Maratón 3/?
Narra Jack
No lo sé, pero sentí sumamente horrible cuando ella hizo eso, empecé a bajar los escalones y al estar en el último escalón de ellas, mire a Ximena en la puerta tomando la pizza, le pago al chico de la motocicleta y entro.
-Alex está loca...- creo que piensa que está sola.
-No estoy loca... ¡¡La de orilla de queso es deliciosa!!- grito Alex al estar detrás de mí, me sobresaltó, haciéndome tropezar y caer, golpeándome la frente.
-Wow, chico, sentiste por fin la fuerza de gravedad, ven querido te ayudo- escuche la voz de Alex atrás de mí, me salto y me extendió su palma, la tome y me levante lentamente, logrando rozar su labio superior haciéndola ruborizar, me soltó rápidamente, tomo un pedazo de pizza y empezó a comer, sonreír de labios e hice lo mismo.
Pasamos un largo rato en la sala, Ximena se levantó junto a Alex, y ambas se despidieron y subieron las escaleras.
Pase un rato solo o eso creía, en ese mismo momento toda mi columna se retorció con un escalofrió profundo, alguien me observaba, lo busque con la mirada y lo sentí detrás de mí.
-Caerás en la tentación Oberland, ya lo veras...-
-No la toques-
-Eso harás tú por mí- él se rio profundamente causándome un dolor de cabeza instantáneo. Pero no deje que me arruinara esto. Me levante de la mesa de la sala y camine hacia la cocina, tome un vaso de agua y me quede ahí mirando por la ventana.
-Tan tarde Frost- reconocí esa voz y voltee a ver a Alex quien se recargaba en la entrada de la cocina, mire su atuendo, era un mini short de colores y una blusa de tirantes del mismo color del short y un estampado de unicornio, no pude evitar sonreír por lo tiernamente sexy que se veía.
-Mis ojos están acá pervertido- dijo haciendo que levantará mi mirada a su rostro, yo solo sonreí nervioso.
-Lo sé- dije mientras bebía un poco de agua, ella solo coloco los ojos en blanco y entro completamente a la cocina.
-Aun así es tarde- contesto mientras tomaba un vaso, llenándolo de agua.
-Mira quien lo dice, la chica que esta despierta- ella volteo, me miro seria, se acercó a mí y me lanzo un golpe en el brazo. -¡¡AUCH!!!-.
-Solo vine por agua llorón- se acabó el agua, dejo el vaso y empezó a alejarse de mí.
-Si, lo lamento- dije mientras me calmaba el dolor del brazo con la palma de la mano, Alex volteó y sonrió de labios haciéndome sonreír igual.
Pasaron un o dos horas en la cocina mientras conversábamos, Alex bostezo ampliamente y se recargo en mí, para cuando me di cuenta ya se había dormido, sonreí al verla, la tome, la cargue hasta su habitación dejándola en la cama, pero la inercia hizo que callera con ella, logrando rozar su mejilla, no pude evitarlo, la bese, bese su mejilla como un buenas noches y salí de ahí.
-Que aprovechado- me dijo un susurro burlón cuando salía de la habitación, la reconocí y voltee avergonzado.
-Lo lamento Alex- conteste con las mejillas ardiendo y la cabeza agachada, escuche el rechinido del colchón y los pasos delicados que se dirigían hacia mí, Alex tomo mi barbilla y la levanto dejando que tuviéramos contacto visual, volteo lentamente mi rostro haciendo que mirara al marco de la puerta, de repente sus labios estaban en mi mejilla, se alejó de mí y cerró la puerta con una sonrisa.
*Narra Alex*
Desperté por la mañana y mire el reloj de mi celular, era muy temprano, las 7:30am para ser exactos, me talle los ojos con las palmas de mi mano, busque mis zapatos debajo de la cama, me los puse y baje al piso inferior para prepararme un licuado, al bajar las escaleras y llegar a la cocina encontré a mi madre preparándose el desayuno, ella ya no me lo prepara tengo 15 y no tiene la necesidad de hacerlo.
-Oh Alex, ya despertaste, me he dado cuenta que pidieron pizza- asentí con la cabeza mientras entraba a la cocina.
-Umh por si quieres hay en el congelador, quedaron algunas revenadas, no nos la acabamos completamente ayer- ella no me préstamo mucha atención, se sentó y empezó a comer en la isla de granito de la cocina. Rodé los ojos al notar su arduo interés y me concentre solo en hacer mi licuado.
-También me di cuenta que tardaron en llegar de la cafetería- me dijo sin apartar la mirada de su teléfono, trague saliva antes de responder.
-Bueno... Umh... ¡Si! Nos tocó asearla a nosotras- dije cortante mientras evitaba su mirada.
-Bien- contesto aun con dudas, cuando esperaba que el licuando estuviera listo me sorprendió la formabanelegante que vestía mi madre.
-¿Por qué vistes así?- pregunte mientras serbia el licuado en un vaso, mi mama trago rápido lo que tenía en la boca y bebió su café.
-¡¡Se me hace tarde!! Mi amor quedas a cargo, no le abras a nadie si planean quedarse aquí, y se van a algún lugar, por favor cierra bien puertas y ventanas, la casa está sumamente ordenada, bueno solo este piso, ordenas el piso de arriba y lavas la ropa, recuerda que debes tener cuidado, la ropa es delicada, tienes dinero y te dejo $250.00 acomodan todo ya que pasado mañana entran a la escuela...- yo lo solo asentía siguiéndola pues caminaba alrededor de la sala tomando cosas, y señalando con su dedo índice derecho los dedos izquierdos, odio que haga eso, pero bueno.
-No lo olvides, por cierto llegare tarde a la casa, muy tarde así que no me esperes temprano, ¿vale?- yo asentí, me sonrió y se despidió mientras salía de la casa.
Suspire profundo y deje el vaso vacío en la cocina, y me dirigí arriba, -Tal vez sería bueno poder ir al centro comercial, Frost no tiene mucha ropa que digamos- solo mencionar su nombre hizo que me ruborizara y recordara lo que paso anoche, agite la cabeza para poder concentrarme mejor.
¨Horas después¨
-Bien Xime, ya podemos irnos al centro comercial- dije mientras guardaba algunas cosas en mi bolso, mire al otro lado de la habitación, Ximena estaban leyendo, rodé los ojos y continúe con lo mío.
-Bueno querida la parecer podemos irnos, hay que volver antes de las 9:00pm no quiero estar como boba en las tiendas- me sobresalte un poco, pero al final asentí a lo que dijo Ximena.
-Sip, solo concéntrate en comprar lo que necesitamos- respondí y me avente al sofá de arena con un jugo en la mano.
-Bien... Ropa sexy para Alex, escrita y apuntada- contesto Ximena con tono burlón, yo solo escupí el jugo, la mire con cara de "no se te ocurra" ella solo sonrió.
-Obvio como compraras tú también ropa sexy no hay problema en nada- dije levantando los hombros.
-¿¡QUÉ?!-.
-Yo sé que quieres impresionar a Rau—no termine la frase pues Ximena lanzó una almohada a mi rostro, me la quite y movió los ojos hacia la puerta, estaba frost recargado en el marco de la puerta con los brazos cruzados y un mirada burlona, evite su mirada para evitar ruborizarme.
Ximena tomo sus cosas y salió de la habitación, esa era su rara forma de decirme "ya vámonos", rodé los ojos, me levante del sofá y tome mis cosas.
-Ropa sexy, ¿eh?- sonreí y lo pase de largo.
-Cállate- dije burlona y me aleje de él.
Después de unos minutos caminando llegamos al centro comercial y entramos como locas a las tiendas, lo que me agradaba mas era que también comprábamos para Jack, yo nunca lo había hecho, siempre para hermanas y menores que yo así que no hay nada que pueda hacer, sonreí y continúe por los pasillos hasta entrar a otra tienda, pero con solo tener un pie dentro de esta, las luces empezaron destellar y pocos movimientos en la tierra me asían agitarme.
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No Solo Existe En Cuentos
RandomTengo 15 años de edad, salgo con mi mejor amiga, compartimos todo, literalmente todo, pero por lo que estamos pasando no debe compartirse, no tuvo que pasar, eso no verdad? No quiero que le suceda nada a mi mejor amiga. Ahora estamos, obligatoriame...