Estoy en mi casa, meditando, pensando, escribiendo, pero.. siempre aparece amber en mis pensamientos... Es... algo... muy raro, necesito aclarar mis pensamientos, no puedo seguir así, debo controlarme ...
Al día siguiente llegue a la clínica y fui rápidamente a las cámaras.
- hola nate, buenos días - dijo estella revisando unos papeles
- días estella - dije revisando la cámara de amber
- ella esta bien nate, esta dormida - se levantó y se puso al lado mio
- lo se pero, me preocupó por ella - quite la cámara y me senté, lejos de ella
- nathan por que no dejas que yo la vea contigo - pregunto recargándose en la mesa
- por que tus tratos no me gustan - dije poniendo mis brazos en mis rodillas mirándola fijamente
- solo hago mi trabajo - se cruzo de brazos
- y eso es bueno, pero yo no quiero que te acerques a amber - me levante - de ella yo me encargó y como te lo dije, tu encargate de los demás no te metas en mi trabajo - salí de ahí para ir con amber ya que ya había despertado
- nate, te debo un "gracias" por él simple hecho de quitarme a amber, nadie la puede controlar y me impresiono que tu solo lo hagas - dijo ella afuera conmigo
- ella ya no estará más aqui, así que pues.. De nada - camine alejándome de ella hasta llegar con amber
- puedo despertar bien sin necesidad de que tu estés aquí - dijo molesta al verme entrar
- como amaneciste - pregunte sentándome
- bien, tengo hambre - dijo cerrando sus ojos y acostándose de nuevo
- te traeré algo ahora vengo - salí de su habitación sin esperar respuesta de ella
*narra amber*
miraba las orillas de la habitación tratando de olvidar mi vida, me levante y camine entre las 4 paredes empezando a sentirme asfixiada, me sentía apretada, me sentía horrible, gire recargandome en la pared blanca cerrando los ojos.
esto no esta pasándome de nuevo no, no dejare que me atormenté -no, no, no, no, no - grite sentándome en el piso poniendo mis manos en mi cabeza tratando de olvidar, de borrar esos pensamientos, esos recuerdos, odio mi vida
comencé a golpear la pared dejando manchas de sangre en ella, los recuerdos venían como si los hubiera vivió ayer, como si fueran una luz incandescente, como un parpadeo.
seguía golpeando la pared quería borrarlos, ya no queria pensarlos.
gritaba, me golpeaba, golpeaba la pared, aventé la mesa desórdene la cama y de igual manera la aventé, las fuerzas no se de donde las saque, tal vez la desesperación me dio ciertas fuerzas hasta que abri los ojos, mi respiración era acelerada y estaba en un rincón de la habitación, no se como llegue aquí si estaba parada tirando todo a mi alcance.
mire mis manos, llenas de sangre, mis nudillos estaban morados, comencé a llorar, ya no quería estar así, seguía llorando hasta que nathan llego- que sucedió - dejo todo lo que había traido dejándolo en el piso y fue conmigo, me abrazo y sin dudarlo yo lo hice también, él me transmite confianza, es el primero que lo hace y no quiero que me deje - ya tranquila, estoy aquí amber estoy aquí, nadie te hará daño - dijo él acariciando mi cabello, lo peor es que nadie me hace daño, me lo hago yo por la culpa de ese señor
- nathan, nate - dije en un susurro, seguía llorando..
*
- quieres decirme que sucedió - aun estábamos en el suelo, seguiamos abrazados - tus nudillos amber que - suspiro - que fue lo que paso
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enamorado de una ¿loca?
Mistero / Thrillerleela, se que te encantará y te atrapara ... y no lo digo yo, lo dice mi caracola mágica