-Flashback-
-H-hola.- respondí temerosa, no sabía si había muerto o qué había pasado pero me sentía en el cielo.
-¿Cómo estás, Neva?- preguntó de forma inocente, observándome con sus hermosos ojos. Sí, a mí.
Su voz. Sus labios. Su voz pronunciando mi nombre. Neva. Quedaba tan hermoso en sus perfectos labios.
-B-bien.- sonreí insegura, aún no podía creer que me estuviese hablando. ¡Y que supiera mi nombre!
-Que bueno.- respondió sonriendo con su perfecta fila de blancos dientes.
Sus ojos tenían un brillo especial, se veían más celestes que nunca. Parecían el mismo mar en calma, transmitían mucha paz. Podía observarlos por siempre y nunca cansarme.
Nos quedamos observándonos mutuamente por unos segundos, analizándonos, hasta que me animé a romper el silencio.
-¿Cómo sabes mi nombre?- pregunté insegura y me arrepentí al instante. Tonta.
-Algún día iba a descubrirlo, ¿No crees?- levantó las cejas y sonrió alegremente, lo que hizo que sus ojos se achinaran haciéndolo ver más tierno delo que ya era.
-Sí...- ladeé la cabeza sonriendo- No lo tomé en cuenta.- observé mis pies.
Sentía que me quemaba la cara y mordí mi labio por ello, en éste momento deseaba que me tragase la tierra.
-Bueno...- se llevó un brazo a la nuca de manera relajada- Tú ten en cuenta que me gustaron tus cartas... y...- se aclaró la garganta- Me gustaría, ya sabes... que no me dejes de escribir. Las necesito.
Sentí que mis ojos se salían de sus cuencas, abrí mi boca en busca de aire. Mi corazón estaba disparado. Si esto era un sueño, no quería despertar jamás.
-¿De verdad?- susurré insegura, y dudaba que me hubiese oído.
-Sí.- se mordió el labio ligeramente y negó repetidas veces con la cabeza- Tengo que hacerte muchas preguntas.
-Oh.- dije asombrada y solté una risita nerviosa.
-De veras... me intrigas, mucho.- miró sus pies- ¿Quieres salir algún... día?
Suspiré entre risas.
-¡Espera!- dijo ésta vez riendo- Aún no me digas... piénsalo y me escribes luego, ¿Quieres?
¡Claro que sí! gritaba eufórica en mi mente.
-Bueno...- respondí tímidamente.
En mi interior mi estómago se encontraba haciendo una fiesta. Ni sabía aún cómo estaba de pie todavía, esto era demasiado perfecto para ser realidad.
-Genial.- susurró de la misma manera- Debo irme...- dijo observando a su amigo que lo llamada del otro lado del pasillo- No dejes de escribirme, por favor.
-No lo haré.- reí nerviosa.
-Adiós...- se despidió con su mano- Neva.
-Adiós.- lo imité- Harry.
Me dedicó una de sus encantadoras sonrisas y se fue corriendo hacia su clase cosa que también debería hacer, ya que estaba llegando demasiado tarde, pero no podía. Me encontraba flotando en una nube.
Él, él, él.
Me había hablado, me había invitado a salir y me había confesado que le gustaban mis notas, cosa que siempre dudé.
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Hey, Judd. [Harry Judd]
Historia CortaTus ojos, son los más bonitos que he visto en mi vida. ¿Crees poder verme con ellos como yo lo hago?