- Matteo, Que te pasó? - preguntó Ámbar preocupada notoriamente.
- Nada - respondió Matteo en un susurro sin dejar de llorar.
- Cómo que nada? Mira nada más como lloras - dijo Ámbar.
- No quiero hablar de eso por favor - dijo mirándola.
Cuando Matteo miró a Ámbar, divisó a Luna a pocos metros atrás. Igual que Matteo, Luna lo vio pero no hubo un mínimo cruce de miradas entre ellos. Luna notó que Matteo definitivamente no podía dejar de llorar. Eso la preocupó un poco, pero decidió no demostrarlo.
Por otra parte Matteo cada vez que secaba una lágrima otra salía, no podía evitarlo. Su pasado era un tema que tocaba sus fibras más sensibles, pero sobre todo esa parte de su pasado.
Támara llegó y vio a Matteo llorando, hizo la misma pregunta que Ámbar, y Matteo solo dijo que no quería hablar de ese tema.
Todos fueron al aeropuerto. Las ubicaciones en el avión eran de la siguiente forma:
Luna y Simón.
Jazmín y Ámbar.
Támara y Matteo.
Támara trató de insistir con el tema hasta que logró que Matteo le contara, lo que hizo que ella también derramara una lágrima y le brindara un abrazo. Luna notó la escena ya que Simón se había quedado dormido.
Llegaron a Buenos Aires y las lágrimas de Matteo no paraban, lo que preocupó a Ámbar y a Luna. Del aeropuerto fueron directamente al Jam & Roller. Cuando llegaron...
- Hermano, Que te pasó? - dijo Gastón preocupado por su amigo.
Antes de que Matteo pudiera responder...
- Estuvo llorando 5 minutos antes de ir al aeropuerto y en todo el viaje - le dijo Luna a Gastón.
- Qué?!? Pero porqué?!? - preguntó Gastón.
- No sé, eso si preguntáselo a él - dijo Luna y se fue.
- Matteo, me puedes contar que pasó? - dijo Gastón aún más preocupado.
- Podemos ir a un lugar donde no nos escuchen? - preguntó Matteo con la voz quebrada.
- Claro, vamos a los lockers - dijo Gastón.
Al llegar a los lockers...
