No hay dos sin tres

Capítulo 4

Está claro que al principio, Luna se sentía mal, con culpa. A pesar de que ninguno de los dos se hablaba con Travis, él había ocupado un lugar muy importante en la vida de ambos. ¿Traicionarlo de esa forma? No le parecía correcto. Pero Ayrton le gustaba. Y sin querer, comenzó a sentir lo mismo que había sentido por Travis, aunque no era totalmente igual.

Fueron despacio, y en secreto.

Y un año más tarde, los dos estaban enamorados y felices. Y como si Travis nunca hubiera existido.

Pero existió, y no solo eso, sino que volvió. Volvió para navidad y año nuevo, y así poder pasarlo con su familia. Y, con la idea en mente de volver a mudarse a su antigua ciudad, fue en busca de Luna.

Los dos habían cambiado de número, por lo que él fue a buscarla a su casa. Pero ella ya no vivía ahí...

Y después de buscar entre sus cosas, encontró el número de su madre.

La señora no estaba en su casa, pero si su ama de llaves, que, sin estar al tanto de la situación, le paso felizmente la nueva dirección de Luna a Travis.

Se puso en marcha. Ahora ella vivía en un departamento un poco más grande que el anterior, y más cerca de su trabajo. Y más cerca de la casa de Ayrton, a la que planeaba mudarse con ansias.

El timbre sonó alrededor de las 7 pm. Y Luna no esperaba visitas, porque estaba con Ayrton mirando una película. Pauso esta y se acerco al teléfono para contestar. Su dulce voz pronuncio un ¿Quién es? que hizo que Travis casi se ponga a gritar. No se había dado cuenta de lo mucho que la extrañaba hasta ese momento.

—¿Luna? —pregunto él, nervioso, por más de que supiera de sobra la respuesta— Soy Travis, hola. Quería verte.