Tierra o Asfalto

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¡Despierta!

De esa enajenación insostenible,

arrástrate a ese sitio al que no consideras pertenecer.

¿Destrucción?

¿Cómo es que pasó?

Si la tierra respiraba libre

y el aire se esparcía limpio y puro.

¡Silencio!

Escucha el lloro de los ríos secos,

contempla el plumaje de las aves

que torpes caen en su anhelo tonto de buscar alimento.

¡Hube dicho que cavilaría mañana!

Sin embargo, me sumerjo en un cosmos sin gnosis,

a carencia de amor por lo propio,

a falta del despojo de lo ajeno...

¡Despierta!

Que el último árbol tiene miedo,

que el calor sofoca el cuerpo mas no el alma...

¡Actúa!

O elige entre morir justiciado o jubilado,

o acorrala el estúpido intento de creer que te importa

y continúas sin hacer nada...

Los elementos dicen: ¡Basta!

Y ahí hostiga el humano la loca pretensión de "rescatar" lo que ya murió.

Alquimia PoéticaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora