El viaje

La profecía

Al día siguiente seguimos caminando y volvimos a ese bosque, ya me estaba fastidiando pero el sol en ese solitario rincón cada vez me llamaba más la atención.

No se porque, pero no le quise preguntar a April que era eso y quise averiguarlo por mi misma, estaba arta de que todos me dijeran lo que tenía y no que hacer.

Me fuí acercando lentamente a la luz y cuando ya estaba cerca hice lo peor que pudiera haber hecho, metí la mano.

Al instante sentí algo que nunca hubiera podido describir, como si algo me estuviera dando una especie de energía. No podía evitarla ni tampoco salir, cuando de repente alguien me tomó del brazo y me jalo hacia él.

Era un chico normal de mi edad, pero estaba loco diciendo "¡Es ella, es ella, la encontramos!". Le dije que se calmara y que me éxplique que es lo que acababa de sentir y porque estaba gritando eso.

Lo siento mi nombre es Michael, me dijo y ácabas de cruzar a mi mundo, nuestro mundo. Recuerdas algo, me preguntó.

Como que si recuerdo algo, recuerdo todo. Si, sin duda eres tu, me dijo, eres la salvadora. Como que la salvadora de que háblas?! De repente vi salir a April de la luz.

April que gusto verte! Dijo Michael con algo de sarcasmo, ya le contaste preguntó. Contarme qué, de qué están hablando.

Kaylie es hora de que sépas que es todo ésto y quién eres realmente.

April:

Recuerdas que te dije que tu me invocaste con tus lágrimas, bueno en parte si y en parte no. Tus padres no son tus padres, al menos los biológicos.

Tu eres la hija de Skyleen, diosa del cielo y Deadman, dios de la muerte. Hay una profecía que dice que cumplidos los dieciseis años emprenderás un viaje, pero no cualquier viaje, un viaje para unir los dos reinos o separarlos para siempre, a medida que vaya pasando el tiempo encontraras piezas de un rompecabezas.

Si las unes bien los mundos se unirán, por el contrario serán destruidos para siempre. Yo fuí enviada para ayudarte a emprender ese viaje, pero las piezas las deberás encontrar tu.

Kaylie:

Ok, voy a tratar de tomármelo con calma. Porque no me dijiste todo ésto antes!! Dije gritando ahora que voy a hacer, viví toda la vida con padres que no eran mis padres, soy una salvadora no entiendo nada y además me mentiste con lo de las lágrimas?.

Bueno.. No me ibas a creer si te decía todo esto desde un principio, dijo con un tono de arrepentimiento, algo tenía que inventar.