Que sueñes con los angelitos...

Prólogo.

Prólogo.

Mañana es el primer día de clases, estoy en mi casa, con mi cabello rizado y largo, piel bronceada y ojos cafés, bastante oscuros, me acerco lentamente al cuarto de mis padres, mi padre sonriendo, me dice:

–Como sabes tú tío está viviendo en Ámsterdam, Holanda.

–Sí.–Le respondí.

–Bueno… Tu abuela quiere ir, pero ni tu madre ni yo podemos viajar y queríamos preguntarte si te gustaría, o no, viajar con ella.

–¡Me encantaría!- Contesté.

Él escribió unas cosas en su laptop y me dijo:

–Si tú me prometes sacar buenas notas este año escolar, en las próximas vacaciones vas a viajar allá.

Me alegré mucho, continué haciendo lo que hacía y no paso nada de mucha importancia el resto del día.

Al día siguiente era el comienzo del año escolar, me sentí un poco extraña, pero estaba con mis amigas de siempre y logre acostumbrarme rápidamente. Durante todo el año di lo mejor de mí y eso se reflejo en mis calificaciones.

Siendo el último día de clases, me despedí de mis amigas como siempre lo hacía, sabía que en la tarde darían las notas del año escolar y mi papá me diría si podía o no ir al viaje con mi abuela. Estaba muy nerviosa, aunque también muy feliz.

Mis padres fueron a buscar las notas, cuando llegaron yo estaba en la computadora, mi mamá me abrazo y dijo:

–Te felicito mi amor, tienes unas excelentes calificaciones.

Mi papá fue a su cuarto y regreso con un sobre que me despertó cierta curiosidad, se acerco a mí y me dijo:

–Aquí tienes los boletos y lasreservaciones, el dinero lo tiene tu abuela, deberías hacer las maletas, te vas de Venezuela el 30 de junio y llegas a Holanda el 1 de julio, se regresan el 30 de septiembre y llegan el 1 de octubre, justo a tiempo para el inicio del año escolar.

Me sorprendí un poco y comencé a hacer mis maletas y mi mamá me ayudo.

Ya era 30 de junio tenía todo listo para irme, me despedí, hubo más de una lágrima y me monte en el avión, mientras miraba por la ventana me imaginé como sería este viaje, a quienes conocería, aunque nunca imagine lo que realmente pasó, por muy bueno que fueron mis sueños no se acercaban ni remotamente a la realidad…