Inocencia y Perversión [Raito x Subaru]

Capítulo 12

Una vez terminado lo que yo apodé "el suplicio de los dedos", Raito apoyó su punta en mi entrada. Tenía miedo de que se sintiera aún peor. Siempre le he temido al dolor.

-Te diría que esperásemos un rato a que dejase de doler, pero si no lo hago ahora dejarás de dilatar y tendré que empezar de nuevo- dicho esto y sin preguntar, se dispuso a introducir esa cosa dentro mío. Gruñí de dolor.

-Aghh~ y agradece que no mide treinta centímetros como imaginabas- dijo en tono burlón mientras me penetraba de manera algo (muy) cruel.

Intentaba no gritar. Dolía, realmente dolía y el que me tratase así no lo hacía mejor. "Por lo menos bésame" pensé, fastidiado. Mi primera vez con el amor de mi vida y me trataba como si yo no importase.

Pasaron varios minutos eternos que transcurrieron en silencio. Casi podía oír los latidos de nuestros corazones, aunque nuestras respiraciones arrítmicas se llevaban la atención. Poco a poco comencé a notar que ya no sentía tanto dolor como al principio.

-Raito- jadeé -Ya no me duele.

-Lo sé, Subaka-kun, por eso dejé de moverme... Sé lo que hago, no me subestimes- dijo de manera dura, como si me retara. Me recordó un poco a mi padre, y por alguna razón extraña eso me gustó.
Le di una palmada en el trasero.

-Ya hazlo, estoy listo- ordené, decidido. Él hizo caso obedientemente e inició un balanceo suave y placentero sobre mis caderas. Me atreví a gemir cada vez más.

Dejé que pasara un largo rato. El dolor se encontraba totalmente opacado por el placer. Pedí que aumentara el ritmo. También él dejó que los gemidos surgieran de su garganta repetidas veces.

Sin darnos cuenta, la velocidad se intensificó sola. Mis manos estaban inquietas y se paseaban por la cara, el cabello y la espalda de Raito; por la cabecera de la cama, por las sábanas, por las almohadas. Llevé un puño a mi boca y lo mordí.

-¿Acaso... Aah!~... Quieres convertirte... Mmmh~... En titán?- bromeó entre gemidos mi pareja. Lo miré con reproche unos segundos para luego cerrar los ojos, olvidar la estupidez que había dicho y permitir que el placer me invadiera. Rasguñé su espalda, dejando diez hileras un poco ensangrentadas de piel lastimada, lo cual por algún motivo a él le pareció extremadamente placentero.

Noté cuánto temblaba. Estaba sonrojado, sudaba, gemía y aumentaba cada vez más la velocidad que llevaban las embestidas, cada vez más violentas. Sentía mi miembro a punto de estallar.
Raito golpeaba una y otra vez un punto en específico dentro de mí que lograba hacer que me retorciese de gozo.
Mientras más me acercaba al clímax, mis gemidos tomaban más volumen, pareciéndose más a gritos llenos de placer.

-¡Ya... Ya no puedo!- dije entre jadeos.

-Aah~ Estoy a punto de correrme, ¡¡SU-BA-RU-KUN!!- gimió antes de llenarme por completo con ese líquido espeso y caliente, a la temperatura de su cuerpo, que se sintió casi como un anestésico después de (lo que a mí me parecieron) horas enteras. El sentirlo también me impulsó a correrme, ensuciando tanto mi abdomen como el suyo.

Salió de mí y se dejó caer a mi lado, tapándose un poco el rostro con las sábanas. Me miró con sus bellos orbes gatunos y murmuró:

-Subaru-kun... Te contaré un secreto...

-Lo harás aunque me niegue... ¿verdad?- susurré, aún tratando de recobrar el aire.

-Yo no sé hacer el amor, Subaru-kun... Nunca lo he hecho.

Lo miré, pensativo. Si no sabía hacer el amor... ¿qué acabábamos de hacer?

-Raito, pero tú lo has hecho miles de veces.

-No, yo normalmente tengo sexo. Son dos cosas muy diferentes. De verdad quería hacerte el amor, pero me dejé llevar y terminé otra vez en sexo. ¿Sabes? Me detesto.

Acaricié su rostro y acomodé uno de sus mechones castaños detrás de su oreja.

-No sé hacer el amor... Pero sí sé besar con amor- acercó su boca a la mía- Te contaré otro secreto... Yo no beso a mis juegos de una noche. Jamás- pronunció esa palabra y unió sus labios a los míos.

¿Eso significaba que...?

-Yo de verdad te amo, Subaru-kun.

Mi corazón se aceleró precipitadamente. El amor de Raito Hentako era algo imposible de conseguir. Y yo lo tenía. Yo era poseedor de ese sentimiento imposible.

∞

Les gustó? A mí más o menos(?

Si notan algún error de ortografía o tipeo es porque escribí este capítulo medio (muy) adormilada.
Ojalá lo hayan disfrutado n.n

Aprovecho para avisarles que se acerca el final y que aprovecharé mis vacaciones de invierno para terminar la historia :3

See you (͡° ͜ʖ ͡°)