¡Pero yo seré el novio!

3

El local de aquel café estaba apenas con unos cuantos comenzales en su interior debido a ser plena mañana, por lo cual no seria mucho tiempo para cerrar momentaneamente para una reunión solicitada por el jefe.

Como cada tarde entre semana, el menor de los Matsuno estaba paseandose por el reducido Café, algunas veces tomando pedidos o entregando comida, o como en esa ocación, atendiendo la barra cobrando las cuentas y de vez en cuando preparando Americanos.

Entonces, el gerente del lugar les llamó a todos cuando se cerró por primera vez el lugar.
El reducido pero no carente personal se dirigió hacia la sala de empleados, en donde el hombre de traje les tenía una pequeña sorpresa.

-Como todos saben, este es uno de los mas solicitados cafés en esta ciudad, por lo cual debemos hacer de vez en cuando alguna clase de "evento especial"- anunció mientras desenrollaba un poster con una imagen de una Maid con una charola sosteniendo con esta un Smootie.- el de este mes de arranque será "Butler & Maid Café".

Varios de los empleados -en su mayoria mujeres- estaban fascinados con la idea, mientras que Todomatsu junto con algunos estaban dudosos con aquello.

"Mientras sea de mayordomo no hay problema" pensó el chico, aunque su alivio no duraria mucho.

-En esta lista tengo anotados a los que seran mucamas y los que vestirán  como mayordomos...

"Humillante" pensó el chico mientras se golpeaba la frente contra la pared de los vestidores, mientras una de sus compañeras le miraba con algo de pena ajena.

-Totty, te ves lindo en vestido. No es tan malo...- trató de animarle con una sonrisilla nerviosa.

-Ese no es el problema... ¡¿Por qué me dieron un disfráz de chica cuando soy claramente un hombre?!- preguntó con sus mejillas ardiendo en carmesí mientras trataba de no ver su reflejo en el espejo.

-Honestamente, Totty... la primera vez que te vi, hubiera jurado que eras una chica- admitió mientras se rascaba la nuca.

Ese comentario solo lo habia hecho sentir peor, incluso fue confundido de genero por su propio gerente, cosa que habia causado el porque de usar ese atuendo.
Suspiró al recordar que ya se habia vestido de mujer con anterioridad, aunque habia sido solamente en prescencia de sus hermanos mayores y para ir a la cita grupal en donde se encontró con su <en ese entonces> nuevo socio.

Si de algo le servia de consuelo, habia tres cosas:

1. Si el parecía chica, sus hermanos sextillizos también.

2. Si de verdad se veía como una, no habria mucho problema.

3. Nadie conocido iba por esos lares al ser una zona de alto nivel.

Con esos argumentos a su favor, levantó el semblante y se dirigió a la puertilla mirando a su compañera.

-El Café abrirá dentro de poco, mas vale apresurarnos- dijo con una leve sonrrisilla, aunque estaba incomodado por el tamaño de la falda al ser corta, y por si fuera poco, bombacha.

Matsuno Todomatsu estaba ahora en servicio, el cual era impecable como siempre; unas cuantas miradas fisgonas buscaban ver que habia debajo de aquella faldilla, cosa que Todo notaba y le hacian sentir aun mas incomodo.

Eran casi las siete de la tarde y el establecimiento se vaciaba de a poco, solo quedaban unos cuantos y alguien que recien entraba y ya se habia establecido en una mesilla.

-¿Puedo tomar su ord...-

Sintió como si se fuera a caer cuando se dió cuenta de que la persona a la que atendía era nada mas y nada menos que su "querido" novio Atsushi, el cual tambien le miraba con sorpresa y los ojos abiertos como platos.

-¿Todomatsu?...- dijo realmente sorprendido el castaño.

-¡¡N-no es lo que tu crees!!- exclamó con sus mejillas iluminadas en escarlata hasta las orejas- y-yo... eh...- tartamudeaba tratando de encontrar una explicación-... es por... ¡cuestiones laborales!

Atsushi estaba absorto, observando con mirada de estupido lo "linda" que se veía su "novia" en ese atuendo, incluso parecía que su cintura se acentuaba, ademas de que sus lampiñas y delgadas piernas mostraban su esplendor, aunque tuvo que quitar su exprecion boba para aparentar que todo esta bien.

-Oh, ya veo- dijo en tono tranqilizador con sus labios levemente sonrientes- asi que... Es aqui en donde trabajas.

-Si...- reafirmó- y... ¿Qué te trae aqui?...- indagó tratando de calmarse, pero era mas que vergonzoso estar vestido asi frente a Atsushi.

-Bueno... terminé mi jornada y pensé en venir a tomar algo... si no es mucha molestia-

-C-claro que no... ¿qué pedirás?-

-.-.-.-.-.-.-.

Gomen... no me pude resistir :v

Lamento la tardanza ;-;

-Rabbitt