MONSTRUO

LA VERDAD TRAS MI NACIMIENTO

Sé que me van a odiar, y es que de verdad, el personaje que puse como el ser malvado... no me cae en gracia.  en fin.... espero disfruten del capítulo y a ver si dejan algún comentario respecto a como quedó.

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CAPITULO 6º

LA VERDAD TRAS MI NACIMIENTO

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"La vida muchas veces es cruenda y sin misericordia de nadie... muchas veces, injustamente, les da cosas a las personas que no lo merecen y cuando tu preguntas ·Por Qué· solo te responden que Dios le da sus batallas más difíciles a los hijos que más ama...

En definitiva, Dios tiene un crush muy fuerte por mi "

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Dias pasaron después de aquella confesión de mi hermano... Días en los que no volvió a aparecer. Días en los que incluso me enteré por boca de Momoi-san que ella y mi hermano ya no estaban juntos. Días en los que Taiga no me abandonó ni a sol ni a sombra con tal de conocer mi decisión respecto a él y Daiki... Días cubiertos de incertidumbre, dolores de cabeza y confusiones tan grandes que... mi cuerpo parecia no querer soportar.

Fueron Días difíciles internado en ese hospital recuperándome de aquella Neumonía que casi me quita la vida...

Días en los que al fin mi padre se sinceró conmigo y me contó la historia de mi procedencia... y todo lo que había ocurrido en esos 3 días que estuve inconsiente en el hospital.

Tras preguntarle si lo que Daiki había dicho era verdad... él solo se sentó a mi lado y me contó la siguiente historia.

/ Todo había comenzado cuando papá recíén cursaba la preparatoria.

Aomine Daichi era el jugador estrella de basket de la preparatoria en la que estudiaba, el junto a un grupo excepcional de jóvenes a los cuales llamaban Kiseki no Sedai. Todos ellos liderados por su capitán, un joven prodigio que a parte de ser casi perfecto como estudiante, era un genio en el juego. Su nombre era Akashi Seijirouu.

Todos conocían la sobriedad y seriedad de Akashi, después de todo, él sería el heredero del imperio creado por su padre... un empresario de renombre en todo japón.

Fue una tarde en especial cuando mi padre la vio por primera vez... por extraño que pareciera, Akashi había tenido que faltar a clases por control médico, ya que se había sobre-exigido y había terminado por colapsar, y ella... ella no lo supo hasta que por casualidad, mi padre al no verla, chocó con ella y la derribó. En un principio, aceptó mi padre, que iba a reclamarle como lo hacía con todas las chicas que trataban de llamar su atención de esa forma... ya que creyó que así como la loca de Kise Ryuka no lo dejaba en paz, ella estaba haciendo lo mismo; mas cuando sus ojos se encontraron... mi padre dijo que fue algo que jamás había sentido antes.

Ella era pequeña, demasiado... si hasta parecía de secundaria más que de preparatoria. Su cabello de un hermoso color celeste cielo que caía descuidadamente por su rostro y hombros hasta la mitad de su espalda, unos enormes ojos del mismo tono que un cielo de verano rodeados de espesas y largas pestañas azul ocre, incrustados en un rostro dulce, fino y delicado... de piel tan blanca como la misma leche, resaltando majestuosamente unos finos labios rosa que se veían tan suaves, que su corazón palpitó tan fuerte que al otro lado del mundo debieron haberle oído... Papá dijo que era un ángel... era hermosa.