Desperté en otro lugar que no era aquella inmensa mansión era una pequeña cabaña como si estuviera en un cuento de hadas. Kaleb estaba justo al lado mío descansando sólo descansaba con un vaso de sangre en las manos. Yo intenté huir pero Marla la chica humana que nos proveia sangre se despertó y me detuvo.
Marla- No te vallas. Esto te conviene más de lo que te puedas imaginar yo sólo soy seguidora por así decirlo.
Cristal- Ustedes están locos de atar no se que me hicieron sólo se que ya la comida me sabe fatal y que la ellos explotan como bolsas de carne...
Marla- Deja que Kaleb te explique.
Cristal- ¿Qué me explique? ¡¿Qué me explique que?! Para que me diga más mentiras de como pueden matarme, para que no me deje ver a mi madre ¿Continuo?
Ella siguió susurrandome para tratar de convencerme hasta que depertara Kaleb y logró entretenerme y el despertó.
Kaleb- ¿A dónde crees que vas? Te asesinaran si te encuentran.
Cristal- ¿Quiénes? ¿Los hombres? Esos hombres a quienes amenzaste de muerte a quienes le mataste a su compañera ¿Esos?
Kaleb- Te diré todo lo que quieras saber pero por favor no te vallas.
Cristal- ¡Claro! Me dirás todo y me dirás lo de la sangre de muerto y todas esas estupideces. Ya yo vi como si podemos morir sin la sangre de muerto.
Kaleb- Ya lo sé te diré todo pero por favor sólo confía en mi
Malena- (Se aclara la garganta)
Kaleb- Bueno en nosotros
