Estoy acostada en mi cama boca arriba, mirando el techo irregular y aburrido blanco, el maldito insomnio me ataca. Veo el reloj, son las 3:30. Estoy muy cansada pero por alguna extraña razón no puedo dormir. Me levanto y me dirijo hacia el balcón de la habitación. Puedo ver en el edificio vecino, que no soy la única con insomnio. Me siento en una de las sillas que tengo en el balcón, y no puedo evitar mirar hacia el hermoso firmamento. Siento un frió helado, pero no me interesa. Había olvidado lo reconfortante que era para mi ver las estrellas, el sentir que no estaba sola. Puedo sonar incluso como una loca, pero al mirar las estrellas me sentía parte de ellas. Pero ahora recuerdo el porque me había olvidado de esto. Al pasar estos pensamientos por mi cabeza, rápidamente pude escuchar esa voz, la típica amargada, diciendo que era ridículo.
Mierda, me quede dormida en el balcón. Tengo un resfrió tremendo, eso me pasa por estar de tonta reflexionando. Tomé una ducha caliente y me prepare un té. Como puedo ser tan retrasada, lo único bueno de esto es que no tendré que ir a la escuela.
Entro en mi habitación, tomó mi mochila y de ella saco mi libro y cuaderno de matemáticas. Como me encantaría cambiarme de este instituto, pero no puedo ya que aun no acaba el bimestre. Comencé a leer mi cuaderno, ya que tendré un examen. Siento pánico tan solo con pensar en regresar al instituto.
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-D E P R E S I Ó N-
RandomEs la historia de la vida de Verónica, la cual sufre de depresión entre otros trastornos.