Bullying (Acoso Escolar) [Camren] 2

Duele como no te imaginas.

Camila despertó y la casa estaba en completo silencio. Leo apareció cuando vio un poco de movimiento y saltó a las piernas de su dueña.

Lauren escuchaba todo desde arriba en su habitación, pero es orgullosa y no quiso bajar a ver como estaba su esposa, estaba dolida, molesta...Pero también un poco arrepentida, no sabía en realidad que es lo que tenía que hacer para mejorar esta situación, lamentaba también el hecho de haber sido tan grosera con Camila, sin embargo no se podía quitar de la cabeza que su esposa y esa tal Maddie y lo que más le enfermaba era imaginarse que ambas eran compañeras de cama. Le enferma el solo hecho de que alguien pueda llegar a tocar de esa manera a su esposa.

Camila: ¿Clara?- le escuchó hablar.

Sin embargo Lauren permaneció sentada en su cama, acariciando a las bebés dormidas mientras un par de lágrimas amenazaban con salir de sus ojos.

Camila: ¿Será que estamos solos, Leo?- sintió que comenzaba a caminar-. Me duele la cabeza como tu no te imaginas, todo me da vueltas- se apoyó en el mueble de la cocina y tomó un celular. 

El fondo de pantalla era Lauren junto a ella, así que supuso que era su celular.

"Lauren"

Camila: ¡Cielos Leo!- exclamó, golpeándose la frente- Lauren, ¿estás acá?- la morena comenzó a subir las escaleras y a Lauren, con cada paso que sentía más cerca, su corazón latía más rápido.- ¿Donde estás?

La menor se comenzó a sentir completamente vacía ¿y si le había dejado? Ella tenía esperanza en poder hablar con Lauren y poder hacerle entender como eran las cosas, como había pasado todo. 

Camila: ¿Estás aquí?- abrió la puerta de su dormitorio, allí vio una silueta de espaldas, supo que era su esposa, la conocía-. Lauren, ¿po...Podemos hablar un momento?- dijo avanzando con timidez.

Lauren: ¿Y qué vas a decirme? Que en realidad nunca me engañaste con esa tipa anorexica, que todo fue juego de mi imaginación, producto de mis atrofiadas neuronas, ¿acaso me vas a decir que nunca te abrazaste con ella mientras ambas sonreían felices? ¿mientras le dabas un ramo de flores y una caja con sepa Dios que cosa?

Camila: Eso paso, ella me estaba ayudando a...A saber que tendría que decirte cuando te viera respecto a nosotras, Lauren. Nunca te engañe, nunca podría hacerlo...Yo solo quiero intentar arreglar las cosas, no sé porque las cosas están así- dijo sollozando.- Eres distinta a la Lauren con la que me casé.

Lauren: Bueno, todos cambian, ¿no?

Camila: Supongo, pero no de esta manera, no estas cambiando para bien, me asustas Lauren.- confesó- Ya ni siquiera puedo abrazarte porque siempre estas enojada y no sé la razón, todo hago mal yo ya no sé que hacer.

Lauren: Tampoco yo.- bajó la mirada, sintiendo como sus lágrimas caían en su regazo- Me siento perdida.

Camila: El último recuerdo lindo que tengo de nosotras fue esa noche en el barco- sonrió un poco, recordando esa cena que tuvieron las dos hace poco tiempo.

Ambas se habían preparado con mucha emoción para aquella noche, Camila la había estado planeando hace mucho tiempo y Lauren estaba tan entusiasmada como ella. La cena había sido maravillosa al igual que el vino. Lamentablemente Clara tuvo que quedarse con las niñas esa noche al suponer que la joven pareja iban a querer tener un momento de intimidad en su hogar. 

Esa fue la última noche que ellas estuvieron juntas.

Lauren: No puedo creerte, Camila, simplemente no puedo.- por primera vez Lauren la miró.

Camila: ¿Por qué no?- dijo secando sus lágrimas.- Creí que realmente confiabas en mi.

Lauren: No sé, has estado extraña últimamente, no contestas mis llamadas incluso cuando sé que estas en casa y no estás trabajando, resulta que ahora resultaste ser amiga de tu secretaria de cuarta y cuando llegué se estaban abrazando y le diste un ramo de flores ¡como me los dabas a mi!- exclamó desesperada.