Mi Princesa ~CAMREN G!P~ #Completa

¡¿Soy una princesa?!

Bueno, gracias al cielo que ya es sábado, maldita escuela no deberías de existir pero que más da, como sea será mejor que baje. ¡Oh! lo siento no he dicho mi nombre, soy Lauren Jauregui, tengo 21 años, vivo con mi madre en un departamento amplio pero acogedor y ahora me doy cuenta de que estoy hablando sola, creo que ya me volví loca.

C: ¡LAUREN! ¡YA ESTÁ LISTO EL DESAYUNO!.- Oí gritar a mi madre, ¡Dios mío!

L: ¡YA VOY MA'!.- me voy al baño pues para bañarme obvio, y después de esa relajante ducha salgo, me pongo un conjunto casual, claro no les dije, soy intersexual, si tengo una aparato reproductor masculino, información demasiado importante de saber.

C: Dios te tardaste.- Dijo mi mamá poniendo mi desayuno en frente de mi.

L: Lo siento, pero es que necesitaba reflexionar en la ducha... oye mamá.

C: ¿Pues qué tanto reflexionas?.- me contestó en forma de burla.- ¿qué pasa Laur?.- preguntó mi mamá mientras se sentaba a mi lado.

L: ¿Puedo ir con unas amigas al centro comercial después del desayuno?.- decía mientras me llevaba un bocado de mi desayuno a la boca.

C: Claro, pero no tardes.- me dijo de una forma muy dulce, amo a esta mujer.

L: Ok, prometo no tardar.- pasó el desayuno de lo más normal entre pláticas con ella y risas, terminé, me lave los dientes y me dirigí al centro comercial donde vería a mi mejor amiga Normani.

Al llegar la pude divisar de lejos, ella era mi mejor amiga de la infancia y la única que se quedó aún y cuando le dije mi secreto, si, porque varias personas se alejaron por eso pero que mas da, amigos falsos no los necesito, pero ella es diferente.

N: Hola Lern, ¿lista para las compras?.- preguntó con entusiasmo.

L: Si, vamos.- pasamos el día así, entre mucha diversión porque cuando salimos las bromas no paran y a veces llegamos a ser el centro de atención, y no compramos muchas cosas pero que la hayamos pasado bien me es suficiente. Hasta que llegó la hora de regresar a casa, ella no vivía muy lejos del centro comercial y podía ir caminando, pero yo debía tomar un autobús. Llegué a mi humilde morada y vi a mi mamá sentada en el sillón algo preocupada, extrañada me acerco y le preguntó.

L: Mamá, ¿qué pasa?.- con paso rápido me voy acercando hacia ella y dejando mis compras en un lado.

C: Lauren, hay algo que debes saber.-su voz la tenía entre cortada, cuando me dijo eso yo me asuste un poco por su actitud y manera de ponerse.

Xx: Buenas noches, Lauren.- escuché la voz de un hombre con traje elegante de esos que se ven carisímos, parado como si estuviera esperando a alguien en la entrada de la cocina.

L: ¿Quién es usted? Mamá... ¿qué pasa? no entiendo.- Todo esto me tenía tan confundida, ¿quién era ese hombre y por qué mi mamá estaba así?

Xx: ¡Oh! perdona, no me he presentado. Soy el señor Styles, Harry Styles. Y creo que su mamá tiene que explicarle algunas cosas.- decía lo más calmado y con una sonrisa.

L: ¿Mamá?.- dije viendo a mi mamá que tenía la vista pérdida hasta que me vio a los ojos.

C: Lauren, mira tu padre era un gran hombre pero, yo... me decidí separar de el porque las cosas eran complicadas, eso fue después de que nacieras, luego me quería acercar a él, pero me enteré de que había muerto.- dijo con ganas de llorar.- Yo era la única esposa que había tenido. Sé que esto de esta revolviendo un poco y créeme que igual para mi es difícil de explicarte.

L: Si y mucho, ¿pero esto qué tiene que ver?.-Dije tratando de entender y razonando por qué mi madre metía a mi papá en esto.

C: Mira se que te va a sorprender, pero tu papá... él... hija, él era el próximo rey de Francia; y tu en lo general eres la princesa.

L: ¡¿QUÉ?!.- Estaba en shock, no lo podía creer. Pasaban muchas cosas por mi cabeza. Pensaba que era una broma, ¡DEBÍA SERLO!.- ¿Es una broma verdad?.-pregunté a mi madre con una risa sarcástica porque en serio, está siendo muy buena con esto.- Mamá, dime que es una maldita broma.- Estaba por alterarme.

C: No, no lo es hija.-dijo con tristeza.- Yo jamás metería a tu padre en una broma así. Pero por favor, Lauren, tranquilízate.

L: Y pues, ¿por qué el esta aquí.- señalé al señor Styles.

H: Bueno, ahora yo le explicaré. Su abuela, o sea, la reina me mandó a buscar a la única heredera al trono, que es usted, ya que como es costumbre si su abuela llegará a fallecer, usted tomaría el cargo. Pero eso no sería tan pronto, usted ya tiene la edad suficiente para saber sobre esto y ella fue clara con sus palabras de que vengamos por la heredera. Usted me debe acompañar hasta Francia, ya que debe de aprender mucho antes de tomar el gran trono.

L: P...pero, ¿cómo se supone que voy a ser una princesa? no sé si sab...- no me dejó terminar de hablar.

H: Si habla de su "problema", el consejo del reino de Francia lo sabe, y han decidido considerarla un caballero excéntrico, pero usted será siempre una princesa.

L: Ok, pero ¿qué pasará con todo lo que tengo aquí? Mis estudios, Mi madre...-pregunté algo exaltada y pensando sobre lo que dejaría al acompañar a este, aún, extraño.

C: Laur, no te preocupes por mí, tienes que ir hija, es por tu bien.- agarrándome de los hombros mi madre se acerco a decirme lo que fue devastador para mi por verla de esa manera.

L:Pero, mamá..- no la quería dejar, no debía dejarla.

C: Estaré bien, tienes que ir.- dijo mi mamá tratando de no llorar y fundiéndose conmigo en un gran abrazo.

L: Ok madre, lo haré.- le decía lo más sincera que podía. Después de ese abrazo me dirigí al señor Styles.- ¿Y cuándo se supone que nos vamos?

H: Ahora mismo, la dejaré empacar algunas cosas, ya que en Francia le compraremos lo necesario para la princesa.- me lo decía muy cortés que hasta daba miedo.

Subí a mi habitación, no sabía qué hacer, iba a dejar todo lo que tenía aquí, porque aunque no sea mucho le tengo gran aprecio y no solo cosas materiales, dejaría a personas importantes, empece a empacar como me dijo el señor Styles y en una pequeña maleta guardé lo necesario. Baje con mi maleta y vi a mi mamá llorar, lo que rápidamente la abrace.

C: Cuídate Lauren.-dijo mi mamá llorando.

L: Lo haré, no llores por favor, que me haces más difícil irme mami.- seguimos así un buen rato hasta que llegó la hora de partir. Me despedí y al salir de mi ahora vieja casa, pude ver la limusina con las banderas de Francia a los costados. Me adentré a ella rápidamente y sin suscitar ni una sola palabra. 

H: Bueno, antes que nada no me digas Señor Styles, sólo dime Harry, ¿ok?.- dijo tratando de romper el silencio.

L: Está bien.- dije ya que no quería hablar con nadie y me dispuse a ver por la ventana. Pasaron los minutos hasta que llegamos al aeropuerto. Me sorprendí ya que no íbamos a viajar con los demás, si no, que había un jet privado obviamente con los logos del reino y agentes esperándonos.

H: Es hora de irnos.- dijo Harry ayudándome con mi maleta, entramos al lujoso jet y me senté a un lado de la ventana. Este sería un largo viaje a Francia.

*En edición.*