Cuando calienta el sol.

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Sol, playa y arena.

¿El mar azul? Sip, el mar azul de una de las tantas playas de Seúl.

Después de una mañana estresante en el colegio, habíamos decidido saltarnos las clases de la tarde. No había nada importante como para que nos castigaran o algo. Además el sol que hacia era realmente hermoso, pero quemaba a horrores, Johanna dio la idea de que viniéramos a la playa; es mas, ya lo tenia planeado de la noche anterior. A pesar de yo no tuviera ganas y que me quedaran simplemente dieciocho días para terminar la lista, acepte venir. Para despejarme un poco, creo.

Lo que no me hizo mucha gracia fue que Jimin trajera a una chica. ¿Celos? Por Dios, es ridículo. No la soportaba, era una más de las seguidoras de Caroline y del club de fans de Jimin. Además, se suponía que éramos solo nosotros seis; en fin, no le comente a nadie esto, jo, no quería ser el punto de las bromas. Y estaba segura de que clase de bromas serian.

—¡Vamos ________! Vamos a bañarnos, ¿si? —Joha chillaba mientras saltaba en la arena, llevaba un bikini violeta que le quedaba hermoso —Anda, di que sí. ¿Si? —pero podía ponerse muy irritante la duende.

—Voy luego—fue mi simple respuesta, mientras me estiraba sobre la toalla boca abajo, no estaba con ganas de playa ni nada de eso. Aunque fuero el único día soleado en Seúl.

Hmpf, aun no podía olvidar mi salida con Yoon Gi el día de ayer.

Bueno, no la salida en si, si no lo que hizo Yoon Gi cuando me dejo en la puerta de mi casa. ¡Ah! Lo único que pedía al cielo y cualquier ayuda divina que se quisiera apiadar de mi era que no se apareciera ahora por estos lugares...

Flash Back

Pizza. ¡Me encanta la pizza!

Como le había prometido a Yoon Gi, hoy era nuestra salida. Me daba una risa enorme que estos dos se pelearan por mi compañía como si yo fuera la gran cosa; enserio, eran unos exagerados. En fin, vino a buscarme alrededor de la siete treinta, nos montamos en su motocicleta y ¡wow! Fue de lo más genial, llegamos a un pequeño puestito en Seúl de pizzas, eran realmente deliciosas.

Todo iba bien hasta ahí, hablamos de todo y de nada; de cómo le había ido en su viaje, la razón de su regreso. Oh, eso, fue una cosa que omitió. Como dije, la pobre e ilusa de Jung ________ pensaba que todo iba perfecto.

Lo incomodo fue cuando llegamos al umbral de mi casa.

—¡Tú! ¡Oh, Yoon Gi! ¿Crees que si me consigo alguna motocicleta la podrías arreglar para mí? —le pregunte esperanzada. No era fan de la velocidad porque estaba acostumbrada al cacharro que papá me había dado. ¡Montar en la motocicleta de Yoon Gi había sido toda una experiencia!

—¡Por supuesto ________! Haré lo que quieras —me contesto, con una de sus características sonrisas.

—Uh, me la pase muy bien —le dije dándole un abrazo de despedida, se estaba haciendo tarde —. Nos vemos —me gire para subir por las escaleras que daban a la puerta principal, pero la mano de Yoon Gi sobre mi brazo me impidió seguir avanzando. Me gire y lo mire confundida.

Oh rayos, ese había sido mi maldito error.

Sin previo aviso, sin que algo se apiadara de mi y me avisara. ¡Sin tener idea de lo que este estúpido iba a hacer! Yo, como la gran idiota que soy, me quede completamente de piedra cuando los feroces labios de Yoon Gi se estrellaron salvajemente contra los míos. ¡Jo! ¡Por lo menos hubiera sido un poco más condescendiente! ¡Para que demonios tan rudo! Y lo peor era que yo no podía moverme, mis ojos abiertos de dos en dos. ¡Ni siquiera hacia nada para separarlo de mí! Estaba en completo shock. ¿Cuándo demonios iba a pensar que el idiota de iba a hacer esto? Mi cabeza pensaba a mil y llegue a la única conclusión de que este mundo estaba cada vez más loco. A los segundos luego del atrevimiento de Yoon Gi, este se separo y me dedico una sonrisa coqueta.

Lista de Imperfecciones ♥ Park JiminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora