¡Mejores Amigos!

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La platinada iba de un lado y para el otro, vendiendo y pidiendo limosna junto con los demás amigos.

-¡conejo ya acabe! - grito la pelirroja.

-¡yo igual! - grito el peligris.

-¡nosotros igual! - gritaron los demás al unísono.

Se retiraron de la carretera donde trabajan para dirigirse al barranco, empezaron a jugar y a reír.

En la mansión

El peliblanco se alistaba para la cena con la familia Ice la gran empresa de aparatos electrónicos, se ajustaba la corbata de color rojo.

Iba vestido con un smoking color azul, con camisa blanca, zapatos negros y un peinado natural, bajo al salón encontrándose a su familia.

Su padre vestía un smoking color negro, con camisa blanca y corbata morada que hacía juego con el vestido de su madre.

La madre llevaba un vestido largo morada con escote en V, en la orilla llevaba pedrería, con zapatillas negras, su cabello recogido en un molote elegante, llevaba un lindo collar de esmeraldas que hacía juego con sus pendientes y una cartera plateada.

Su hermano llevaba un smoking verde, con camisa blanca, zapatos negros y corbata roja.

Su hermana llevaba un vestido color coral en estraple con un poco de joyería en la orilla, llevaba zapatillas negras, su corto cabello suelto en pequeñas ondas, llevaba un collar de pequeñas perlitas con cristales a su alrededor y sus pendientes que eran unas pequeñas perlitas.

-bueno vamos familia al auto - dijo su padre.

La pareja de los señores Overland Cheng salían juntos, seguido por su hijo mayor y al final sus dos hijos, la pequeña era ayudada por su hermano para bajar los escalones.

Y se fueron hacia la mansión de la familia Ice, atrás de un árbol una platinada y su hermano miraban curiosos a la familia de su amigo.

-chale esa familia va bien finolis - dijo su hermano haciendo una pose de diva.

-pareces catrin así morro - y soltó una pequeña risita la chica.

Después de jugar llegaron a su "hogar", daban gracias a dios que la mujer estaba dormida.

-búho, chat y pintora vallan a dormir - les sugirió el peligris.
-sale y vale - dijo el rubio

-¡va! - dijeron las otras al unísono.

-¿gata? - le llamo su hermano a la platinada - puedo dormir contigo.

-sí, mi niño venga pa ca - lo jalo para darle un abrazo.

-las otras ya se acomodaron, así que vamos a dormir aquí en el suelo - les dijo mientras acomodaba varios cartones.

-esta bien conejo - asintió con la cabeza, mientras extendía una cobija sobre los cartones.

-ya está - sonrió el peligris - vente para acá - le dio varios golpecitos a su lado.

-espérame - le dijo la chica mientras sacaba dos cobijas - ¡bingo! - y se acomodo a un lado mientras que su hermano recostaba su cabeza en las piernas de la chica.

-buenas noches hermana y igual conejo - cerró sus ojos y su hermana lo tapaba con su cobija.

-si, gustas acomoda tu cabeza aquí - le indico su hombro. 

-gracias conejo - recostó su cabeza en su hombro - duerme bien.

-igual - y recostó su cabeza en la cabeza de la chica, mientras dormían recostados en la pared de lámina.

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