My Name is Amy •|REEDITANDO|•

Capítulo XII

-Narra Amy-

Nos alejamos del parque para entrar al bosque, pero era otro bosque...era muy parecido a bosque libre para acampar o pasar un buen rato de día de campo...era bonito a pesar de ser ya de noche.

El cansancio volvió a mí y me detuve en seco cayendo al suelo con mis piernas en "W", el siguió caminando y de pronto se detuvo en seco a tres metros de mí.

—¿Quieres aquí? —¿Qué? Su pregunta me extrañó por completo, ¿Ibamos a acampar?

—¿Cómo que aquí? ¿A que te refieres?

Shadow rueda los ojos—. Te has quedado ahí sentada, entonces, vamos a pelear aquí.

— ¿¡Pelear¡? ¿A-aquí? —respondo con sorpresa. Le dije a Shadow que estaría dispuesta a hacer lo que sea para demostrar que soy buen discípula... Entonces pelearé con él y si no lo logro... ¿Me va a matar?

-Narra Shadow-

No creo poder soportarla, se muestra tan estúpida y sin cerebro...odio a esta gente. La he amenazado para ver si se pone las baterías y me demuestra algo interesante... Bien, bien, ya he probado sus capacidades y las vi por la mañana, pero será entretenido ver como quiere librar esta.

—¿Qué esperas? Te dije que sólo quince minutos...y ya van cuatro.— no dejaré convencerme tan fácil...aunque tenga que hacerlo por Eggman yo lo haré a mí manera.

La eriza se quedó cabizbaja, no se movía y yo comencé a sentir desesperación...voy a comenzar con esto.

Me muevo rápido hacia la espalda de la eriza, ella parece sentir el movimiento y voltea a medias su cabeza hacia mí.

—Por lo visto quieres que empiece...y es el único privilegio que te daré antes de que te mate— ¡Vamos niña! Divierte a este erizo.

Amy al escuchar mis palabras se lanzó al frente y se levantó sacando su martillo, parece que después de todo logré asustarla. Me miraba muy fijamente y no se atrevía a atacar, es obvio que no lo haría porque sabe que esquivo sus golpes pero su mirada se ve tan...

—¿No me atacarás? Ya te quedan diez minutos... —La presiono aún más pero sigue viéndome como si estuviera estudiando lo que hago... ¿Acaso esta rosada ya sabe algo?

—No te atacaré hasta que tú lo hagas primero— ¡pero que le pasa! ¿Quién se siente para mandarme y hablarme de esa manera?, aunque siento una curiosidad por saber que clase de estrategia está planeando (si es que tiene la posibilidad de pensar en una).

—Vaya, vaya, pero si la rosada patética está hablando con la falda puesta...porque tú no usas pantalones y nunca te los pondrías por delicada.

—No dejaré llevarme por tus palabras, se que quieres provocarme. —replica con un gruñido entre dientes.

—¡Me admiro de tu inteligencia! Pero aunque deseara hacerlo no me esforzaría mucho... Sólo te quedan ocho minutos y si estás esperando a que te ataque nunca lo conseguirás.

—Bien...pero creí que querías probar lo que podía hacer...y para eso necesitas atacarme, de lo contrario, no podrás divertirte conmigo.

—¡ja! Me divertiré cuando acabe el tiempo y te persiga para ejecutarte...

Parece que la niña me está conociendo mejor...ya sabe lo que estoy buscando y eso me da bastante ventaja...vamos a terminar con esto.

A gran velocidad me acerco a ella para soltar un golpe en su cara, pero me llevo la sorpresa de que logró bloquearlo justo a tiempo, pero aún así, mi fuerza proyectada la empuja hacia atrás con cierta brutalidad causando que rodara por el pasto...increíble.

Se pone de pié muy rápido, parece que su cansancio y debilitamiento se han esfumado temporalmente...no me cabe duda ahora: Rose esconde muchas cosas que ni ella conoce. Podré pasarme unos buenos días lejos de aquí con ella mientras Eggman hace lo suyo, después de todo no serán días aburridos si me sorprende día con día como hasta ahora.

—Se acaba tu tiempo, vas a tener que hacer algo más si quieres sorprenderme— luego de terminar aquello corro hacia ella una vez más y antes de soltarle otro golpe hago la finta de un puñetazo, para desaparecer y aparecer en el aire encima de ella y golpear con una patada en la nuca. Cae al suelo como muñeco de trapo ¡Joder! Creo que la maté...ni modo, no es mi culpa que no aguante golpes tan flojos.

Me alejo de su cuerpo mientras miro mi brazalete: ¿sólo quedan cinco minutos? Que aburrido, tal vez tuve que darle veinte o treinta...pero si de todos modos la iba a dejar en el suelo antes de que acabara ¿Para qué? -Por un momento creí que podría divertirme más con vos... -—Justo cuando le di la espalda y comencé a caminar, escuche quejidos provenientes de ella, volteé algo sorprendido...esto sí no me lo esperaba.

—No voy...a pe-rmitir que...que termines ahora con-con esto...me queda...cu-cuatro minutos....— que estúpida... ¿Cree poder vencerme en este momento? Definitivamente, esta loca.

Le miro con irritación —¿No lo ves? estás cometiendo un error al ponerte contra mí.

—No..no me importa —se levanta con trabajos y toma su martillo—. Yo voy a demostrarte todo lo q-que sea necesario...sé que puedo...

No cabe duda de que hay algo raro en esta eriza...su temperamento es...tan alto y superior...su terquedad rebasa limites increíbles...; confío en Rose lo suficiente como para darme cuenta de que sí desea cambiar, ahora lo veo más que nunca, y si este temperamento sigue a flor de piel en ella, entonces no cabe duda que puedo entrenarla y ella evolucionará, porque así lo desea ella.

—Entonces, adelante eriza, te estoy esperando...

La eriza se abalanza contra mí a paso lento, la esquivaré muy fácil. Cuando lo hago, me agacho esquivando su golpe con el martillo para después intentar golpearle en las rodillas y así que caiga al suelo pero justo cuando suelto la patada ella brinca y hace una pirueta para volver a intentar golpearme con el martillo, hago una marometa y vuelvo a quedar al frente de la eriza. Sin perder el tiempo vuelvo a atacarla con un puñetazo en el estomago, y como era de esperarse fue muy rápido para ella...creí que había soltado el martillo por el golpe pero no fue así, cuando se dobla por mi puño la eriza pasa sus manos por detrás de mí con el mango del martillo me golpea la espalda baja.

intento apartarme de ella pero me doy cuenta que volverá a golpearme con su martillo en la cabeza, lo que puedo hacer es cubrirme en cruz pero... ¡¿Qué?!

—¡Toma esto, Shadow!

Giro hacia atrás y siento un rasguño en mi espalada... ¡agh! ¿Cómo demonios hizo eso? Transformar su martillo en un hacha...eso nunca lo había hecho, ¿o si? Mantengo mi distancia mientras veo como exhausta y con un poco de sangre en el rostro...estoy flipando, puedo asegurar que lo hizo para impresionarme antes de que su tiempo terminara...porque ya terminó.

— ¿Lo ves? te...te dije que-que quiero...quiero que me entrenes...

La eriza se desplomó en el suelo, doy un suspiro de alivio por darme cuenta que terminó, llevó al limite sus capacidades en circunstancia como las que se encuentra y este es el precio, pero...me siento satisfecho. Trueno mi cuello de un movimiento y me acercó a ella, tomo su pulso y está bien, por ahora lo está; la doy por aprobada pero eso se lo diré cuando despierta mañana, debe de descansar por ahora así que... será mejor que me la lleve de aquí.