Si tan solo me amaras

Capitulo 10

Están en la cafetería nervioso, jugando y rompiendo una servilleta en pequeños pedazos, miraba mi celular confirmando la hora, aún faltaba para que me reuniera con Hisame, pero, ¿por qué demonios me siento tan nervioso? Debo calmarme, termine con la pobre servilleta y estire mi mano para una nueva víctima, en eso escuche unos pasos, no había mucha gente ya que casi todos ya se habían ido a descansar, los pasos se acercaban más y más, me ponía cada vez más nervioso, sentí como una fría gota de sudor recorría mi columna, los pasos se hacían cada vez más fuertes, mis nervios no lo soportaban, hasta ir por fin cesaron detrás de mí, tragué saliva y fingí que no había escuchado nada, seguía mirando la pobre servilleta a medio partir y en mi visión pude notar también una rosa, me sorprendo, era una hermosa rosa roja.

La tome sorprendido incluso sonrojado ya que sentía mis mejillas arder, en ese momento vi a Hisame a un lado sonriendo con un ligero sonrojo, se veía realmente adorable, se sentó enfrente de mi, ¿a caso nuestra cita sería en la cafetería? Creo que mi expresión hablo por sí sola ya que lo escuche reír un poco.

Espero no haberte hecho esperar, pero imaginaras que no es fácil conseguir una rosa fresca a estas horas -me sonreía- espero te guste, por cierto te vez muy guapo -se sonrojaba y se apenaba un poco- bien debemos irnos, quiero llevarte al cine, hice una reservación para cenar -me miraba-

Solo asentí, le agradecí por la rosa y me levante de la silla, caminamos afuera de ains, vi un auto negro estacionado, era un auto muy hermoso, saco las llaves y abrió la puerta del copiloto para que yo entrara, me sentí como una adolescente en su primera cita, me ayudó a ponerme el cinturón y cerró la puerta, lo vi rodear el auto con una sonrisa y después él entró, se puso el cinturón y encendió el auto, durante el camino nos íbamos conociendo un poco mejor, reíamos y me sentí muy bien.

Cuando llegamos a la enorme plaza que se encontraba a las afueras de Kyoto, metió el auto al estacionamiento, apago el motor y salió del auto, yo estaba apunto de salir pero él abrió la puerta y me ayudó, le sonreí, definitivamente Hisame era muy tierno y un caballero, deje la rosa en el asiento y cuando cerró la puerta caminamos al cine.

¿Que película veremos Hisame? -le pregunte mirando la cartelera- sabes escuche que la de "el conjuro 2" está muy buena, Shoya y Tatsuya fueron a verla la semana pasada y nos dijeron que valía la pena -le sonreí-

Pues si quieres vemos esa Yo-Ka -me sonreía- que te parece si mientras compro los boletos, te formas en la dulcería y pides lo que quieras para los dos -me extendió unos billetes, me reí y me fui dejándolo con el dinero extendido, también yo debía poner algo en esta cita-

Llegue a la fila, mientras avanzaba miraba los menús y precios, creo que solo pediremos unas palomitas y dos bebidas, llego mi turno y pedí mi orden, cuando me dieron las cosas, pague y me fui a esperar a Hisame, el ya estaba ahí, me ayudó con la charola y miro lo que había pedido, entramos a la sala y tomamos nuestros lugares, mientras los cortos de otras películas empezaban, lo miraba de reojo en la obscuridad, sin que él lo notara, se veía realmente hermoso, su rostro, su cuello, sus hombros, su pecho, me gustaba ver cómo subía y bajaba al ritmo de su respiración, mordí mi labio involuntariamente, seguí bajando la mirada y vi su abdomen, me pregunto ¿cómo será?

Yo-Ka ¿estás bien? -Hisame me había descubierto, lo bueno que la charola estaba en la misma dirección, le dije que buscaba unos dulces pero que al parecer no nos los habían dado, el extendió unos dulces los cuales los estaba abriendo- son ¿estos?

Asentí y los tome sin decir nada, agradezco que las luces hayan estado apagadas, seguro ardía cual tomate, tome algunos dulces y deje la bolsa en la charola para que el también comiera, la película empezó, creo que fue mala idea, soy algo miedoso para estas cosas,  la película transcurría y aparece una escena donde sale un cuadro de una monja y una sombra camina hasta el cuadro, cuando se posiciona en el lugar del cuadro salen unas manos a los lados del marco y se lanza sobre la protagonista, me asusté un poco pero me sorprendió mucho cuando sentí los brazos de Hisame abrazarme y puso su cabeza en mi pecho asustado, solo lo reconforte, quería reírme pero se veía realmente adorable.