Mi papá pasó por mi a las 18:05. Sonreí por su retraso, el no era de atrasarse, subí al auto cuando el estaciono en la puerta de mi casa.
-Hola pa- Sonreí y bese su mejilla.
-Hola pequeña, como estas?- murmuro el y comenzó a conducir.
-Bien, y vos? Como haz estado?- lo mire mientras el conducía.
-Bien Hija, últimamente he estado ocupado buscando trabajo, desde que se me termino el otro es complicado buscar otro empleo - respondió él. Yo asenti entendiendo su problema. Mi papá trabajaba en seguridad privada, pero hace una semana se le termino ese contrato, así que se había quedado sin empleo.
-Pa yo te voy a ayudar a conseguir trabajo, sabes que no me gusta verte así.- Murmuré.
-No es necesario pequeña, ya voy a presentar algunos currículum y algo va a salir.- sonrió mirándome por unos segundos para luego volver la vista a la carretera.
Unos minutos después de conducir entre risas y algunas canciones desafinadas cantadas por mi papá, llegamos al café. Mi papá estacionó el auto en el lugar indicado, para luego bajar y ambos comenzamos a caminar hacia la puerta del enorme salón.
Al entrar, papá pidió ambos pedidos a la chica de la caja, mientras el se quedaba en espera de eso, yo fui en busca de nuestros asientos. Ultima mesa, para dos en el fondo. Miré a las personas de allí, la mayoría eran jóvenes, algunos con su pareja y otros con amigos.
Tendré la posibilidad de tomar un café con Justin algún día? Aunque parecía todo loco, no lo era. Aun no entendía el momento en el cuál hablar con él se me hizo tan especial, si no hablábamos al menos una vez al día lo empezaba a extrañar enormemente.
-Aquí esta tu capuchino junto a dos muffins de chocolate.- mi papá dejó mi orden sobre mi lado de la mesa. El tomo su lugar frente a mi, junto su café y una dona, Sonreí y Murmuré un "Gracias" para luego comer mi primer muffins.
-de que querías hablar papá?- Murmuré sonriendo.
-ah si eso, em yo quería contarte algo importante para mi _____, pero no quiero que te lo tomes a mal.- murmuró.
-decime pa, que sucede?- susurré.
-Te acuerdas de Julieta?- murmuró él.
-Si pa, era la chica a la que cuidabas, era modelo verdad?.- agregue y mi papá asintió como repuesta.
- Quiero pedirle que sea mi novia.- dijo él y bajó su mirada al café mientras jugaba con sus manos. -yo sé que es complicado pero yo la amo y sé que es buena mujer, hija yo quiero volver a hacer mi vida, sabes que...
-Papá- susurré interrumpiéndolo, sonreí y dejé mi mano junto a la de él sobre la mesa.- me encantaría que rehagas tu vida junto a otra mujer, yo no te voy a odiar por eso pa, y amo a Julieta, ella es una bella mujer, y no me molesta en lo más mínimo. -ambos reímos- y además quiero otro hermano -agregué haciendo puchero.- no quiero ser hija única -el me miro y sonrió.
-lo tendré en cuenta- agregó y reímos ambos. - y gracias hija por entender esto, creí que ibas a enojarte -susurró.- no quiero que te alejes de mi, siempre vas a ser mi niñita -agrego y Sonreí al oírlo.-
La tarde entre los dos paso así, entre risas, charlas sin tema alguno, y broma por parte de ambos. Al terminar el café fuimos a caminar por el parque frente al local, ambos reíamos y recordabamos momentos donde yo era pequeña.
Cuando el reloj marco las 20:30hs papa me dejo en la puerta de casa, baje y lo salude con mi mano para luego entrar a casa.
-Donde estabas?- pregunto mi mama, quien estaba junto a una de sus amigas, Margaret, a quien yo odiaba un poco.
-Con papá- susurré dando camino a las escaleras.
-Y estas son horas de estar con tu padre _____? - agrego ella a lo cual Sonreí de inmediato.
- Mamá deja de joderme la vida, Gustavo es mi padre, o así creó yo, acaso no lo es? - Mamá me miro enojada y Margaret, su amiga, sonrió negando lentamente con su cabeza.
-Que el sea o no tu padre no tiene el derecho de llevarte tantas horas sin mi permiso, yo estoy a cargo de vos. - agregó
- Sabes? Me importa un carajo lo que a vos te parezca, el es mi padre y tiene tanto derecho como lo tenes vos. El solo se fue por que no te aguantaba más, y creo que no va a ser el único en dejarte Emilia.
- Quien te pensas que sos para hablarme así a mi ______! -grito a lo que reí.
- Amm tu hija?- contesté
-No te quiero volver a ver, te vas a tu habitación ahora mismo! - añadió a lo cual subí a mi habitación. Creo que eso no era un castigo para mi ya que mi habitación era el lugar donde mas me encantaba estar.
Al entrar, cerré la puerta con llave. Conecte mi móvil al cargador, mi batería moría. Busque mi pijama y comencé a cambiarme dejando la ropa usada a un lado para luego meterla en la cesto de ropa sucia.
Cuando termine me tire en la cama y busque mi móvil, aun conectado, para escribirle a él.
