Capitulo 2 (Mentirle a papá)

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Mi madre aveces era algo extraña, me preocupaba claro, pero estara bien. Supongo.
Me dirigi al garage y encontre a papá buscando entre las cajas.

-¿Todo esta bien papá?
-En realidad, no. Hace un par de semanas traje unos aerosoles y los meti en una de estas cajas estoy seguro ¿Tu no los has visto Helena?

Me quede helada, si se las regresaba se arruinaria la broma, y tantos planes serian en vano.

-¿Helena?.-pregunta mi padre pasando una mano frente a mi cara.

-¿Si?.-pregunte distraida.

-Te pregunte que si has visto los aerosoles que deje aqui hace un par de semanas. ¿Los has visto?

-¡Ah!, eso... No. No los eh visto por ninguna parte papá.-y le di un mordisco a la manzana. -Seguramente nisiquiera los dejaste aqui.
-Tienes razon, suelo ser muy distraido. Pero bueno, vamos jovencita, o llegaras tarde.

-Esta bien. Pero... ¿Puedo manejar?.-pregunte con cara de inocencia.

-¿Que?.-se carcajeo.-¿Estas loca?

-¡Pero casi consigo mi licencia!.-contraataque.

-Casi, pero no. Tu unico error fue averle gritado "viejo calvo" a un señor que tenia preferencia para atravesar la calle. ¡Solo tenia como 80 años Hel!.-dijo en tono de reproche.

-En realidad, fue divertido.-y me sente en el asiento del copiloto.

-¿Divertido? ¡Casi lo arroyas!

-Casi. Pero no. Alcanze a pasar.

-Tuviste suerte, ahora podrias haver estado en la carcel.-dijo. Y arranco el auto directo al colegio.

Era insoportable tener que hablar con papá, siempre encontraba alguna razón para pelear o regañarme.

En un par de minutos ya habiamos llegado al colegio. Le di un bejo en la mejilla a papá y sali del auto.

-Diviertete en tu ultimo dia cariño.-dijo papá.

-Tenlo por seguro Bob.-me encantaba llamarlo asi, una vez, estando en tercero de primaria, me olvido a la salida y cuando llego le grite con lagrimas en los ojos ¡"Me olvidaste Bob esponja"!

-Adiós. Cuidate.-me dijo al cerrar la puerta del auto.

Al entrar, no podia ni pasar porque los pasillos estaban atestados de gente y como pude me dirigi al gimnasio.
Abri la puerta y enseguida la cerre con seguro.
Al fondo estaba Antony con su celular en las manos. Antony era alto, delgado y musculoso con una tez extremadamente blanca y su cabello era rizado y negro. Lo que más me llegaba a gustar de el eran sus tatuajes, tenia el abdomen y la espalda repletos de ellos. En pocas palabras, era guapisimo, y estoy totalmente segura de que si no fuera tan mujeriego e idiota me enamoraria de el. Pero, para mi suerte, el era mi unico y mejor amigo.
Llego a besarme, y claro, besa bien, que digo bien. ¡Besa exelente!, pero solo fue un beso y de ahi en más, nada pasara. Además ese beso fue hace dos años, en la fiesta de año nuevo y estabamos ebrios.
Jamás hablamos del tema.

-Hey, Helena. Hola cariño. Crei que jamas llegarias.

-Pues ya estoy aqui. Así que,  comenzemos.

-Claro, ¿Tragiste lo necesario?

-Si. Esta todo en mi mochila.

-Pues comenzemos.-y me sonrio con malicia.

-¿Antony?.-dije dando los ultimos toques con el aerosol verde en la pared.

-¿Si, hermosa?

-¿Que hora es?

-Son exactamente las 8:45am, faltna quince minutos para que lleguen a entrenar basquetball. Deberias darte un poco de prisa.

-Si. Casi, termino.

-Genial. Imagina la cara del director Pavel al ver su regalo de navidad de nuestra parte.-dijo retorsiendose de la risa.

-Lose, ya lo imagino... Listo. Vamonos.

  Guarde todo en mi mochila y nos dirigimos a clases a Antony le tocaba frances y ami literatura asi que tomamos rumbos diferentes.

-Adiós feo.-le dije avanzando por el pasillo derecho.

-Adiós hermosa.-y se dirigio al jardin trasero.
-¡Nos vemos a la salida!.-le grite.

Al llegar a literatura toque la puerta y me abrio la profesora Rachel.

-¿Porque llega tarde señorita Manson?

-Me retrase con el profesor West profesora. Pero, tengo un permiso.

-Bueno, espero que se ala ultima vez. Pase y tome apuntes del pizarrón.

En realidad ese permiso es de un dia que emferme. Y solo le cambio la fecha cada que lo necesito.

Me sente en la butaca, saque mi libreta, pero... ¡Mi boligrafo! ¡No estaba!.

-<Maldita sea>.-murmure.

¿Lo habre tirado en el gimnasio? Dios mio, estaba frita. Y lo peor es que ese bolígrafo tenia mi nombre.

Ya habian pasado treinta largos y aburridos minutos y tocaron la puerta.
La profesora se levanto a abrir y veo que el Michael, le dice algo a la profesora y ella se dirige a nosotros.

-¿Helena?.-me llama.

<<O más bien ami>>.-pense.

-¿Si?.-dije mirando a Michael quien tenia unos cuantos papeles en las manos.

-Te buscan.-dice, y después se dirige y se sienta en su escritorio.

Yo tomo mi mochila y salgo con la mirada de todos en mi.

-El director Pavel quiere verte.-dice Michael.

No digo nada. Solo asiento con la cabeza y lo sigo a la dirección.

Al llegar a la puerta de la oficina del director Michael me dio la indicacion de que pasara. Y lo hice.
Dentro estaba el director Paver sentado detras de su escritorio mirando unos papeles. Pero, algo llamo mi antencion en una de las sillas que estan frente a él estaba...
¿Antony? Esto no podia ser peor.

-Señorita Manson.-dijo con un tono de superioridad.-Tome asiento al lado de su compañero porfavor.

Me sente mirando perpleja a Antony que tenia la cabeza baja y en sus manos sostenia mi boligrafo.

Mi Verdadera IdentidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora