Behind the reality - [BTS] (PAUSADA)

Capítulo V

Al día siguiente, en el instituto, no fui a ver a Jungkook. No quería hablar con él, ni verle, ni nada. No solo porque no sería capaz de mirarle a la cara sin acordarme de lo que pasó el día anterior y sonrojarme, también porque estaba tremendamente dolida por el hecho de que me hubiese tratado de esa manera y me hubiese creado ilusiones falsas. En el segundo descanso, me mandó un mensaje al móvil preguntándome dónde estaba. No le respondí. Luego me mandó otro preguntando si estaba bien. Apagué el teléfono.

Cuando terminaron las clases, me dispuse a salir del aula y me lo encontré en la puerta. Al verme llegar se le iluminó la mirada. Se me acercó con su típica sonrisa.
-¿Por qué no has venido a verme hoy, Chohee?
-Estaba estudiando-. respondí cortante. Era mentira.
-¿Para el examen de matemáticas?
-Sí.
-Si quieres podemos volver a quedar para estudiar.
Le miré a la cara por fin. A el se le borró la sonrisa en cuanto vio mi expresión y mis ojos llorosos.
-¿Para que vuelvas a 'dejarte llevar' en tu habitación? No, gracias.
Jungkook se quedó helado. Le oí que murmuraba 'Lo siento mucho...' mientras bajaba la mirada. Acto seguido, me fui a paso ligero, mordiéndome el labio para aguantar las lágrimas. Él no me siguió, y no sabía si estaba agradecida o decepcionada por ello.

Eran más o menos las cinco de la tarde. Yo había pasado todo el tiempo en mi cama. Incluso lloré un poco. Intenté estudiar un poco para el examen de matemáticas, pero no fui capaz de concentrarme. De repente, mi madre llamó a la puerta de mi habitación. Me sequé las lágrimas rápidamente y le dije que entrase.
-Cielo, hay un chico en la puerta preguntando por ti.
Di un respingo y miré a mi madre bruscamente.
-¿¡Un chico!?
-Si, un tal Jungkook. ¿Es tu novio?
-No mamá, no es mi novio. No quiero verle, dile que no estoy.
-Es que... Ya le he abierto. Cuando dije que estaba en la puerta, me refería a la puerta de nuestro apartamento. Te está esperando. Lo siento.
La miré, molesta.
-Pues échale. No quiero que me vea.
-Chohee, cariño. Si tienes algún problema con él, deberías arreglarlo.
Se me saltaron las lágrimas otra vez.
-No se merece que lo arregle con él.
Me tembló la voz y ella se dio cuenta.
-¿Prefieres estar pasándolo mal tontamente? Te está esperando en la puerta. Tienes una oportunidad para arreglarlo.
-Pero mamá...
-No voy a aceptar un no por respuesta. Vístete y ve a hablar con él.
Dicho esto, se fue de mi habitación y cerró la puerta. Yo me levanté de la cama y busqué algo para ponerme. Tampoco me esforcé mucho, la verdad. Una camiseta básica y unos vaqueros largos.

Cuando abrí la puerta de mi casa, esperaba encontrarme con su sonrisa de siempre, pero lo que me encontré fue una mirada increiblemente seria.
-Chohee-. comenzó a decir-. quiero pedirte perdón por lo que hice. Estuvo completamente fuera de lugar. De verdad... No se que me pasó. No lo volveré a hacer.
Yo me mantuve callada unos segundos. La mitad de mí quería perdonarle, pero la otra mitad me decía que tuviese cuidado con él. Realmente, no sabía que contestarle.
-Jungkook... Eh... No sé que decirte...
El se vio decepcionado y a mi me dolió tremendamente. Me miró a los ojos.
-Chohee por favor... Perdóname.
-Me... Me lo pensaré, ¿vale?
En su mirada vi un atisbo de esperanza.
-¿En serio?-. asentí-. Eh, esta tarde voy a estar con unos amigos... Por si quieres pasarte un rato...
¿Qué? Me acababa de invitar a salir con sus amigos. Eso si que no me lo esperaba.
-No voy a quedar con tus amigos, no les conozco.
-A Jimin sí.
«¿Jimin es el chico raro que estaba en su casa ayer?»
-Aún así... Me da vergüenza.
-Tranquila, que no muerden-. dijo sonriendo.
Me lo pensé durante unos segundos. Iba a estar con los amigos de Jungkook. Quizás por fin iba a tener amigos de verdad. De hecho, no recordaba haber salido de mi casa con amigos desde que empecé el instituto.
-Bueno... Voy a estudiar y a lo mejor voy un rato luego.
Él parecía feliz. Me dijo que cuando fuese a ir, le avisase y me diría dónde es. Luego se marchó.

Durante toda la tarde estuve planteándome si ir o no con Jungkook y sus amigos. Pensé en pedirle consejo a mi madre, pero conociéndola, diría algo parecido a 'No has salido con amigos en 5 años, así que si no vas, te castigo', y no me apetecía discutir con ella. Estaba muy dudosa de lo que hacer. ¿Y si no les caía bien? O peor, ¿y si no me caían bien? El tal Jimin era bastante raro...

Eran ya las 7:30 p.m. cuando finalmente decidí ir. Aunque ya era bastante tarde... Le mandé un mensaje a Jungkook preguntándole donde estaban. Me respondió '¡Espera cinco minutos!'. Y cinco minutos después, sonó el timbre de mi casa. ¿En serio había venido a buscarme? Cuando le abrí la puerta, estaba jadeando, supuse que había venido corriendo.
-Jungkook, no hacía falta que vinieses a buscarme, puedo ir sola.
El solo me miró sonriente y me hizo una seña para que le siguiese. El trayecto fue bastante tranquilo, hablamos un poco... Pero yo aún estaba nerviosa por estar con él. Pareció darse cuenta y no se acercó demasiado a mi.
«Que amable por su parte».
Finalmente, llegamos a un edificio.
-Es aquí.
-Espera, ¿vamos a estar en casa de tu amigo?
Él asintió.
-Sí, en casa de Jin. También le viste ayer, ¿recuerdas?
Jin. El tipo que vino a hablar con Jungkook.
-Pero entonces... ¿Tus amigos son mayores?
-Eh, sí, pero su edad mental está bastante por debajo de la media-. dijo entre risas.
Él llamó al timbre. Contestó otro chico. Se oía bastante alboroto. Al abrirnos la puerta del edificio, me empezaron a asaltar las dudas. Pensé en buscar una excusa para irme cuanto antes. Sin darme cuenta, ya estábamos delante de la puerta del apartamento del tal Jin. Estaba entornada. Jungkook la empujó suavemente, y dentro se encontraban otros seis chicos que se me quedaron mirando con curiosidad.