. -Me recuerdas mucho a mi hermana mayor.

-¿De verdad? -Asintió

-Se parecen un montón incluso físicamente

-Valla -Ella sonrió

-Yo dormía con ella cuando tenía miedo, perdí a todos y me quedé sola así que ya no podía tener miedo. -La mire con tristeza pues no entiendo porque el mundo tenía que ser así dando tanta tristeza..

-Lo siento mucho.. -Dije en un susurro

-¿Y tu porque estas tan triste? -Indago curiosa.

-Por un montón de cosas..

-Puedes contarme si quieres -Asenti -Seamos amigas

-Seguro -Sonreí.

Y charlamos un montón incluso le conté algunas cosas, hasta que el sueño nos gano y nos quedamos dormidas.

....

Desperté cuando la luz entro por mi ventana encontrandome sola en la gran cama. Me sente y en la mesita al lado de la cama había un plato con dos sándwich y un vaso de jugo de naranja acompañados de una nota:

"Gracias por dejarme dormir contigo :) te he preparado esto con mucho cariño y porque es lo único que se preparar xD y Jesús dice que debes descansar así que come y quédate en cama. -Asenet y Jesus"

Una sonrisa se formó en mi rostro.

-Quizá no sea tan malo vivir aquí -susurre para mi misma.

...

Habían pasado un par de días. Jesús me había contado que Daryl sabía que yo me encontraba aquí pero en este tiempo ni siquiera había venido a verme y por cada día que pasaba más me desepcionaba.

Jesús y Asenet me impedían hacer trabajos hasta no recuperarme, comenzaba a llevarme bien con la gente aunque Asenet y yo éramos las más jóvenes.

...

-¡Escondanse! ¡Ya! ¡Rápido! -Entró Jesús entre Asenet y yo que nos encontrábamos en mi habitación haciéndonos trenzitas en el cabello.

-¿Qué sucede Paul? -Pregunté asustada.

-Negan ya viene, ya sabes por que, pero el se ha llevado a las pocas jóvenes que teníamos aquí porque le gustaron y no permitire que se las lleve a ustedes. Quédense aquí y si escuchan algo inusual escondanse, debajo de la cama ¿Entendido? -Asenti algo asustada y el salió de la habitación.

-¿Quien es Negan? -Pregunto Asenet preocupada.

-El peor de todos -la tome del brazo y nos dirigimos a la pequeña ventana que había en la recámara. Por ahí pudimos ver cuando parte del grupo de Negan ingresó y como empezaron a llevarse todo, afortunadamente se fueron contentos con lo que acababan de robarnos. Suspire algo aliviada cuando el portón se cerró y los salvadores desaparecieron.

-¿Sólo se llevan todo y nadie hace nada? -La mire y apreté los labios.

-No lo entenderias -Hable recordando al pobre Eugene y el horrible final que Negan le había otorgado. -Ya intentamos acabar con ellos pero son demasiados, hemos estado estos últimos meses elaborando un plan para librarnos de ellos. -Asintió conforme.

...

Habían pasado ya otra semana, quizá dos o más. Ya me sentía bien así que había ayudado a la gente de Hilltop, aprendí a hacer espadas gracias al herrero y también ayudaba a alimentar a las vacas.

En este momento estaba alimentandolas hasta que un hombre gritó.

-¡La gente de Negan! -Mi cuerpo se tenso al instante hasta que una mano me tomó del brazo y me jaló, me dejo atrás de un gran arbusto junto con Asenet al parecer estaba cerca de ella.

-¡Quédense aquí! ¡No salgan hasta que esos tipos se hallan ido! -Asentimos al unísono, ambas estábamos petrificadas del miedo.

-No, no, no. Esto esta mal -Hable para mi misma y Asenet me miro confundida.

-¿Qué sucede?

-El es Negan y si el viene en persona es porque las cosas están mal. -Trague saliva en seco y ambas nos dedicamos a mirar. Negan dio su discurso, que no estaba feliz porque ya no le dabamos lo mismo que antes y merecíamos un castigo. Negué recordando.

-¿Un castigo? -Un escalofrío recorrió mi cuerpo y comencé a temblar. Jesús trató de hablar con el pero Negan dijo que "Sólo así entenderiamos" miro a sus alrededores y yo me escondi más junto con Asenet.

-Guarda silencio. -Ella asintió temerosa, escuchamos que Negan grito " Traigan a ese tipo y que nadie se interponga" Escuchamos un par de gritos y volvimos a ver a través del arbusto, Negan había tomado a uno de nuestros hombres y lo habían arrodillado frente a él.

-Tendrán que entender por las malas -Sacó a relucir a Lucille y aunque Jesús intentó charlar con el, le dijo que si seguía hablando lo mataría a el también. Jesús se quedo en silencio con una mirada llena de impotencia y Negan le propinó un golpe al hombre en la cabeza, le cubri la boca a Asenet ya que estaba a punto de gritar debido al susto. Negan le dio un par de golpes más dejándolo totalmente irreconocible. La gente del lugar lloraba mientras Negan se llevaba más de nuestras cosas, cuando por fin desaparecieron. Nosotras seguíamos en estado de shock hasta que Jesús vino por nosotras.

Aunque trató de ocultarlo podía ver la impotencia en sus ojos, le pedí a Asenet que nos dejará solos para poder hablar.

-Hey, no es tu culpa. -Trate de darle ánimos.

-Claro que si, ya deberíamos haber matado a esos tipos. Ya nadie debería morir.

-No es tan fácil. De que acabaremos con ellos ¡Lo haremos! Pero siempre habrá pérdidas y no serán tu culpa -Asintió no muy conforme.

-Iré a buscar provisiones, esos sujetos nos dejaron con casi nada ¿Puedes acompañarme?

-Por supuesto

-Salimos en una hora