Amor? Navia?

LO QUE ESCRIBI

Quedar atrapada en mis sueños

Sería el camino más fácil

Pero si despierta transformara mi realidad en un sueño, sería lo ideal.

¿Suicidio? Juvia reía, la histeria dictaba en ese momento, como no hacerlo, los días pasados después de encontrarse con Natsu provocaron en su persona nuevos sentimientos, la idea de buscar una nueva perspectiva de lo que era el amor.

Una mañana fría caminaba para distraerse, oía un silencio tranquilizador, el viento sobre su rostro hacia que sus mejillas quedasen sonrojadas por aquel extraño clima de aquel día. Se detuvo frente a una biblioteca, el lugar se encontraba en extremo sosiego pocas personas se encontraban presentes, el aroma de los muebles antiguos y el extraño lugar cerrado, la hacían sentir en su fortaleza; el lugar podía ser alumbrado por los rayos de sol que entraban por discretas aberturas en la parte superior del mismo edificio... un juego de luz y sombra que la invitaban a quedarse.

Caminando entre los muchos libros entre repisas su vista capto uno en particular, un libro: "Escritura Para El Alma". A medida que pasaba cada hoja una oración quedo en su mente:

Terapia de la escritura...

El libro cayó en el momento correcto a sus manos, muchas veces había visto a Lucy y sus libros aunque según la Loxar recordaba hablaban de temas más románticos en su mayoría. En ese entonces no le tomaba mucha atención a esos detalles.

Ya era tarde cuando hubo terminado el libro, el hambre la devoraba, sin más se dirigió a Fairy Tail por algo de comer, entro en completo silencio, nadie la molestaba y por lo que tenía entendido el grupo de Natsu se fue de misión con excepción de Lucy.

Paso sin ser percibida, todo era alegría, diversión y mucho alcohol... le pidió a Mirajine un simple té y pastel, fue a la mesa más alejada para poder escribir.

Juvia no sabe que sentir, Juvia tendría que estar feliz y sonreír con su familia, pero siente que no pertenece aquí ni en ningún otro lugar, que debería hacer. Juvia se siente vacía... entre sus manos un pedazo de papel y un lápiz la llamaban a que escribiera lo que deseaba.

Quiero escribir despejar mi alma,

Saciarla de emoción faltante en mi cuerpo inerte

Para que de una vez mi alma se convierta en energía y quede flotando en el aire

Que como el agua fluya y descanse, solo eso quiero descansar

Y sentirme atrapada en un sueño eterno donde pueda por lo menos sentir

Donde no tenga este pequeño vacío donde supone esta mi corazón

Que mi mente no se nuble,

Que la lluvia de mi ser este deseosa de estar en el cielo no como tristeza sino paz...

Lentamente llego a los brazos de Morfeo, sobre el papel sonreía entre sueños. La mayor Strauss se acercó a ella con ternura, la cubrió con un manto y la dejo reposar. Con aquel acto la pequeña hoja que tenía salió volando cerca de la maga celestial.

Lucy observo con detenimiento a Juvia y no dejo de sentir un aura algo diferente al que solía transmitir, cuando vio el papel que tenía cerca lo alzo para así colocarlo a la mesa, aunque su curiosidad la hizo leer. Lo primero que se le vino a la mente fue:

- Juvia ya no quiere vivir. ¿Dios mío se quitara la vida?, ¿Gray le habrá dicho que él y yo estamos saliendo?, perdóname Juvia pero al final si me convertí en tu rival del amor, luchare por él aunque termine haciéndote daño porque yo lo amo.

.

.

.

Juvia despertó sorprendida; se había dormido en Fairy tail, sobre su mesa había pasteles y chocolates; a su alrededor estaban; Gajeel, Erza, Lucy, Cana, Wendy, Charle y Happy observándola mientras que Natsu y Gray a distancia contemplaban la escena, el primero con una sonrisa leve y contagiosa, mientras el segundo solo daba miradas ansiosas y con la historia que Lucy le conto de cierta manera lo alteraba.

- ¡Eh mujer como es eso de que quieres morirte! – entre palabras de enfado y preocupación la miro a los ojos el come metal.

- Juvia... Juvia no sabe que decir... - el silencio y titubeos provocados por la impresión de sus palabras la dejaron en blanco.

- ¡MUJER RESPONDE! dime ¿es cierto que quieres morir?

- ¡Golpéame Juvia! si de esa manera logras restaurar tu espíritu, no importa lo que suceda conmigo– la escarlata gritaba transmitiendo su emoción.

A medida que escuchaba los regaños, concejos, comentarios, algo se formaba dentro de ella. Habían visto lo que escribió, no deseaba morir era solo la forma de escribir lo que sentía en ese momento, escribir para desahogarse. La manera en que se preocupaban el saber que era importante por solo un momento provocaba calidez dentro de ella.

De pronto todos escuchaban unas pequeñas risas que iban aumentando junto a ellas pequeñas lágrimas de felicidad. Los miembros de su familia quedaron anonadados de verla feliz a pesar de todo.

- Siempre tuve amor...definitivamente Juvia quiere ser feliz susurró...