Vientos Otoñales

Capitulo 3: Metamorfosis

Una vez vimos lo que teníamos delante de nosotros...no nos podíamos creer que de verdad era eso lo que nos había estado siguiendo todo el rato. ¿De verdad era esto posible? Nada más Roger alumbró hacía eso, lo primero que destacó fue el brillo de su rojiza chaqueta, y después, su gran sonrisa, mientras estaba en una posición algo extraña. Si, era Yuii, la miramos, y al rato, desapareció de la nada...al verla desaparecer nos asustamos;
-"Tio, ¿qué coño ha sido eso? Es una bruja o algo..."
-"Se lo que sea, no tiene nada de sentido..."
Le contesté yo a Roger mirándole. Está claro que algo estaba sucediendo, pero, ¿por qué ella y no otra persona? Fue todo tan raro ese día que creo, que ambos no pudimos dormir buen aquella noche. Al día siguiente me desperté, hice mi rutina matutina, cogi la mochila y me guíe hacia el colegio. Nada más salir de casa, note como si algún objeto me diese de lleno en toda la nuca, y súbitamente caí al suelo sin conocimiento.
Me desperté asustado en lo que parecía ser una fábrica abandonada, mire a mi alrededor y, allí estaba. Era como yo. Tenía los mismo rasgos físicos que yo, el mismo cuerpo, los mismos ojos, el mismo pelo...me miro sonriendo y me dijo con una voz muy ronca:
-"Voy a divertirme hoy en clase......no debiste jugar en aquel laboratorio...."
Después de decirme eso soltó una risa desgarradora, y volvió a desaparecer dejandome ahí solo. Pasaron alrededor de unas 2 horas, lo que quiere decir que entonces solo falta una para que el día de clase termine.
-"Joder, joder, joder, a saber lo que el mal nacido de mi doble está haciendo."
Enseguida, tire la silla abajo, cogí balance para levantarme, y me estampé contra la pared para romperla. Me hice daño, pero salí ileso. Me dirigí corriendo al colegio, y allí estaba mi doble, hablando con Yuii.
-"Así que ahí estabas...¡¡Bastardo!!
Me acerqué corriendo lo más rápido que puede, y le asesté una patada en el costado, que lo dejo en el suelo y de ahí, desapareció mirándome.
-"Ya está todo bi--."
Mi frase fue interrumpida por una cara de Yuii, la cual representaba miedo, parecía como si me viese de otra manera, no entendí muy bien la situación, pero me dijo:
-"¿Q-qué pasa...? ¿P-p-por que había otro tu...?"
Ella se fue mirando al suelo dejando caer unas lágrimas, y no me hablo a la salida, ni nada. En verdad, la chica me cae bien, pero no me gusta que no nos hablemos...he de arreglar esto, si no, no dormiré tranquilo.
~"Despierta......despierta...despierta....vuelve a dormir y no habrás los ojos nunca..."~
Me levante exhausto y con la sangre helada, día tras día la misma pesadilla, con la misma voz y el mismo tema...la muerte...
"-Ya podría parar de pensar en cosas de las que han estado pasando..lo llevaré a un psicólogo-"
Oí decir a mi madre por teléfono, se ve que se lo estaba contando a una amiga suya, en seguida cogi el teléfono, colgué y lleno de ira dije:
-"¿SE PUEDE SABER POR QUÉ SABES ESO?"
-"Hijo y-yo te escuche el otro día hablando por teléfono y..."
Enseguida le interrumpí de una manera muy brusca:
-"¡ME DA IGUAL! ¡NO METAS LAS NARICES DONDE NO TE LLAMEN, SON MIS ASUNTOS, NO LOS TUYOS!"
De pronto mi madre me dio una buena bofetada en la mejilla izquierda, me miró decepcionada y lloro, diciéndome que me fuese a mi cuarto. Obedecí a regañadientes y me fui a mi cuarto, ya que era sábado, no tenía nada que hacer, así que me dormí en mi habitación tratando de relajarme. Me escapé por la ventana, era un día que habían pocas nubes, poco me interesaba ya que estaba un poco mosqueado, pero en fin, me dirigí hacia un puente, que bien era muy familiar para mí, os lo contaré más adelante. Justo al otro lado del puente, me encontré con Yuii, cruce, y mientras cruzaba, vi cómo le caían lagrimas, chillo diciendo entre lágrimas:
-"¡¡Cuidado!!"
Mientras extendía su mano hacia mi, después de pasar el oso de cebra que me llevaba hasta ella, pasó por detrás de mí un coche a muchísima velocidad, que me hubiese matado si no hubiese cruzado tan rapido.
-"¡Tonto! ¡Eres un tonto, tonto, tonto!"
Me dijo entre lágrimas abrazándome fuerte, a lo que respondí abrazándola también.
-"Pero oye, estoy bien, que eso es lo que cuenta."
-"¡Podrías haber muerto!"
-"Ya, pero estoy vivo."
Ella suspiro, y se sentó, yo me senté a su lado.
-"¿Sabes...? Esto que acaba de suceder me recuerda a algo que le ocurrió a una amiga mía que se parece mucho a ti."
Dije yo.
-"¿D-de veras?"
-"Si, te lo digo muy en serio...solo que esa amiga mía está muerta..."
-"O-oh...perdona...no quería hacértelo recordar..."
Enseguida le sonreí.
-"No es tu culpa, no tienes la culpa de hacérmelo recordar."
-"¿P-puedes contarme lo que pasó...? S-solo si quieres."
-"S-si...si me pongo a llorar perdoname eh..."
-"T-tranquilo...si lloras es normal si era una persona preciada para ti..."
En ese momento, empecé a contarle lo que sucedió en ese mismo puente.
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Año 2058
Paseaba tranquilamente un verano cualquiera, cuando el encontré con Jane
-"Luuuuuuxy, holaaaaa."
En ese momento me giré y ahí la vi, era igual de alegre y siempre me llamaba con el nombre de "Luxy"
-"Hola Jane, ¿qué tal estás?"
-"Jeje, yo estoy muy bien, ¿y tú qué tal estás?
-"Bien, hace algo de calor, pero estoy bien."
Ella me sonrio enseguida y acaricio mis espalda. Seguidamente caminamos cada uno por un camino riendo, y ella me dijo:
-"Maloooo, no me quieres."
-"S-si que te quiero tonta."
En ese momento yo estaba sonrojado, ella vino a mi camino y me abrazo sonriendo, y yo sonriendo le abrace. Fue un error perderla....
Los dos alquilamos la pista de Fronton para jugar juntos, y entonces eso sucedió, empezamos a jugar Fronton como unos locos dando golpes a la bola, esperando que uno de los dos le diera mal.
Siempre que alguno de los dos fallaba decia el ganador:
"¡Victoriaaaaaaa!"
Con un tono burlesco para chinchar al otro, así que ella, me hizo un doble, no llegue a tiempo, y poniéndose delante mía dijo:
-"¡Victoriaaaaaa!"
Rei mucho y cogi la bola.
-"Que sepas que me estoy dejando eh, no te ilusiones señorita."
-"Claro claro, pues señorito, dejándote era mejor que cuando no te dejas."
Ella sacó, y al darle de boleo le mande la bola al rebote, ella corrió rápido, pero no llegó, entonces me puse delante suya, y le señale con los dedos diciendo:
-"Victoriaaaaaaaa."
Los dos reímos, y nos dimos la mano como buenos jugadores, cogimos las cosas después de jugar una rato y me dijo:
-"Esto...yo me voy a casa un momento, luego sales, ¿verdad?
-"Claro que si."
Sonreí y nos miramos sonriendo.
(Continúa en el capítulo 4).