-D E P R E S I Ó N-

Él

Siento que ya no puedo vivir más, claro, si a esto se le puede llamar vida. Mi madre esta bastante ocupada en el trabajo como para darse cuenta que estoy hundida en la miseria, mi padre, ese gran hijo de puta que me abandono, no le intereso en lo absoluto. Solo existía en este mundo alguien que me comprendía, que se preocupaba por mi, hasta puedo arriesgarme a decir que me quería.

Él era mi mejor amigo, simplemente mi todo. Pero él también estaba pasando por mi situación. Solo por él deje de auto-lesionarme por un tiempo, me hizo hacer una promesa, en la cual él nunca me dejaría sola, pero yo tenia que dejar de lesionarme. Ese año fue el mejor de toda mi vida. ¡Carajo! ¿Porqué no me atreví a decirle que me gustaba? Tal vez si le hubiera dicho no se hubiera ido de mi lado. ¡No! que tonta que soy, él nunca podría haberse fijado en una gorda como yo. Hoy se cumple el tercer aniversario de su muerte. Un día como hoy hace tres años, a eso de las 11:00 pm me habló, me dijo que tenía mucho miedo, yo no comprendía el porque de su miedo. Si solo me hubiera dicho que se había tomado esos tres frascos de pastillas junto a una botella entera de vodka, tal vez podría haberlo salvado... Siempre recordaré sus ultimas palabras: "Verónica, te quiero mucho ¡Joder! todo este tiempo me haz ayudado a sentir menos mierda mi vida. Si hubieran palabras para explicarte el miedo que siento en este momento... Vero, quiero que me prometas, que pase lo que pase, tu seguirás luchando, aunque esta vida sea tan mierda... Nena, te dejo, me siento un poco cansado, desearía hablar un poco mas contigo, pero infortunadamente me tengo que ir..." No pude despedirme siquiera de él...

Desde que él me dejo, todo mi mundo se hundió aun mas de lo que ya estaba, comenzaron en la escuela a hacerme bullying, mis padres dejaron de prestarme la poca atención que me daban, y él dejo un vació muy grande en mi corazón. 

Ahora mismo me encuentro en mi cama, recostada, recordando toda esta mierda, con mis ojos hinchados a mas no poder. Lo extraño tanto. Extraño sus ojos cafés mirandome fijamente, su sonrisa, que aunque no era tan común verla en él, era tan hermosa.

Espero pronto poder armarme de valor, e irme a dormir eternamente junto a él, mi eterno amado.