Lo siento
Su: Lo siento Manuel, sólo quería defenderte, me daba miedo perderte, perdón seguro que tu habrías hecho lo mismo por mí ¿cierto?
Manuel: 1° Eres una persona maravillosa, se nota que me quieres mucho pero ya sabes cómo son los de bachillerato, no les da miedo nada ni nadie, gracias y 2° Yo me mataría por ti si es necesario.
Su: ¿Sabes lo mejor de todo ?
Manuel: Dime
Su: Que no hemos huido de ellos, sino les hemos enfrentado
Manuel: ¿Sabes? Al final tienes razón...no me imaginaba que tuvieras ese carácter. Me gusta, me encanta.
Su: A mi me gustas y me encantas, también me chiflas y me molas.
No nos dimos cuenta de que Jesús estaba escuchando todo hasta que vino a la cocina (donde nos encontrábamos Manu y yo)
J: ¿Sois novios?
Manuel: Sí, papá
Pensé que nos lo iba a prohibir pero no fue justo al contrario
J: Susan, paciencia
Manuel y yo estábamos nerviosos, teníamos miedo de que nos hiciera romper
J: ¿Pero a qué viene esa cara niños? Yo también pase por lo mismo, me enamoré de... Nadie dejenlo. Podéis estar juntos no os preocupéis, no voy a dejar que os separéis, es más si necesitáis algún consejo sobre relaciones sexuales...
Manuel: ¡Papá!
J: Vale, vale tranqui, tranqui
Ambos nos reímos
J: Pues ahora, por listos os voy a dar una conversación un tanto delicada
Su: ¡Jesús!
J: Empecemos, para tener relaciones Sexuales, hace falta dos individuos, una hembra y un macho...los niños no pueden tener relaciones sexuales, ya que correrían el riesgo de quedarse embarazadas o coger infecciones...
No pudo hablar más porque Manuel le interrumpió
Manuel: Papá todo eso ya lo sabemos, vamos Susan
Cuándo estábamos subiendo por las escaleras para ir a el cuarto de Manuel, Jesús gritó:
J: ¡Usen condón!
Manuel: ¡Sólo vamos a dormir!
Jesús se río y Manuel y yo subimos corriendo al cuarto y cerramos la puerta
Su: ¿A este qué le pasa?
Manuel: Es que...es muy...risueño
Su: Pues que se relaje...chiquita vergüenza
Manuel: No ya...
Nos miramos y nos reímos
Su: Tengo una idea
Manuel: ¿Qué idea?
Su: Ir a la casa d ellos chicos de bachillerato y romperles todo lo que nos encontremos
Manuel: ¡¿Estás loca?!
Su: Pues nada, voy yo sola Manuel
Manuel: (me coge del brazo) ¡No joder!
Me suelto de él ágilmente y me voy corriendo. Va corriendo detrás mía, y me para.
Manuel: ¡¡¡Para, Tía Joder que somos asmáticos crónicos!!!
Su: No me voy a quedar de brazos cruzados mirando cómo van haciendo daño a las personas más pequeñas que ellos
Manuel: Dejalos no tiene importancia
Su: Puff...
Manuel, me mira detenidamente mientras yo le ignoro. Pone sus manos en mi barbilla y me besa, sonrío.
Su: Vaaale no voy a la casa de los chicos
Manuel: ¡Esa es mi chica!
Cenamos y nos fuimos a dormir, cuándo ya estaban los dos durmiendo, aproveche, me puse mi bata de buhitos y fui a la casa de los chicos. Sé que Manuel me prohibió ir, pero yo soy una persona, que no me puedo quedar de brazos cruzados viendo a otras personas sufrir por dos chulos de barrio.
Ya estaba en la casa de los chicos, a si que decidí que no rompería nada solamente hablaría con ellos para que nos pidieran perdón, estaba nerviosa.
Su: *Toc toc*
Me abre uno de los chicos, el que me llamó adoptada
': ¿Qué quieres?
Su: Venía para que os disculparais...
': Buff que pechos son enormes
Me cogió de la cintura y un chico vino por detrás y se puso a apretarme los pechos con sus grandes manos
Su: ¡Ah! Auxilio, Auxilio!! - empecé a chillar desesperadamente
De pronto aparece Manuel, que me vio media desnuda pero no me miro a los pechos sólo les pegó a los chicos, cogió mi ropa, me cogió a mí como un koala , nos escondimos detrás de un árbol y me vistió ya que no tenía fuerzas.
Ya vestida, me llevó a su casa y me acostó en su cama sin decir ni pío, se acostó y apagó la luz. Entonces yo me acerqué a su oído y le susurré
Su: Lo siento Manu, te quiero mucho...después ya te pensarás si me perdonas o no, pero yo te amo, si no te amara, no habría ido a esa casa
Manuel enciende la luz
Manuel: No, lo siento yo, debería de haber ido contigo, lo siento niña
Le besé y me puse encima de él
Manuel: Venga acuestate
Su: Venga vale, pero prometeme una cosa ¿sí? No le digas nada de esto a nadie
Manuel: Lo prometoo
Entonces, le sonrío y me bajo de encima de él, me acuesto y nos tapo, Manuel apaga la luz y nos dejamos dormir.
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Porque No Hay Nadie Como Tu
AcakHello me llamo Daniel Oviedo Morilla soy de Sevilla, tengo 17 años, un hermano gemelo que se llama Jesús Oviedo, una madre llamada Eva Morilla Delgado y unos amigos: mi amigo:Calum, mi amigo: Terry, mi amiga: Saray y mi mejor amiga Michelle