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A la mañana siguiente, me desperte a a las 7, que es muy temprano para mi.

Eso no es temprano, eso es normal.

Callate conciencia.

No me obligas.

Bueno, para mi es temprano. Me acordé que hoy venía McGonagall a buscarme. Técnicamente estaba desayunando cuando fue a por mi. Me vestí y salimos.

-Hola Nevaeh, creciste mucho desde la última vez que la vi. Eres igual a tu madre, pero con los ojos de tu padre, eso seguro.

-Usted los conoció?

-Fueron mis alumnos. Los mas bromistas a decir verdad. Ahora, antes que vayamos a comprar tus cosas quiero explicarte algo.

-Que ocurre?

-Mira, como tu sabes, tus padres fueron James Potter y Lily Potter, apellido de soltera Evans. Ellos eran unos magos espléndidos, pero lamentablemente un día, el mago más tenebroso, el-que-no-debe-ser-nombrado los asesino un 31 de octubre. Intento matarte pero el hechizo rebotó, y te dejo esa cicatriz, que si no me equivoco, tu flequillo esta tapando. Todo el mundo mágico te conoce, eres famosa, eres la niña que vivió, la que sobrevivió al mago más tenebroso. Hay algo que todavía no te estoy contando, pero eso te lo contará el director luego, ahora, a comprar los útiles.

Fuimos a un lugar que se llama El Caldero Chorreante, donde detrás tenía un callejón, donde nos dirigimos a Gringotts, el banco de dinero mágico, y nos dirigimos a una cámara que contiene lo que mis padres me dejaron. Pero la profesora McGonagall dijo claramente "casi todo lo que está aqui es tuyo". Pero, era mío y de quién más?
Bueno, luego compramos todo lo que necesitaba, hasta que nos dirigimos a comprar mi varita, que el vendedor dijo que es muy especial porque tiene núcleo de cabello de sirena y la madera es de roble oscuro. También dijo que era curioso porque esa varita compartía lazo con una de pluma de fénix, y que el cabello de sirena es lo más poderoso que pueda existir sobre una varita y más si esta comparte vínculo con plumas de fénix. De mascota me compré un gatito negro y blanco con ojos celestes claro color hielo (multimedia, aunque se que en la foto tiene ojos verdes) que era tan diminuto que me lo podía poner en el bolsillo. Ya tenía todo y llegué 10:30 a la estación. McGonagall se tenía que ir antes así que yo era una de las únicas personas en el tren.

Viajé en un compartimiento con una niña llamada Luna, un niño llamado Neville y una niña llamada Hermione. No dije mi apellido porque me acuerdo lo que dijo McGonagall. Soy muy famosa. Y no quiero hacer amigos simplemente por eso.

-Oye, no nos dijiste tu apellido-dice Hermione, esta niña me cae bien.

-Perdona, pero prefiero evitarlo por mientras.

-Oh, perdona.

A Neville se le perdió su rana, así que Hermione salió a buscar por todo el tren pero no encontró nada.
Al llegar ya era de noche y los de primer año nos fuimos por otra parte, en barcos. En un momento se puso ver el castillo. Lo más hermoso que vi en mi vida, era un castillo gigante. Al llegar nos hicieron hacer una fila, porque nos tendrían que seleccionar una casa. Cuando entramos al comedor se escucho un "ooooohh" de todo nuestro grupo, incluyéndome. Era enorme y había cuatro mesas separadas y largas, supongo que cada una era de una casa. Nos empezaron a llamar para pasar al frente y sentarnos en un banco para que el sombrero seleccionador nos elija una casa. No presté demasiada atención hasta que llego a a letra "P".

-Potter...-estaba por ir pero mi conciencua dice qie no vaya, así que me quedó-..., Harry.

Que???!!! Harry??! Que está pasando??!
Es de mi familia??!!

Soy tu conciencia, si no lo sabes tu, menos yo.

Oh, callate conciencia.

No me llames así, ponme nombre.

Okay, eh.. Luego pienso.

-Gryffindor!-grita el sombrero luego de mucha charla, Harry, será familiar mío?

-Potter, Nevaeh.

Pase caminando lentamente hasta el taburete. El sombrero empezó a decir

-Mmm, otra Potter, aunque tu no sepas algo de tu familia, algo que está cerca de ti. Tienes muchas capacidades para estar en Slytherin pero no discriminas a las personas, es mas bien por tus habilidades, que aún no has descubierto. Aunque sorprenda, eres más inteligente que tres Ravenclaws juntos, pero de escasa tranquilidad para estar en aquella casa, eres muy valiente como para estar con tu her... familiar en ¡¡¡GRYFFINDOR!!!

Suspiré, de ¿alivio?. No lo sé, yo solo recuerdo las ultimas palabras como para estar con tu HER.. familiar. Y hago enfasis en HER y FAMILIAR.

Me dirigi a mi mesa, y luego de que el director dara un discurso, empezó el banquete. Wow. El banquete más preciado y maravilloso y delicioso que vi y comí en mi vida. Estaba terminando el postre, cuando siento que alguien me toca el hombro. Harry.

-Por qué tienes ese apellido?-preguntamos al unísono

-No lo sé, pero creo que Dumbledore lo sabe. A propósito, soy Nevaeh.

-Soy Harry. Vives con tus padres?

-Ellos están muertos

-Los míos también, Crees que el sombrero se refirio a mi comi el "familiar"?

-Mañana antes de desayunar iremos al despacho de Dumbledore

-Bien.

Nos guiaron a los de Gryffindor a nuestra sala común. Y me fui directo a dormir.

Al día siguiente, me desperté porque sentí algo en la oreja. Cuando por fin reaccione, me di cuenta que tenía a mi gatita Giselle lamiendome la oreja. Esta gata era especial. Definitivamente no se si considerarla gata. Que yo sepa, los gatos no vuelan, no cambian de color. Es bebe y todavía entra en mi bolsillo.

Me acordé de lo de Harry, entonces me duche rápido me vestí y baje las escaleras. Cuando termine de bajar me di cuenta de que Harry también se encontraba allí.

-Vamos?-dijimos los dos al unísono y reíamos.

Salimos del retrato intentando buscar el despacho de Dumbledore. Pero lo encontramos rápido porque anoche leí la historia de Hogwarts, y un mini mapa.
Cuando llegamos a la puerta que era una gárgola nos detuvimos. Pequeño detalle, no sabemos la contraseña.
Pensé y pensé. El profesor lo vi comiendo caramelos de limon, capaz le gustan tanto como contraseña.

-caramelos de limón?-dije insegura pero para mi sorpresa, la gárgola se giro para darnos paso a las escaleras.

-Como lo sabías?

-Creeme ni yo lo sé.

Llegamos a la puerta de su despacho, así que golpee tres veces.

-Adelante-se escuchó la tranquila voz del profesor.

Cuando entramos no pareció sorprenderse.

-Me imagine que tarde o temprano iban a venir. Pues seguramente se preguntarán, por qué....

-...tenemos el mismo apellido-interrumpimos yo y Harry, otra vez, al unísono.





La Hermana De Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora