Bad Romance

Capítulo 4

Sigue mirándome durante unas milésimas de segundo y continua su baile. Yo me quedo petrificada, no se que hacer, temo que haya sido producto de mi imaginación por él par de copas de más.

Los gritos y silbidos siguen escuchándose por el local. El moreno con el pelo alborotado sigue y sigue bailando, como si nada, como si realmente no me hubiera reconocido. ¿Qué cojones? Siento nauseas y siento que todo me da vueltas.

La canción sigue sondando y yo maldigo a mis adentros. Al cabo de un rato de movimientos roces con mi piel y miradas penetrantes, alguien debe haber escuchado mis plegarias porque todas las luces del establecimiento volvieron ha encenderse y por lo que se ve, el chico odioso de la gasolinera se había ido del escenario.

-Vaya muñeca -escucho decir al presentador- parece que Harry Styles te ha dejado seca.-el publico suelta una sonrisa nerviosa y yo me quedo pensando. Harry Styles, así se llama el condenado.- Bueno cielo, tu momento de brillar ha terminado, puedes bajar para que el espectaculo siga su curso. -Steve me tiende la mano para bajar las escaleras del escenario y una vez piso el suelo mis amigas me acorralan de lo más emocionadas, yo, sin embargo seguí en completo shock.

-¡Madre mía Brook! Ha sido increíble, un show.. woah, no te has visto la cara nada más ver el estripper. -dice Cathe demasiado entusiasmada.

-Además de que ese tal Harry estaba bueno que te cagas -dice esta vez Jannet en un tono bastante agitado.- Joder tía, la proxima vez yo fingiré que me caso para que me toque ese bombom.-al ver que no me inmutaba Jannet frunció el ceño- ¿Brook, estas bien?

-El chico era él. -afirmo como si mis amigas entendieran de que hablo.

-¿Quién? -dicen al unísono.

-El chico de la gasolinera era él. -mis amigas me miran con una expresión bastante sorprendida y sus ojos parecen que se salgan de su cara.

-¿¡Qué!? -grita Cathe- que me da un algo Brook, por dios el mundo es un pañuelo.

-No jodas -Jannet suelta una carcajada.

-No hace gracia, no sabéis lo incomodo que ha sido para mi. ¡Por poco nos matamos en la gasolinera! Y claro ahora verlo ahi...

-Poniendote el paquete en la cara -Jannet no para de reir y me estoy planteando pegarle un puñetazo. Esta es la última vez que vengo a un puto bar de strippers.

-Si, si... mucho quejarte pero ahí arriba no parecía lo mismo.-puse los ojos en blanco a Cathe. Me estoy comenzando a cabrear.

-Cojo un taxi y vuelvo al hotel, seguid con vuestra fiesta. -todo el pedo que me había cogido antes se me ha bajado completamente una vez subí al escenario y ya no veo sentido seguir aquí escuchando a mis amigas decir cosas estupidas. Comienzo a andar a la misma vez que escucho la voz de Jannet hablandome y pidiendo que la esperara. Yo no le hago caso y poco después de dar unos pasos más la dejo de escuchar. Probablemente, Cathe le habría dicho que me dejase en paz, pues sabe muy bien que cuando estoy cabreada necesito estar sola, necesito mi tiempo pues puedo llegar a ser una bomba a punto de explotar. Quiero mucho a mis dos mejores amigas, pero todo este asunto me molesta y estoy empezando a cuestionarme el por qué decidí venir en primer lugar.

La parada de taxis esta cerca de un callejón que se encuentra al lado del club asique me dirijo hacia allí todavía algo alterada. De repente, a escasos centímetros de la parada de taxi se me rompe uno de los tacones que se quedó engachado a una losa mal puesta de la acera, haciendome caer al suelo. Que dolor. Joder, esta noche no doy una. Menos mal que nadie pasa a estas horas, tan solo algunos coches.

Una vez incorporada me pongo a caminar de nuevo, pero unas boces cerca del callejon que hay a mi derecha me detienen. Curiosa de mi, me acerco para escucharlas.