Una princesa diferente.

Capítulo 2

Le quita el tapón al pequeño frasco y se lo bebe, entonces me besa, yo obviamente le beso, entonces separo los labios y empezamos a enrollarnos, me separo un poco y trago saliva. De pronto desaparece esa sensación de atracción por mi mejor amigo.

-Sigues queriendo besarme?

-Qué?

-Que nos hemos besado

-Pero por qué?

-No te habías tomado la mierda esta, que por cierto, el tuyo sabe todavía peor. - dice mostrándome el frasco

-Lo siento...

-No pasa nada. Ha sido divertido.

-Bueno vamos - digo entre risas.

Salimos del servicio y bajamos al patio, y vemos a Nadia, la novia de Kevin llorando abrazada a Austin.

-Eeeh, Nadia, qué te pasa?

-Nada, vete a liarte con MI novio - me grita enfadada 

-Qué? -dice Kevin, confuso - qué dices?

-Que os ha visto, tío, si la ibas a poner los cuernos haberlo hecho con otra persona...

-Qué? no, no, no. No nos hemos liado.- digo yo - Si lo dices por que nos has visto en el baño, no nos estabamos liando...

-No? entonces qué? te estaba dando clases de lengua? - Dice Nadia

-No, lo has visto mal - dice ahora Kevin - a ver, déjame que te lo explique, vale? Wendy y Clear la han empujado y se ha dado con la puerta en la nariz y se ha hecho sangre en el nariz, y no nos estabamos besando, le estaba limpiando la sangre de la nariz.

-Y por qué no se limpia ella sola? - dice mirándome mal

-Porque tengo pánico a la sangre - digo tratando de sonar creíble.

-Aah, lo siento... - dice Nadia.

Kevin me suelta y abraza a Nadia, salimos del edificio y Austin me abraza igual que lo suele hacer Kevin, por un momento me parece extraño, pero paso un poco y seguimos yendo a la parte de atrás del instituto. Nos quedamos en una parte que hay un banco y que no se nos ve.

-Eeeh, heer, pasa un piti, no?

-Qué te crees que iba a hacer?

Saco de mi chupa de cuero el paquete de tabaco y le doy el cigarro, saco otro para mi y les ofrezco a Nadia y Austin.

-No tía, estoy dejando de fumar - dice Nadia

-Bueno, como quieras... - vuelvo a guardar el cigarro.

Saco el mechero y se lo paso a Kevin, enciende su cigarro y me lo pasa, aprieto los botones del cigarro para que sepa a mojito y enciendo el cigarro, le soy el mechero a Austin y hace lo mismo que yo.

Pongo música en español en mi iphone 6 plus y Austin empieza a cantar.

-Pero qué cojones? -digo yo- no sabía que te gustara porta.

-Vane, hay mucho que no sabes...

Yo me rio y por un momento me quedo mirando al suelo, sin pensar en nada, fumando mi cigarro, cuando Austin me da un golpecito en el hombro y me susurra al oído.

-Llevan así todo el rato - dice refiriéndose a Kevin y Nadia- No, en serio, mírales, menos mal que Nadia estaba dejando de fumar... 

-Tia, Nadia, toma un puto piti, pero dejar de pasaros el humo -digo riendo a carcajadas.

Nadia se pone roja de vergüenza y acepta el cigarro, aprieta los botones y enciende el cigarro con mi mechero.

-Ale, menos traumitas pa' la pipol - digo haciendo el mongolo.

-Vane, puedo hablar contigo? - me pregunta Austin.

-Claro -tiro el cigarro, ya terminado y nos levantamos del banco - dime - digo cuando estamos ya apartados de los dos tortolitos.

-A ver, no sé cómo decírtelo - dice haciendo que me tema lo peor - puffff, nos conocemos desde hace algo más de un año, y nos llevamos genial - yo asiento - y tenemos muchísima confianza el uno con el otro y nos llevamos como si fuéramos familia,  pero, me gustas - termina diciendo, haciendo que lo que temía fuera verdad - y me gustas muchísimo, desde que nos conocimos, desde que quedamos por primera vez, supe que ibas a ser algo diferente para mi, sabía que ibas a cambiar mi vida por completo.

-Austin... yo... - digo tratando de buscar las palabras correctas para no hacerle daño - lo nuestro, no funcionaría...

-Por qué?

-Por el simple hecho de que soy diferente...

-Y por eso me gustas - dice, sin comprender lo que trato de decirle.

-No lo has entendido, soy diferente en otro sentido, Austin, conoces todos mis secretos, sí, y sabes que soy... genética-mente diferente a los demás.

- Y qué pasa con eso? - pregunta

-Que soy inmortal, -digo- cuando cumpla los dieciocho años, me quedaré con esa edad de por vida, seguiré teniendo esa edad por toda la eternidad.

-Y no puedes hacer algo para que no ocurra eso? - dice, poniendo cara de cachorrilo abandonado.

-Sí, pero si lo hago tendría que renunciar a mis poderes... -digo- y sabes que adoro mis poderes...

-Sin más, como quieras - dice, ahora frío, más de lo que le había visto nunca.

Me doy la vuelta y me siento en el banco, cuando justo suena el timbre y doy la vuelta al edificio, entro por la puerta y subo a clase de biología.

Pasa la hora de biología, seguida por tutoría y religión, o en mi caso, alternativa. Si, soy una bruja que suda por completo de lo que pasara antes de que yo naciera. Vale, eso ha sonado muy egocéntrico. 

Al fin terminan las clases, cojo mi mochila y salgo al pasillo, donde todo el mundo habla animado por ser el último día de clases y por el hecho de que dentro de tres horas haya una fiesta en el instituto, organizada por los populares del instituto.

Me apoyo en la taquilla de Kevin mientras él saca su mochila de la taquilla, se gira y me da un beso en la mejilla.

-Hola puta - me saluda

-Juuum, te pasa algo hermaniito - digo mirandole mal

-Que vaaa

-Desembucha

-Nadia me ha dejado

-Joe, tato, lo siento mucho, estas bien? Me tienes para todo - digo

-Tranquila, si me la suda lo que haga con su vida, ahora voy a centrarme en mi hermanita - dice haciendo que me ria, le doy un abrazo y nos agarramos igual que siempre.

Bajamos las escaleras y salimos del edificio, vamos hacia la puerta principal del centro y salimos. Vivimos al lado, literalmente, yo siempre pienso que mi madre y sus padres se aliaron para que nos conociéramos y fuéramos mejores amigos, pero eso nunca lo sabremos así que ñe. Llegamos a casa, le doy un beso en la mejilla y entro en mi casa.

-Hola mamá, ya estoy en casa. - Grito al cerrar la puerta.

Dejo las llaves encima del mueble y voy a la cocina, veo a mi madre sentada en una silla, apoyada en la mesa, con una carta en las manos y triste.

-Hey, mamá, qué pasa? - Pregunto acercandome a ella.

-Es una carta de tu padre, dice que vendrá a buscarte mañana por la mañana, que ya te explicará él todo cuando llegue. - Dice

-Explicarme el qué? No puede obligarme a que me vaya con él. - Digo empezando a cabrearme.