Criando a un "Bebé" Diabolik Lovers

20. Azusa "adios, hola"

"odio mi destino, del seguir orando desde cero"

El sentir su calidez en mis brazos me reconfortaba, cada noche repite lo que hace lo mismo que cuando era pequeña, espera que todos se duerman, para venir y dormir en mis brazos, tengo la esperanza que este momento nunca cambiara, cada día la veo más confiada, yo sé que ella va sobrevivir a esto y estará conmigo para la eternidad

-Azusa- se giró para hundir su rostro en mi pecho- duerme

-Aun no puedo - sentí sus cálidos labios en los míos, porque será que ella siempre me sorprende así, profundice el beso, hay tantas cosas que deseo hacer con ella, y espero cumplirlas

-A dormir mañana hay instituto- eso es lo que tú piensas Nagisa.

"¿Podría ser ... el empuje en esa 'espiral' era yo?"

Corianos por todo el centro comercial, se suponía que hoy tendríamos clase, pero odio que ella este alado de los Sakamaki, así que estamos fugándonos, y Yuma no está cubriendo en el instituto. Me encanta ver su rostro de alegría al correr, ella odia ir a la escuela, y ver a sus hermanos.

-Ya. Ya no nos siguen- detuvo su andar, estaba agitada, quizás no fue la mejor idea hacerla correr y menos con anemia- tengo sed

-Vamos por algo de comer- tome su mano y caminamos a uno de los puestos de comida, donde ella no demoro en pedir una orden de comida como para 3 personas- tienes mucha hambre

-Siempre- la mire, ella siempre ha sido de buen apetito, pero recientemente estaba comiendo el doble de su cantidad, y su cuerpo estaba cada vez más delgado, tendré que hablar con Ruki de eso, no pienso que sea normal en un ser humano. - estaba delicioso!, ¡vamos a pasear!  - me tomo de la mano y empezamos a caminar por todo el lugar de vez en cuando entrabamos a tiendas pero era para ocultarnos de los guardias, que nos regañarían y enviarían al instituto nuevamente.

Nuestro paseo fue divertido, hasta que ella paro frente a una tienda a la cual no demoro en entrar, la seguí para ver qué era lo que le había llamado la atención y la encontré fascinada por un pequeño gatito negro.

-Ojalá Ruki, me dejara quedarme contigo- suspiro y puso su mano en la vitrina,

-Le puedo ayudar en algo joven- una señora mayor se me acerco intuí por su uniforme que trabajaba aquí, asentí, ella me podía ayudar en mucho

"Tu sonrisa ese día se convertirá en mí único sustento"

Las manos de Nagisa sujetaban las mías, mientras yo bebía de su pecho, esta zona tan blanda a la cual solo a mí me permite beber, cuando sentí que era suficiente me alejé, encontrándome con su rostro sonrojado, se ve tan linda así.

Me acerque a sus labios y los bese mordiéndolos un poco para que el embriagante sabor de su sangre invadiera mis papilas, sin darme cuenta sus manos se encontraban en mi cuello restando la distancia entre ambos, quiero continuar, pero tengo miedo de hacerle daño

De repente ella se separó de mí y salió corriendo al baño, últimamente tiene una toz que me preocupa, entre al baño y la encontré siendo, pero lastimosamente lo que tosía eran coágulos de sangre

-Aléjate, no quiero que veas esto

-Veo y pruebo tu sangre a diario está bien- la abrase de la espalda mientras ella terminaba de toser, luego de eso bebió un vaso de agua y se calmó, siempre pasaba así, tosía de la nada y se calmaba.