Pareja Destinada(Sterek)

Capitulo 5

"Ten piedad de aquel que no te pertenece,
Rogaba la madre luna,
Ten piedad del compañero de uno de tus hermanos,
Mas oídos sordos hacia."

–¿No crees que deberíamos de parar?, la niebla está muy densa.

–No te preocupes cariño, no falta mucho para que lleguemos a Beacon Hills.–dijo el hombre estrechando sus ojos intentando ver algo entre toda la neblina.

–Esto no me agrada sabes que podemos tener un accidente, podemos llegar mañana en la madrugada.

–No pasara nada querida. Ya verás como dentro de poco llegamos al pueblo.

La mujer suspiro al ver que no haría cambiar de parecer a su esposo, suspiro y vio hacia su lado. Viendo la extensa neblina, apenas y lograba ver las siluetas de los árboles. En una de esas vio como una sombra pasaba rápidamente.

–Querido....

–Ya te dije que nada malo nos pasara.

–Pero creo.... ¡Cuidado!.

El ruido del auto volcándose junto con los gritos fue lo único que llego a escucharse aquella noche, junto con un aullido.

–¿Que es lo que a pasado aquí?.–preguntó el Sheriff acercándose a uno de sus muchachos.

–No sabemos con exactitud, pudo haber sido algún ciervo y evitaron chocar con este, o perdieron el control del auto, era una pareja casada venían a pasar sus vacaciones en Beacon Hills.

–Necesito un reporte, e investiguen si a sido un ciervo o si el auto a tenido algún problema.

–Enseguida Sheriff.

John vio cómo el joven se retiraba suspiro y se país su mano por su rostro ya era el segundo accidente, Parrish se acercó a su lado.

–¿Has podido sentir algo?.

–Está el mismo olor que el del primer accidente no sabría decirle sheriff.

–Iré con Deaton, ya debería de tener información para mi.

–Lo acompañó.

Stiles llego al comedor y dejó caer pesadamente unos libros junto a Lydia, se sentó y dejó caer su cabeza encima de los libros, la pelirroja lo vio alzando una de sus cejas.

–¿Te has tomado tus pastillas para dormir?.

–¿Me veo como si hubiera dormido?.

–Buen punto.–Lydia vio como los demás se sentaban a su alrededor, Stiles levanto su cabeza.

–¿Que habéis encontrado?.

–Nada.–apuntó Malia.

–Nada.–dijo la pelirroja revisándose las uñas.