Heaven

El libido del oso pardo

Me perdí en la fiesta, intentando mantener la calma. Porque parecía que mi cuerpo me abandono, con el vil y traidor que parecía antes la presencia del chico que hábito mi sueño.

Me senté en una sala que tenia la fraternidad, mientras mi supuesta amiga Hotler bailaba con un miembro de la fraternidad. Me invitaron también a bailar, pero mi cuerpo estaba paralizado.

En cuanto Hotler dio una vuelta en los brazos del muchacho, me levanté y corrí a los baños. Donde me refresque la cara por más minutos de los que debería. Para cuando salí mis hermanos y la propia Hotler ya estaban tan ebrios que no me quedó más remedio que volver a mi lugar, de camino Hotler ya tenia a una nueva víctima: él chico de mi sueño.

Ella charlaba con él, intentando mantener la compostura. Así que por pura curiosidad me acerqué a ellos. De alguna u otra forma tenía que aprovechar la amistad de Hotler.

Él me miró.

-Ahhhhh mira es mi nueva amiga - chilló Hotler.

-Hola - murmuró él.

-También es mi nuevo amigo, Logan - dijo.

Seguía mirándome.

-Ahora vamos a bailar - grito y se llevó a Logan al centro de la sala, lo envolvió con sus brazos y lo llevó de un lado al otro.

Me quedé ahí un rato más, hasta que decidí irme por mi misma ya que mis hermanos habían ido a otras camas. Así que me eche a caminar a la parada de los buses.

Espere ahí unos quince minutos antes de que llegara el bus y la gente comenzará a subir. Me senté yo sola y tiempo después subió él muchacho que bailaba con Hotler.

Me miró y se sentó a mi lado.

-Eres rápido- murmure - soy Nora por cierto.

-Lindo nombre - dijo.

- ¿Porque dejaste a Hotler? - pregunté.

- Es linda pero no mi tipo - agregó.

-Luego puedes platicarme cuales si son tu tipo, esta bien - dije y baje en la siguiente parada.

No espere cuando llegue a casa, mi curiosidad era demasiada. Tuve que buscarlo en su perfil.

Se trataba de un muchacho de veintiún años, estudiante de primer grado llamado Logan Percy. Vi fotos de sus habituales viajes a esquiar con su padre y que ese era su deporte favorito esquí en nieve. Era un chico normal aparentemente y no existía ninguna buena razón para que lo hubiera soñado teniendo en cuenta que nunca lo había visto. Dejavu era la palabra más razonable que venía a mi mente.

Finalmente me fui a la cama y después de aclarar mis ideas me quede profundamente dormida.

En mi sueño me encontraba en una casa de madera con un chimenea, había una extraña sala y una cama cubierta de pieles, pieles auténticas de algún peludo animal. Me encontraba sola, la chimenea estaba encendida. Así que abrí la puerta.

Afuera había un espeso bosque con pinos altísimos con raíces impresionantes. Me quedé mirando un rato, hasta que escuche un ruidito, mire más a fondo y vi un enorme oso pardo que corría con toda su fuerza hacia la cabaña.

Como instinto cerré la puerta y me aleje de ella. Conté en mi mente, uno... dos... tres... y acto seguido el oso entró destruyendo la puerta. Grite horriblemente y me eche hacia atrás. El oso gruño y se paró sobre sus patas traseras de una manera muy imponente. Mi miedo no duro mucho cuando el oso se convirtió en el mismísimo Logan Percy.

Por lo cual solté otro chirrido.

-Hola Nora - dijo.

Solo pude pensar en una sola cosa.

-¿Qué haces aquí? - pregunté.

-Te ayudo.

-¿Ayúdame a que? - salté.

-A esto.

Logan se acero a mi y me tomo la cara con ambas manos y después me arrojó a la cama. Estaba demasiado lejos y de todos modos caí justo en el centro. El se acercó y me arrancó toda la ropa, quede completamente desnuda. Se aventó a mi y se puso entre mis piernas, subió lentamente hasta mi cara.

-¿Es esto lo que quieres?

Se acercó hasta mi tocandome, tan solo para envolverme y despertar.