Quince Días...

Capitulo I

LOS QUINCE DÍAS MAS LARGOS... SIN TI.
******
Recuerdos de tu adiós.

-Naruto, creo que debería... no se... mejor quedarme...-

-debes ir, siempre has querido hacer esta expedición-

-pero no quiero dejarte solo... yo...-

-Hinata, hermosa, solo serán quince días...-

-es verdad, ¿que son quince días...?-

¿Qué son quince días? Verdad.... Hinata

-serán los quince días más largos de mi vida, pero aquí estaré esperándote-

Tus labios sabían más dulces ese día, lucias hermosa con tu traje de expedición color caqui y aquellas botas negras. Lo tengo tan bien grabado en mi mente.

-volveré pronto, lo prometo...-

-aquí te estaré esperando...-

Y saliste por aquella puerta de caoba tallada, de aquel departamento que juntos compartíamos... tu espalda lucia más amplia y encantadora, y esa cola de caballo que rosaba suavemente la tela de tu camisa.

–Solo serán quince días- susurre al oír la puerta cerrarse, y del bolso de mi chaleco saque un hermoso estuche de color vino, que guardaba dentro de ella una perla, igual al color de tus ojos.

Sonreí para mis adentros al imaginar la expresión que pondrás al verla... ya son tres años juntos Hinata, y estoy seguro que es junto a ti que quiero recorrer lo que me queda de vida.

-solo serán quince días, ¿verdad Hinata?- 

Solo serán quince días...

Los quince días más largos de mi vida...

-0-

Tu última llamada fue el 11 de julio de 2011 a las 4:30 pm, recuerdo que estabas emocionada, habías encontrado una exótica mariposa, tenías la muestra que pensabas traer al museo de vida silvestre en Konoha.

-es hermosa, y su tamaño es asombroso, ya la veras, acabo de terminar el mariposario. Jejeje aquí hay mucha variedad...-

Oír la emoción en tu voz era una melodía exquisita...

-esto ha sido maravilloso Naruto, como deseara que estuvieras aquí, sería maravilloso...-

-tal vez podamos regresar juntos algún día-

-eso me encantaría-

No puedo mentirte, al principio sentí miedo al saber que irías al país del sonido, los rumores de guerrillas y secuestros me aterraban, la verdad la idea de perderte siempre me aterraba. Pero decidí ignorarlo, tú estabas muy entusiasmada con la expedición a los bosques de esa región ¿Quién era yo para apagar tu felicidad? No podía cortarte las alas mi linda mariposa.

-mañana partiremos al bosque húmedo que queda en las fronteras del país del sonido, al parecer ahí es el único lugar donde se encuentra la mariposa monarca gigante, espero poder capturar unas dos jejej quiero tener una en casa...-

-cuídate mucho mi pequeña exploradora-

-claro que si Naruto, estaré contigo pronto, ya verás...-

Te juro que de haber sabido que esto pasaría... jamás te hubiera dejado volar de mi lado... jamás. Debí ser más precavido...Debí haberte detenido...

-0-

El 14 de julio del mismo año recibí aquella llama del director del museo...
Al fin, había estado hostigándolo mucho, pues eran dos días sin saber de ti... sin una llamada, sin un mensaje. Nada. Su voz sonó apagada, note que le costaba hablar... después de aclararse la voz y suspirar profundo, pronuncio aquellas palabras, sí, esas palabras que destrozaron mi vida... que detuvieron por instantes mi corazón y acabaron con mi cordura.

-lo siento Sr. Uzumaki, no sabemos cómo paso, toda la expedición fue apresada por miembros de una guerrilla de esa zona... no habían reportado nada, pero esta mañana salió por las noticias, un video mandado por ellos... sin duda alguna, capturo a todos los miembros, y entre ellos... pues... la Dr. Hinata...-

-Eso es mentira- susurre

-una maldita broma ¿verdad?-

-lamento decirle que no...-

-NO ME JODAS VIEJO, ESTO NO ES VERDAD, ¡! NOO!!-

-Lo siento...-

-DEVUELVEMELA, REGRESAME A HINATA...-

Deje el teléfono colgado y me derrumbe en la alfombra, mis ojos derramaban lagrimas sin cesar, el nudo en la garganta crecía y crecía al igual que el dolor en mi pecho...

-Hinata...-

La voz me salía entre cortada, apenas podía pronunciar tu nombre... jamás había experimentado una agonía tan grande.

-Hinata-

El dolor se hacía más intenso y sofocante, desesperado mi corazón me hacía llamarte, deseando que respondieras a mi voz.

-Hinata-

Y perdí la razón, el corazón... la vida misma...

-¡¡¡HINATAAAAAA!!!-

Grite tu nombre entre lágrimas y congojo, grite desesperado, como grita un condenado a muerte pidiendo ayuda, socorro, piedad.

-¡¡¡HINATAAAAAA!!!-

Y cada vez me costaba más sacar los lamentos de mi boca, no podía dejar de llorar, no podía dejar de llamarte.

-¡¡¡HINATAAAAAA!!! ¡¡¡HINATAAAAAA!!! ¡¡¡HINATAAAAAA!!!-

-0-

No recuerdo bien que paso conmigo, solo sé que desperté en el hospital, al parecer sedado. Sakura estaba allí, sabes, ella no se ha apartado de mi lado...Lloramos juntos, grite en sus brazos... mi corazón estaba hecho pedazos. Ni los sedantes, ni las pastillas... nada ha funcionado.

Dime Hinata... ¿Cómo se cura este dolor que siento?
Estaba tan acostumbrado a ti, y ahora ya no estás conmigo... ¿Qué puedo hacer?

-0-

Al salir del hospital, fue más doloroso, ya habían pasado los quince días de tu partida, y aun no volvías...-ya vendrá...- le decía a Sakura, mientras me sentaba por horas frente a la puerta.Ella me veía con nostalgia y melancolía, cuidando de mí como si fuera un enfermo terminal, y justo así me sentía

Revise una y otra, y otra vez el maldito video desde mi celular... te veía ahí, al fondo, con todas esa personas... yo pude notar el terror en tu mirada ¿habías llorado mucho, verdad? Se notaba en tus ojos. Me sentí tan impotente, tan inútil, tan incapaz de salvarte de esa pena.Te juro mi niña, si la vida me diera la oportunidad cambiaria de lugar contigo, una flor como tú, no debe pasar por semejante castigo.
Sé que te molestarían mis palabras en este instante.... Pero es justo ahora, en este preciso instante que cuestiono la existencia de un Dios...

Lo sé, lo sé, se lo que me dirías...

-Jamás blasfemes de esa manera Naruto, uno no sabe los designios que Dios tiene para nosotros, no veas las dificultades como un castigo del cielo, míralas como una oportunidad de volverte más fuerte, de acercarte más a Él...-

Lo siento Hinata, pero estar sin ti no puedo verlo si no como el más grande castigo que se me ha impuesto. ¿Será que he sido tan malo en mi vida? Pero porque debes tú también pagar por ello... dime Hinata ¿Por qué tú?

-0-

Hoy ya hace tres años sin ver tus ojos perlados...Hoy hace tres malditos años sin acariciar tu piel nívea...Sin sentir el olor a lavanda que emana de tus largos cabellos...Hace tres años no escucho salir mi nombre de tus labios...Tus labios, recuerdo su exquisito sabor a canela, siempre sabían a canela...Dulces, relajantes...Hace tres años que no te hago el amor... que no rozo tu piel con la mía... hace tres años sobrevivo sin ti... solo esperando, confiando que cumplirás tu promesa.
Que volverás a mí...

-Solo serán quince días... ¿verdad Hinata?

Los quince días más largos de mi vida...

**************************