Hoy tocaba misa, otra vez. Busqué mi mejor atuendo.
Creo que me quedaré con ese, porque el maquillaje me favorece muchísimo.
Luego de decidirme por mi ropa, llevé a Penelón a la peluquería, para cambiarle un poco su estail.
Subí una foto al tamblor, para que la gente se deleite con mi belleza.
*LUEGO DE MIL HORAS*Entré a la iglesia junto a Penelón.
Estaba el pastor exorcizando a la laidi jaja, pero no me fijé en eso, yo sólo miraba su seductora papada.
Su papada colgando, brillando debido a su sudor de gordo. Me encanta.
*CUANDO TERMINÓ LA MISA*
-Hola, lonjudo.- moví mi mano en forma de saludo -Este es Penelón, mi nieto.-
-komo tu te iama io no ce.- dijo Penelón, preguntándole al papudo su nombre.
-Hernaldo.- Una sonrisa sincera se formó en su rostro, provocando que su papada se hiciera más notoria.
-Estaba pensando en invitarte a mi casa.- Me puse nerviosa al decirle eso al papudito -¿Qué opinas?-
-Me parece bien.- dijo el grasoso papudo -¿Pero cuándo?-
-Mañana, a la hora que quieras.-
-Perfecto, Juana.-
Penelón se despidió del gordito de una manera coqueta.
-No lo regales miradas coquetas a mi hombre.- le dije en advertencia.
Esto está lleno de turbación
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Mi Pastor El De Las Lonjas
ComédieJuana se siente atraída por las lonjas del sacerdote Hernaldo.