Un Viejo Amigo.

Cap 12 Clase pérdida.

Aaron en Multimedia

— ¿Como te encuentras?—Sarah de verdad se veía preocupada, veo que alguien se acerca a nosotras, alto, cabello castaño y ojos color café... es James.

—Mejor—es lo único que logró decir.

—¿Todo esta bien?— me miro como si no supiera lo que me ocurrió.

—Si.. eso creo—responde Sarah, el asiente, no tan seguro de su respuesta.

Scott también se veía preocupado, pero no lo demostraba solo tenia su vista en un punto muerto en el suelo del ancho y extenso pasillo, me pregunto que estará pensado, su mirada es neutra, y me da escalofríos.

—Creo  que deberíamos de volver ya— esta vez me mira solo a mi.

Todos asintieron y nos encaminamos hacia las escaleras, parecían infinitas en mi opinión odiaba subir estas escaleras en especifico, vamos por el ultimo escalón y suena la campana de salida, Diablos primera vez que pierdo una clase, siempre era responsable en mis cosas escolares no quería tener el mejor promedio pero tampoco el peor, estar de 2do en todo me agradaba ya que no recibía mucha atención, pero supongo que siempre hay una primera vez.

—Maldición , perdimos la clase— murmura Scott

—Lo siento por hacerlos perder la clase de Matemáticas no fue mi intención desmayarme tan repentinamente—Scott me mira detalladamente, y articula una curva con sus labios que forman una sonrisa, trago saliva ruidosamente Sarah esta tomada de la mano con James, y Scott y yo estamos de tras de ellos.

—Ven te ayudaré— sin preguntar me alza en sus brazos como ah un bebé, y deposita un cálido beso en mi frente.

Me sonrojo, guardo silencio por que no se que decirle o como responder a su afecto.

Nos encaminamos al salón de detención, los pasillos del Instituto dan miedo, el clima está frío y el cielo gris, me estremezco en sus brazos y me apega más a su pecho.

Al subir las escaleras nos encontramos a Rebecca, una de nuestras amigas por así decirlo.

—¿Que tal? — la saludo normalmente, y ella me observa extraño pero con una expresión de gracia en su rostro.

—¿Ahora tienes un sirviente? — rie de forma irónica.

—Me acabo de desmayar, solo me está ayudando— le digo sin gracia.

Y Scott me interrumpe.

—La tengo que ayudar, para eso soy su novio ¿no?— el rie y Rebecca se que callada no sabe que decir.

<<¿Qué?>>

¿Somos novios?  Que va.
Solo lo dijo para cabrearla.

—Venga Adiós, os veo luego— se despide y se marcha.

Sin decir nada nos encaminamos al salón de matemáticas donde aun seguían nuestras cosas, recogimos y nos dirigimos al Castigo.