01. Donde todo comienza

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La música es, según la definición tradicional del término, el arte de organizar sensible y lógicamente una combinación coherente de sonidos y silencios utilizando los principios fundamentales de la melodía, la armonía y el ritmo, mediante la intervención de complejos procesos psico-anímicos. El concepto de música ha ido evolucionando desde su origen en la Antigua Grecia, en que se reunía sin distinción a la poesía, la música y la danza como arte unitario. Desde hace varias décadas se ha vuelto más compleja la definición de qué es y qué no es la música, ya que destacados compositores, en el marco de diversas experiencias artísticas fronterizas, han realizado obras que, si bien podrían considerarse musicales, expanden los límites de la definición de este arte.

La música es, además, de lo que me he visto rodeado desde mi primer aliento.
Mi familia es muy grande -aunque ahora que lo pienso, ¿qué familia no es grande? - y la pasión de la familia es precisamente la música: instrumentistas, compositores, profesores, productores, técnicos en sonido, cantantes, orquestistas... cada integrante tiene una especialidad y si no la posee, la adquiere con el tiempo. Más que una habilidad, es una partícula más de nuestro código genético.

  Mi padre es músico de jazz y vive todo el tiempo de gira o trabajando en algún álbum o banda sonora, mientras que mi madre se desvive por la música de cámara: toca varios instrumentos de cuerda, como el arpa y el cello; mi bisabuela era mezzosoprano dramática e interpretó a Cármen en varias representaciones de la obra... incluso mi tatarabuelo comenzó como pianista en un cine, cuando las películas eran mudas y terminó convirtiéndose en un gran intérprete, dando grandes conciertos para teatros llenos a reventar.

¿Por qué les hablo de mi familia antes de hablar de mi mismo? Porque esta historia comienza con uno de sus integrantes, de hecho.

Con el más odioso de todos.

Una mañana cálida y bastante iluminada -de esas que suelo odiar-, terminaba de grabar un demo con guitarra justo para exportarlo a mi computadora y comenzar, entonces, con la misma edición del audio: ajustar niveles, cortar silencios, realzar graves...

Pero mamá llamó a la puerta algo insistente -algo normal en ella ya que soy hijo único y tiende a ser bastante demandante de atención conmigo.

Dijo:
—¡Cariño! ¡Baja por favor, tenemos visitas!

—¿No puedes fingir que no estoy, mujer? —Pregunté fastidiado, asomándome por la puerta de la habitación. No había tardado en exportar el archivo de audio, pero me gustaba concentrarme en mi tarea.

—¡Tu abuelo llegó hoy! —Anunciócon voz ensoñadora y feliz, su rostro se veía radiante. —¡Pidió verte tan pronto como llegara a casa y...! —Torcí la boca con desaprobación. —¡Vamos, Jotaro! Después de todo, por él estásencerrado en tu cuarto. Sólo saluda y regresa, si quieres, pero fue muy firme en su mandato.

"¿Qué podría querer el viejo?", pensé. Tras un suspiro, salí de mi cuarto y bajé las escaleras tras mi madre, pensando que cualquier cosa podría pasar.

Si conocieran a un hombre como mi abuelo, lo comprenderían, así que trataré de expresarlo para ustedes.

Joseph Joestar o Jojo es un ejemplo de"querer deshacerse de la fama de la familia" y, tras ser conocido como el nieto de Jonathan Joestar, tomó medidas desesperadas: primero dejó de ser violinista para comenzar con la guitarra, sin conocer como tocar el instrumento, después comenzó a usar ropa estrafalaria y de manera posterior, terminó siendo uno de los más grandes exponentes del rock, utilizando sonidos experimentales y otras mezclas en sus composiciones. Formó parte de una banda de rock, Sacred Heart, combinando géneros como el hard rock y el heavy metal y junto con su amigo, Caesar Zeppeli, lograron posicionar esta propuesta musical en las listas de los más vendidos.

Don't fear The ReaperDonde viven las historias. Descúbrelo ahora