-¿Y tu nunca te cansas de ir detrás de mí?-Me cuesta decirlo pero una vez dicho, subo la cabeza y miro sus ojos.
-Nunca me voy a cansar ____. No hasta que me mires a los ojos cada vez que me rechaces. Sólo quiero saber qué he hecho.-
-Deberías saberlo.-Miento, lo único que ha echó es robarme el corazón.-
-Y lo he intentado. Es en lo único que he pensado estos tres días, ____.-Poco a poco me arrincona contra la puerta del vestuario.-Eres en lo único que puedo pensar.-Acaricia mi mejilla.
Siento esa calidez que tanto me hacia falta, su caricia. Cierro los ojos, intento grabarla aunque sea sólo por un momento. Siento una respiración y no es la mía su boca esta mas serca de mi. Mi corazón se agita con velocidad. Puedo sentir sus labios casi rosar con los míos pero, me volteo dándole la espalda.
-Andy, por última vez olvidame.-Y dicho esto me aferro al mango de la puerta.
Empujó para abrirla. No se abre. Vuelvo a intentarlo, la puerta Sigue en la misma posición. Más nerviosa lo vuelvo a intentar y no hay forma de abrir la maldita puerta ¡Mierda! Ahora repito la acción constantemente ¡¿Porque me tenía que pasar todo lo malo siempre a mi?! ¿Que pasa? ¡¿No hay más personas en el puto planeta que me toca pasar siempre estás situaciones tan desesperantes a mi?!
-¿Que haces?.-No puedo creer que Andy te todavía ni se haya dado cuenta de que tendremos que pasar la noche juntos en el vestuario.-
-¡Estamos encerrados imbécil! ¡¿O es que no lo vez?!-
-A ver deja.-Me aparta con cuidado y hace exactamente lo mismo que yo un par de veces.-Pues si, estamos encerrados.
-¿Y ya está? ¿No vas a hacer nada al respecto?-
-La que tiene prisa por marcharse eres tú no yo.-
Y en ese momento recuerdo que Kellin me estaría esperando en la salida y por el tiempo que estoy perdiendo ya llegó tardé.
-¡Mierda, Kellin!-Genial ______ después de tantos años y aún no aprendes a no pensar y hablar a la vez.
-¿Kellin? ¿Habias quedado con el?-
-¿Y a ti exactamente qué te importa?-
-Más de lo que piensas _____.- Que tierno es.
Quiero abrazarlo y gritarle al mundo que lo amo, quiero gritarselo a el. Por que estos cuatro días se me están asiendo una pesadilla más eterna de mi vida. No quiero
Soportar ni un minuto más cerca de él y ni poder tocarlo.
-Vamos a dejarlo.-digo haciéndome la molesta dirigiéndome hacia los bancos y taquillas donde nos solemos cambiar después de los entrenamientos.
Cada uno se sienta en una banca diferente. El uno enfrente del otro. No puedo dejar de sentir su constante mirada atravesar me con credibilidad. Cruzando miradas.
-¿Te importaría dejar de mirarme?-
-¿Por que te pongo nerviosa?-Dice divertido. ¡Que imbécil! Lo odio. Pretende hacerme reír.
-Más te gustaría.-Silencio durante unos motivos.
-______.-Volvemos a crear un conexión entre nuestros ojos.-¿Puedo hacerte una pregunta?-
-Ya me estas haciendo una.
-¿Puedo hacerte otra pregunta aparte de esta?
-¿Que quieres?-Mi tono es secó. No me gusta actuar así con el pero, no me queda de otra.
-¿Por que sigues vistiendo con ropa normal y llevas el collar que te regale...-Se acerca a mi y se sienta a mi lado.-...Si para ti no significó nada?-¡Mierda!-
