El dragón de los ojos azules (Larry Stylinson) [Pausada]

Capítulo 5

Abrió los ojos y sintió doloroso todo el cuerpo.

- Oh, dios. Mi cabeza está matándome. - habló intentando incorporarse en su colchón. El cual sentía inusualmente incomodo. - ¿Gemma? ¿Estás ahí? -Sin embargo se dio cuenta al instante que no obtendría respuesta de la chica, cuando vio que se encontraba en la cueva.

Oh mierda.

No había notado la presencia de Louis a su lado hasta que éste se removió un poco en el suelo, seguro el llamado de Harry a su hermana lo medio-despertó. Intentó ponerse de pie sin despertar al chico con notorias ojeras en sus ojos.

¿No será que...?

De repente sintió algo chocar contra su pie y cayó sobre el joven que aún dormía, despertándolo estruendosamente.

- Oops, lo siento. No quería despertarte. - habló el rizado al chico que lo veía con los ojos bien abiertos. Como queriendo hacerle daño. - ¡En serio lo siento! - replicó éste al final.

- Harry.

- ¿Si, Louis?

- Quítate de una vez. - habló el ojiazul cerrando los ojos demostrando rabia. Harry inmediatamente se puso de pie, sin embargo no duró mucho así, un mareo le vino de repente y tuvo que sentarse.

- No debes moverte tan rápido, aún no te recuperas del todo. - dijo Louis al verlo.

- ¿Tú me cuidaste anoche? - preguntó el dolido muchacho al recobrar la compostura.

- Bueno, no fueron los peces. - soltó el ojeroso con sorna. Harry desvió la mirada hacía abajo, se dio cuenta que había sido una pregunta bastante estúpida de su parte. Louis lo vio y sintió algo de culpa.

- Lo siento. - dijo y el rizado levantó la vista para asegurarse que sus palabras en serio salían de su boca y no las imaginaba.

- ¿Qué? - fue lo único que pudo pronunciar.

- Lo siento. No debí tratarte así, ni ahora ni anoche. Estabas enfermo, estás. Y yo fui cruel contigo. Pero entiende, me perseguiste por robarme una barra de pan, y te metiste a mi hogar, o cueva, como quieras llamarlo, dos veces. No nos calificaría como amigos y no es algo que los desconocidos hagan. Para colmo tuve que cuidarte toda una noche. Hago lo que- - pero no pudo terminar la oración, un quejido salió de su boca interrumpiéndolo, se agarró el brazo y dobló sus piernas agachándose.

- ¿Qué? ¡¿Qué sucede?! - preguntó el rizado al ver lo que pasaba.

- Yo... mi brazo. Me duele, el lobo. - y Harry entendió todo.

-  Louis déjame ver. - dicho eso el castaño levantó su manga, dejando notar una herida violeta hinchada. - Eso está infectado Louis, debemos llevarte al pueblo lo más rápido posible. Tienen que verte. Conozco a alguien allí que sabe de medicinas y esas cosas. Iremos con él.

- No puedo Harry, soy prácticamente un fugitivo, me arrestarían. - aseguró el ojiazul.

- No me interesa, tienen que ver esto. No puedes dejarlo así. Vamos al pueblo. - reiteró el rizado.

- No, Harry, no iré. - dijo entre quejidos el castaño.

- Está bien, lo traeré entonces.

- ¿Qué? ¡Harry! ¡¿A dónde vas?! - sin embargo no obtuvo respuesta, Harry ya había saltado al estanque.

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- Oigan, chicos. ¿Han visto a Harry por aquí? - Gemma entró al bar y se acercó a la barra donde estaban Niall y Liam.