Should I Trust You?

4° Part

Desperté gracias a la alarma, había dormido demasiado, y aun me sentía exhausto, ¿La razón? No la sabía, me paré de la cama tallando mis ojos, me percaté de que nadie estaba en casa., se habían ido, yo sabía que algo me faltaba oh si el "Ya despierta Edward" de mi madre quizá anoche fui muy duro con ellos, y no era lo mío ser así, por lo general las peleas las tenían con Gemma y no conmigo, ¿Qué me ocurría?, me di una ducha rápida, de mi closet saqué unos jeans color negro, zapatos negros y una camisa color blanco, tomé el móvil y mi mochila, bebí sólo un vaso de jugo de naranja, llevaba un poco de prisa, afortunadamente mi padre había dejado la camioneta y eso me daba más ventaja, tomé las llaves, entre y la encendí para dirigirme al instituto.

Llegue demasiado rápido al instituto, faltaban tan solo cinco minutos para que la clase iniciara, tome mis cosas y baje del auto, llevé mis manos a las bolsas de los jeans, caminé directo al salón, estaba la mayoría del salón ya dentro de éste, hasta Wendy, pude notar que el pupitre de Louis estaba vacío, me dirigí a mi pupitre y comencé a sacar mis cosas, hasta recibir señales de mi compañera de a un lado.

-Harry...-dijo ella sin mirarme.

-¿Sí, qué ocurre Wendy?- la miré.

-Escucha...-dijo con su tierna voz quebrada y los ojos a punto de desbordar un mar- yo... Dios.

-Ven aquí-extendí mis brazos para llevarla hacia mí- lo lamento tanto.

Acaricié su lindo cabello castaño, podía sentir sus gotas cristalinas cayendo sobre mi camisa mojando mi hombro, su respiración agitada y su estómago comprimiéndose repetidas veces.

-Tranquila, lo siento mucho, no era mi intención gritarte de ese modo.

-Fue mi culpa Harry, no debí de meterme en tu vida, es sólo que odio cuando alguien te hace daño, eres mi mejor amigo y siempre te voy a proteger.

-Lo sé-tomé su mentón- al igual que yo, pero no siempre estaremos juntos y no siempre se va a tener que llegar a esos extremos, sabes lo que hubiera pasado si ese chico fuera compulsivo y agresivo, no porque seas mujer se detendría, te hubiera hecho daño y tendríamos que intervenir Louis y yo, por eso soy así, no digo nada en momentos como ese que paso, ellos tarde o temprano se hartarán de sus chistes malos-sonreí.

-Tienes razón-limpió una pequeñas gotas que corrían en su pequeña mejilla- no quiero causar más problemas, sólo dejaré que tú mismo arregles estas cosas, ¿está bien?

-De acuerdo, gracias-sonreí.

-Te quiero Harry-enrolló sus brazos alrededor de mi cuello.

-Yo aún más, por eso eres mi mejor amiga, y ya vamos seca esas lágrimas, no pasó nada, una chica linda y alegre como tú no debería de llorar-escuché su risa al mencionar eso.

-De acuerdo-limpió las últimas lágrimas de sus ojos.

-¡Buenos días clase!

La profesora Tanner había llegado, guardamos silencio en cuento entro, aun estábamos preocupados por Louis, aun no llegaba a clases y si llegaba tarde la profesora no lo dejaría pasar, pensamos que se le había hecho tarde porqué nadie interrumpió la clase, pensamos que probablemente no pensó entrar a la clase y estaría en la cafetería, en cuanto terminó la clase de la señorita Tanner, guardamos nuestras cosas de una forma muy rápido y salimos del aula tratando de encontrarlo, no teníamos su número celular así que era aún más difícil encontrarlo...

-¿Te dijo que vendría?-preguntó Wendy.

-Sí, ayer él me aseguro que iba a venir al instituto.

-¿Crees que esté bien?

-No lo sé Wen, ayer estaba bien, tal vez sólo se le hizo tarde-me encogí de hombros.

-Si tan sólo tuviéramos su número celular-dijo angustiada.

-Oye, él estará bien, nunca te vi tan preocupada Wendy-reí.

-Es que tú sabes, es un chico lindo y muy amable-dijo mientras jugaba con sus dedos.

-"Amable"-la miré con una sonrisa.

-¡Ya Styles no me molestes!-soltó una pequeña risilla.

-¿Qué pasó con Drew?-la miré.

-¡No puedo decir que un chico es lindo porque ya lo mal interpretas Styles!- soltó una carcajada.

-Cuanto misterio-reí.

Caminamos con dirección a la cafetería, aun sin rastro de Louis, Wendy estaba muy preocupada, me sorprendía que se preocupara tanto, no hizo eso conmigo cuando me enferme...

-Chicos llegaron, creí que ni vendrían -nos saludó a ambos la chica de cabello largo y oscuro.

-¿Cómo estás?-pregunté.

-¿Y Michael?-preguntó Wendy.

-¿No supieron?-dijo ella desanimada.

-No supimos... ¿Qué?-Wendy me miró dubitativa.

-Elizabeth... -su voz se quebró..

-Por Dios.

Wendy de inmediato enrolló sus brazos por mi torso.

-Tranquila- toqué dulcemente su cabello.

Wendy y Elizabeth han sido buenas amigas desde hace tiempo, no las mejores pero Elizabeth ha estado unida desde un tiempo con nosotros.

-¿Cómo pasó?- pregunté dubitativo.

-Ella...- sus ojos se hincharon y su voz estaba ahogada- se...

-Ven - extendí mis brazos para unirse.

-Hizo lo que quería -lloriqueaba la chica de cabello castaño.

-Tranquilas todo va a estar bien - abracé a ambas con fuerza.

El apetito se me había ido después de la noticia que Emily nos dio a conocer, no estaba tan mal como Wendy o Emily permanecí fuerte además seguía confundido con todo esto, aun no lo digería bien, las chicas no quisieron probar nada del menú de la cafetería, estaban mal.

Las clases pasaron, lentas como siempre, Wendy no habló para nada con nadie, esa sonrisa de ella no estaba presente ni la de Louis, el salón estaba muy callado, muchos conocían a Elizabeth y al parecer se enteraron de la noticia, esperaba que Michael y sus padres estuviera bien...

Terminaron las clases gracias al cielo, Wendy y yo salimos del aula lo más rápido posible, nos encontramos con Emily y pregunté si se iba a ir sola, sólo me dio las gracias y dijo que sus padres pasarían por ella, así que Wendy y yo nos dirigimos hacia el estacionamiento del instituto, presioné el botón para abrir la puertas, abrí la puerta de Wendy la del copiloto, para después entrar yo, avente mi mochila en el asiento de atrás y me dispuse a encender el auto.

-Sabes que odio verte así - miré de reojo a la chica.

-Conocía a Elizabeth desde que tengo memoria-dijo sin mirarme- me duele mucho su perdida.

-Yo te comprendo Wendy, pero no puedo soportar verte de esa forma, y no podemos hacer nada ante éste tipo de cosas y lo sabes, era su vida y no podíamos meternos en ella-ella sólo me miró con esos ojos inundados en lágrimas, que en seguida miraron la ventana- ah... lo lamento Wendy, es sólo que me impactó la noticia, sólo lo lamento mucho.

Y fue lo último que se escuchó en el auto...