Mi Princesa ~CAMREN G!P~ #Completa

°Nervios.°

Pov Lauren.

Con todos de acuerdo en la sala, el día ya estaba puesto. Sábado, para una antigua Lauren sería como cualquier otro pero ahora, será algo crucial. Al atardecer sería el acto, porque la tradición dice que un día antes se debe dar a conocer la pareja ante el consejo.

Le pedí ayuda a Normani para la pedida de mano, yo quería que fuera lo más hermoso que ella haya visto, esto no era cualquier cosa y quería lo mejor, algo para ser inolvidable. 

N: Empezamos con esto.- me dijo mi amiga con su sonrisa de que iba a tramar algo.- Quiero que muevas ese trasero para ir a comprar boletos de avión con destino a Roma.

L: ¡¿Roma?!.- dije un poco sorprendida, no me esperaba ese lugar como una pedida de mano.-Pero no necesitamos boletos, sabes que la realeza tiene un jet privado.

N: Lo siento, se me olvidaba que ahora tienes ese lujo. Lauren, ella ya conoció Francia y se que es la ciudad del amor pero Roma es muy hermosa, además de que es un buen lugar.

L: Eso es cierto.- agarro a Normani de la mano para ir a hablar con mi abuela.

Fuimos a su oficina, ella estaba sentada tomando su taza de té y leyendo un libro.

L: Hola abuela...- me hace pasar y me siento junto con Normani en uno de los muebles frente a ella.- Digo, buenas tardes su majestad.- hago reverencia y me vuelvo a sentar.

A: ¿Qué se te ofrece Lauren?.- quitó la vista de su libro para poder prestarme atención.

L: Bueno yo...- estaba nerviosa, hablar con mi propia abuela aún me hacía sentir así y es que ya hemos pasado tiempo junto, es la reina, obviamente me siento nerviosa a pedirle algo porque tiene cosas más importante que atender. Normani me alienta a pedírselo.

A: Dime.- su expresión neutra me da un poco de miedo.

L: Quería saber si... ¿me dejas ir a Roma para la pedida de mano?.

A: Oh, eso.- sonrió dulcemente.- Claro que te dejo ir, al fin te dignas a escoger un buen lugar.- decía un tanto bromista.

Yo estaba festejando en mis interiores, abrace muy fuerte a mi abuela pero igual no demasiado como para sacarle los intestinos. Ella rió por mi entusiasmo y me separo de ella alegremente.

L: Gracias, en serio, gracias abuela.

A: De nada Laur, pero con una condición.- me dijo y yo rápidamente asentí.- Quiero que llegues semi pura y casta, por favor.- mi rostro de seguro estaba roja y Normani se empezó a reír junto a mi abuela, tenía mucha vergüenza.

L: ¡Abuela!.- me tape la cara por las manos, las dos se echaron a reír.

N: Te descubrieron Laur.- la mal miré, no era gracioso.

A: Es broma.- decía mi abuela entre risas.- pero ya, en serio.- se puso en modo de hablarme correctamente.- nada de lastimar a Camila.

L: Nunca haría eso abuela.- le contesté sincera, ella me miro asintiendo. Confiaba en mi.

A: Lo sé, espero que seas muy feliz.- nos abrazamos, para luego despedirnos.

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Con toda prisa llegamos a Roma, lo primero que hicimos fueron ver lugares hermosos, comprar cosas, etc. Junto con Normani fuimos a una joyería, nos acompañaban de igual manera unos de los ayudantes de la realeza, entre ellos expertos, seguridad, Harry y asistentes. Parecíamos un grupo de turistas.

H: Y bien Lauren, te tienes que decidir por un anillo.- me habló Harry, el era como un experto en joyas y todo eso, le dije que viniera conmigo pues era una gran ayuda, además se volvió un gran amigo.