- Por mucho que no lo quieras escuchar, no va a cambiar el hecho de que soy tu padre - dijo Marco.
- Es que no sé si a alguien como tu, se le puede llamar con esa palabra - dijo Matteo tratando de irse.
- Sabes? aún no entiendo porque estás así conmigo - dijo Marco.
- Quieres que te cuente la historia que tu ya conoces? Porque si es así con gusto lo hago - dijo Matteo.
Por otra parte, Nina que aún escuchaba tenía la esperanza de escuchar dicha historia.
- Si, quiero que me digas porqué te sientes así - dijo Marco.
- Comenzando, con que a mis 10 años tuviste un viaje de negocios, y mi madre no quería viajar y tú tenías que, entonces como estaba cerca de mi cumpleaños, mi madre te hizo prometer que estarías en Italia para ese día. Tu respondiste que si llegarías para ese día, yo esperanzado de que llegarás pero nunca lo hiciste llegaste al día siguiente, en la tarde, te excusarse con mi madre y ella te dijo que era a mi al que le tenías que pedir disculpas y yo te perdoné - dijo Matteo.
- Pero si me perdonaste, porque tanto rencor? - dijo Marco.
- Es que esa es solo la primera parte, recuerdo también que también ese mismo año en Diciembre también viajaste y prometiste llegar para Navidad y ni a Navidad, ni a Año Nuevo y ni al día de Reyes llegaste, ni siquiera llamaste para avisar que no llegaba y cuando llegaste mi madre te pidió el divorcio, y nos dejó - dijo Matteo secándose una lágrima - ahora ella ni siquiera me recuerda y si lo hace no me llama, después de mis 11 años nunca te volví a ver hasta ahora y crees que así debo llamarte padre, lo lamento pero estás muy equivocado - dijo Matteo, zafándose del agarre de Marco.
- Pero lo hice para que tuvieras todo lo que quisieras - dijo Marco.
- Cuando tenía 10 años nunca me faltó nada, tenías demasiados recursos, pero no tenías que viajar para tener mucho mas, y sabes no me hubiera importado que no tuvieras ese dinero que ganaste en esos viajes, hubiera preferido estar con mi padre y tener a mi madre conmigo - dijo Matteo y se fue hacia el hotel.
Nina lloró un poco al escuchar la historia de Matteo, y decidió que haría que su amiga no lo hiciera sufrir más de lo que ya lo hacía.
Matteo llegó escuchando musica y se sentó en el living y sin importarle que lo vieran comenzó a llorar. Recordar esa parte de su vida le había afectado demasiado.
Luna, Ámbar, Jazmín y Simón salieron al living a esperar a Támara y lo vieron allí. Luna no quiso acercarse pero Ámbar lo hizo enseguida.
- Matteo que te pasa? - preguntó Ámbar preocupada notoriamente.
