Quizás...

Capítulo 9

Fue un completo error haberme sentado atrás de ellos, Evan tenia vista directa hacia donde estaba yo y si me quedaba viendolos como estúpida todo él tiempo se darían cuenta...

Demasiado tarde.

Él vio y levantó la mano haciendo una seña para que fuera con ellos.

Hailey volteo algo extrañada y se sorprendió cuando vio que era yo, los ojos se le abrieron como plato y su cara cambio de color muy rápido. Como no, la agarre en la movida y tenia que sacar provecho de esto.

Alce la mano para saludarlos y los dos me regresaron él saludo, aunque note la cara apática de Hailey, mientras Evan estaba de brazos cruzados apoyándolo en la mesa mientras sonreía.

Tenía una sonrisa muy grande y bonita, podían verse su dentadura blanca y perfecta. Es lo que más me gusta de las personas, las sonrisas sinceras.

Entonces levante mi bandeja de comida y me dirigi su mesa.

-Hola muchachos! -voltee a ver a Evan y le sonrei, en seguida gire mi cabeza y mire a Hailey con los ojos medio cerrados, trago saliva.

-Que tal Annie! Toma asiento. -dijo con mucha amabilidad y yo me sente en medio de ellos.

Hailey no decia nada; y no la culpó, yo me sentiría incómoda en esa situación.

-Y tu Hai, como estas? -le pregunte de forma burlona.

-Puedo hablar contigo? -dijo enojada y con tono serio mientras se levantaba de la silla.

-Claro que sí - no me intimidó, ella no tuvo que hablarme así y la seguí hasta la entrada de él área.

Cuando llegamos, volteó hacia mi cruzada de brazos y paracia que hervía de rabia.

-Que haces aquí? -poco le faltaba para gritarme, estaba furica.

-Ja, te calmas? Estoy aquí por que alguien me cancelo a base de mentiras y no iba a quedarme en casa.

-Ya te dije que lleve al perro al veterinario...

-Enserio? Tu no llevaste a nadie a ningún lado, no tienes perro.

-Claro que si, mi mamá lo llevó hace poco a la casa...

-Jaja si por Dios, eres alérgica Hailey. Pudiste decirme que saldrias con él y listo.

-Te molesta que este con él, verdad? -sonó retadora.

-Me molesta que me hayas mentido, él no tiene nada que ver. -por un momento lo dude.

-Claro que te molesta, se ve en tu cara, lo ves diferente.

-Que dices? Lo veo igual que a cualquiera.

-Si tu lo dices. -seguía retandome y no lo iba a permitir, así que tome la decision más factible.

-Como digas.

Me fui.

No tenía por que darle explicaciones, yo lo veía como a un amigo solamente.

Iba caminado por la calle y de pronto empezaron a sonar mis tripas, de él coraje que hice por las incoherencias que dijo Hailey; recorde que había dejado mi comida en la mesa, eso ocasionó que mi enojo aumentara.

En cuanto llegue a casa, lo primero que hice fue dirigirme a la cocina y me prepararme un rico y delicioso sándwich, era lo que me había hecho falta para tranquilizarme.

Prendí la televisión y empecé a recorrer los canales sin siquiera ver él titulo de él programa, siempre hacia eso, contaba hasta un cierto número y salía un canal al azar, me obligaba a ver lo que saliera, me llamara la atención o no. Así es como descubría nuevas cosas.

Mientras contaba hasta él número 27 de canal, me puse a pensar sobre lo que había pasado él la plaza. Imagine la posibilidad que había de que fuera cierto lo que dijo Hailey, tal vez lo miraba diferente sin siquiera darme cuenta, pero ¿por que lo hacia? Él tema se apodero de mi mente y no dejaba de pensar en eso, de repente me di cuenta que ya iba en él número 83 y deje de oprimir él botón de cambió.

Me pase todo lo que restaba del día viendo un documental sobre como se hacían los neumáticos, en eso mi celular comenzó a sonar, pero era un número desconocido y tenia miedo a contestar, no quería que me extorsionaran o algo así.

Pero tome la llamada, contesto una voz masculina.

-Hola? Annie?

-Quien habla? -estaba confundida, no recordaba haberle dado mi numero a alguien recientemente.

-Soy Evan.

Como rayos consiguió mi número?