Siempre cerca, el uno del otro
No había nada que perder
A tu lado me sentía feliz, protegida, querida
Y más allá de las palabras hermosas
Que cada tarde me dedicabas
Era tu cálida mirada
Tan llena de sorpresas
Y a la vez, vacía de falsedad
El tiempo pasaba con su habitual desconcierto
Y en las tardes de fuga
Cuando huimos del miedo y los demás
Siempre encontraba un lugar especial para los dos
¿Sería coincidencia? Eso no lo sé
Pero al paso de los días
La ciudad entera se llenaba de recuerdos
Muchos momentos especiales
Y junto a ellos, miles de aventuras
Más que un "te amo", un beso o una mirada
Fue aquella frase, que sin pensar, me dedicaste
"Ella, con toda su alma y cuerpo, sabía que estaba enamorada
Sin embargo, aquello que desconocía
Es que amar y sentir, podían estar juntos al mismo tiempo"
Ya no importaba nada
Todo había sido perfecto
Nada más nos faltaba
Ni joyas, eventos de alcurnia o regalos caros
Con tenernos uno al otro, era más que suficiente
Siempre mayor a un "Te amo"