Capitulo 7

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Al entrar en mi habitación me senté en una punta de la cama con las piernas cruzadas. Saqué mi teléfono y mire la hora, 19:14, me levanté y salí al pequeño balcón a que me diera el aire.

Me senté en el suelo igual que antes y pude escuchar el sonido de un mechero encenderse. Miré hacia la derecha y ahí estaba él, sin camiseta, mostrando su abdomen bien marcado.

Lo miré durante varios segundos, aprecié como le daba una calada a su cigarro y luego seguí mirando el paisaje que se veía desde mi habitación. El todabia no se habia percatado de mi presencia hasta que estornude y este se giro y me vio, me levante del suelo y me apoye en el muro de mi balcón, este se apoyo de espaldas a este y me miraba, yo miraba la playa que se veia desde el balcón.

-No tendrías que estar fumando Skywalker. - lo miré de reojo y vi como una pequeña sonrisa salía de sus labios.

- Hago lo que me da la gana amor. - resoplé y volví a mirar hacia la playa que se veía de nuestras habitaciones. - Porque tanta expectación hacia el paisaje? - Vi como Anakin me miraba con curiosidad y empecé a reír mirando el paisaje.

-Hace unos años, cuando tú hermana y mi hermano empezaron a salir juntos me acuerdo que íbamos siempre a esa playa, nos tumbabamos en el arena a que los rayos de sol secarán el agua de nuestra piel y mientras adivinábamos que pájaros estaban cantando. - Note unas manos rodeandome de la cintura, puse mis manos encima de las suyas y giré a mirarle su preciosa cara.

-No me gusta la arena, es tosca, aspera e irritante y se te mete por doquier, aqui no es asi- Empezó a acariciar mi mano con el dedo pulgar, susurrando todo a mi oído-Aqui todo es suave y sedoso. - Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, él lo noto y pude escuchar como reía por lo bajo, empecé a reír también y me dí la vuelta para mirarle a la cara, su dedo pulgar seguía acariciando mi mano.

-Te a salido la vena romántica Vader? -Comencé a reír y me siguió el juego.

-A veces puedo ser un poco romántico Jaqueca. Pero eso si solo con quien se lo merece - Me guiñó un ojo y escuchamos que la puerta de la entrada se cerraba y un David estresado gritando a su hermano mayor. - El deber me llama nena - me volvió a guiñar el ojo y me soltó para ir en búsqueda de su hermano.

Me quedé en el balcón viendo el atardecer, era uno de mis momentos favoritos del día. La mezcla de colores anaranjados y amarillentos en el cielo azul me encantaban. Cogí mi cámara la cual tenía abandonada y empecé a hacerle fotos al cielo.

Bajé hacia la cocina ya que era tarde y estaba empezando a tener hambre y me encontré a los hermanos Parker hablando.

- Meredith te apetece salir esta noche con nosotros? - David me miró muy emocionado, en cambio su hermano lo miro con cara de asco.

- Sinceramente David me encantaría salir con los dos pero no tengo ganas, estoy muy cansada. - David me miró apenado.

- Bueno, pero para la próxima vendrás? - me hizo un puchero y asentí con la cabeza. Vino y me dio un abrazo, pude ver la cara de su hermano y no le hizo mucha gracia, comenzó a toser y David se separó de mi.

- Voy a preparar la cena, en media hora o así estar preparados por favor. - Los miré y respondieron con un Sí y fueron hacía sus habitaciones.

Comencé a preparar la cena y me puse una playlist ya que no quería aburrirme mientras cocinaba, comencé a cantar todas y cada una de las canciones que sonaban. De un momento a otro escuché como alguien cantaba muy pegado a mi espalda. El perfume que llevaba lo delataba. Me giré y empecé a cantarle con toda la emoción del mundo. Empezó a reír y con su dedo índice me dio un pequeño toque en la nariz a lo cual la arrugué un poco sonríendo. Acabé de hacer la cena y bajo David.

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