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Año 2006, Hospital de Berlin

Tom

Llegue tan rápido como pude, me sentía muy mal, los nervios estaba haciendo que mi cuerpo se sintiera pesado y rígido, no podía controlarlo

Estacione la moto fuera y corrí hasta entrar mientras intentaba localizar a mi madre, llamaba a su móvil pero no contestaba, me estaba poniendo cada vez mas histérico, necesitaba escucharla decir que todo estaría bien, necesitaba tomar fuerzas y valor

- Necesito informes de Jorg Kaulitz - pedí a la recepcionista agitado

- Y tu eres?- pregunto mirandome con curiosidad y desconfianza

- Tom... Tom Kaulitz, soy su hijo

- Edad?

- 18 - respondí, la señorita me miro durante algunos segundos como evaluandome, después dirigió su atención al ordenador

- ingresó hace un par de horas a terapia intensiva, tercer piso, puerta 6...

No termine de escucharla cuando corrí de nuevo hasta el tercer piso, los ascensores estaba ocupados y yo tenia prisa

Mientras corría llame a la casa, por suerte mama atendio

- Estoy en el hospital - dije entrecortada mente

- Que sucedió?! - la alarma en su voz me hizo volver a mi, debía ser yo quien mantuviera el control

- Papá y Bill tuvieron un accidente...

- Están vivos? - pregunto sonando mas tranquila

- Si pero su situación no es buena

- Voy para allá - apenas había llegado al tercer piso cuando colgué la llamada

Intente respirar y regular mi respiración cuando vi a un grupo de enfermeras y doctores correr por el pasillo "esta sufriendo un paro respiratorio" dijo una de las enfermeras, en seguida un doctor entro a una habitacion y se escucho un alboroto tremendo, enfermeras y doctores entraban y salían de la habitacion, apenas era consiente de los pasos que daba, camine temeroso por el pasillo cuando vi el numero en la puerta... era la puerta numero 6

Sentí como mis piernas flaqueaban, en cualquier momento caería...

"Lo perdimos... Hora de la muerte, 19:32..." mi mundo cayo... Solo era capaz de escuchar aquello

- No... - murmure parado frente a la puerta, las enfermeras y los doctores se giraron a mirarme - no! No... Papá! No! - grite caminado hasta el cuerpo inerte de mi padre, su rostro herido y con algunos rastros de sangre, su cabeza caída de lado y sus ojos cerrados

Me aferre a su cuerpo llorando desconsoladamente, no podía creerlo... Mi padre había muerto

Llore tanto que me dolió la cabeza

Después de unos minutos sentí como me tomaban por los brazos y me alejaban del cuerpo de mi padre que ya comenzaba a enfriarse

- Debes salir de aquí hijo - dijo una mujer madura viéndome con ternura y pena

Mire a mi padre tendido sobre aquella cama y me sentí morir, después alguien se encargo de cubrir su cuerpo con una sabana blanca haciendo cada vez mas dolorosa la imagen, camine siendo guiado por aquella mujer sin sentirme capaz de moverme por voluntad propia

- Hijo, y tu madre?

- Viene en camino - respondí con apenas un hilo de voz

- Podridas ayudarme a localizar a la madre del chico que venia con tu padre? - su pregunta hizo que algo hiciera click en mi interior

No te soltaré (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora