Capítulo 1: El Misterio Comienza

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Un joven entrenador marchaba triunfalmente fuera Gimnasio de Ciudad Viridian, mientras miraba orgullosamente sus ocho medallas de Gimnasio, incluyendo la medalla Tierra que había ganado momentos antes. Había sido una dura batalla, pero él había entrenado bien a sus Pokemon. El oscuro Líder de Gimnasio no tenía más opción que otorgarle la verde medalla, con forma de hoja al joven victorioso.

"Así que, imagino que te dirigirás hacia la Liga, eh? " preguntó su padre, uno de los guardias élite del Gimnasio. "Preparado para la batalla con la Élite Four?"

Jeremy sonrió. "¡Puedes apostar a que lo estoy! Podría entrenar un poco más antes de ir... no quiero perder en Indigo*."
(N#G: *Indigo Plateau = Meseta Añil).

Su padre asintió. "Una estrategia inteligente, hijo. Yo te recomendaría entrenar en Cinnabar. Hay muchos Pokemon de alto nivel, y al pelear obtendrás mucha experiencia de batalla. Tienes todo tu equipo?".

Jeremy apuntó a las esferas rojas y blancas de su cinturón. "Graveler, Pidgeot, Hypno, Persian, Growlithe, y Venusaur. Había otros que quería llevar pero solo puedo escoger seis. Estoy un poco asustado de pelear con tipos Dragón... quizá le debo enseñar a uno de los míos un ataque de Hielo...".

El guardia dio unos golpecitos a la cabeza de su hijo suavemente. "Estoy seguro de que te irá bien. Dale una llamada a tu madre y a mí cuando te hayas vuelto un victorioso Maestro Pokemon! ".

Jeremy observaba ansiosamente alrededor de las calles de la ciudad. "Yo realmente quería decirle adiós a mi hermano antes de irme... tu sabes, el "gran Profesor" de la familia. Pero al menos uno de nosotros puede hacer algo por si mismo." Él hizo este último comentario con un toque de resentimiento en su voz.

"Vamos Jeremy", su padre tomó una nota seria en su voz, "tu sabes que lo que pasó en Cinnabar no fue culpa de tu hermano. Pero el Jefe todavía no estaba satisfecho. Él necesitaba a alguien que culpar y Eric técnicamente estuvo allí con toda la carga. El temperamento del Jefe no es algo con que jugar, créeme".

"Lo sé", suspiró Jeremy. "Pero nosotros no hemos tenido noticias de él en años... quizá yo... lo extrañe un poco." De repente él se puso a la defensiva. "¡Pero no te atrevas a decirle a alguien que yo dije eso! Yo- ".

Su padre asintió. "No le diré a nadie".

Después de unos segundos, la actitud optimista de Jeremy volvió. Él normalmente era una persona muy alegre, y nunca permanecía mucho tiempo deprimido. Él suspiró, mientras ajustaba su mochila en sus hombros. "Bien, deséame suerte. Voy a entrenar un poco, después me dirigiré hacia la Meseta".

"Buena suerte". El guardia se despidio mientras el joven se marchaba.

Jeremy caminó fuera del Gimnasio, dirigiéndose hacia la calle principal del pueblo, cuando de repente tropezó con una figura en el suelo, que llebava una larga chaqueta sucia y agarraba una taza manchada con ambas manos. La persona parecía ser un hombre viejo, medio-consciente y murmurando a sí mismo.

"Lo siento", murmuró Jeremy. "debí haber mirado por donde iba".

"ssta bien... " dijo la figura. "Hey... niño?".

Jeremy miró al andrajoso hombre tirado en el suelo. "Eh? " Él estaba preguntándose que podría querer de el ese viejo loco.

"...niño? Tienes...priiisa? " El hombre tomó un rápido trago de su bebida.

"Um... no... " dijo Jeremy nerviosamente. "Un movimiento en falso y mi Growlithe va a freír a este sujeto", pensaba, mientras ponía su mano en una Poke bola de su cinturón.

The Secret of MissingNoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora